El derbi fat¨ªdico de Ancelotti
El entrenador del Madrid ha convencido a la directiva de que el 4-3-3 es el esquema t¨¢ctico menos competitivo contra el Atl¨¦tico, pero el relieve de Bale, Benzema y Cristiano no deja alternativas
El famoso aire fr¨ªvolo de Germ¨¢n Mono Burgos es la pel¨ªcula m¨¢s superficial de su notable persona. En lo que respecta al f¨²tbol, parte nuclear de su vida, no bromea. Antes del ¨²ltimo derbi, el que acab¨® 4-0 a favor del Atl¨¦tico, hablando entre amigos, el ayudante de Simeone se puso solemne para emitir su veredicto:
¡ªNosotros vamos a ganar; y ellos lo saben.
El Mono ten¨ªa raz¨®n. Aquel siete de febrero el ambiente era sombr¨ªo en el cuartel general del Madrid. El equipo se preparaba para acudir al Calder¨®n haciendo ejercicios de fatalismo. Desde la directiva, con Florentino P¨¦rez a la cabeza, hasta el entrenador, Carlo Ancelotti, pasando por los jugadores m¨¢s expertos, todos sab¨ªan que part¨ªan con una desventaja t¨¢ctica que neutralizaba la evidente superioridad t¨¦cnica de la plantilla madridista cada vez que se enfrentaba al vecino. El problema se situaba en la falta de especialistas en el mediocampo y ten¨ªa denominaci¨®n num¨¦rica: 4-3-3.
El pr¨®ximo martes, el Madrid visitar¨¢ otra vez el Calder¨®n. Esta vez ambos contendientes se juegan el pase a las semifinales de la Champions. A diferencia de lo que sucedi¨® hace dos meses, el equipo de Ancelotti ha recuperado jugadores fundamentales, como Ramos, Modric y James. Pero el problema persiste. En otro ejercicio de fatalismo estrat¨¦gico ¡ªsiempre que Bale, Benzema y Cristiano est¨¦n sanos¡ª el Madrid volver¨¢ a jugar con un 4-3-3.
La conquista de la D¨¦cima en la final de Lisboa a costa de un Atl¨¦tico mermado por las bajas de Costa y Arda, cubri¨® con un manto brillante la parte m¨¢s precaria del equipo. Una realidad que el entrenador, Carlo Ancelotti, se esforz¨® por describir a la directiva insistiendo durante meses que necesitaba centrocampistas con un perfil muy especial para acompa?ar a Alonso en el inexorable 4-3-3.
La ¨²ltima vez que el Madrid se impuso al Atl¨¦tico sin sobresaltos fue en la eliminatoria de Copa de febrero de 2014, con Modric, Di Mar¨ªa y Alonso en el mediocampo y frente a un Atl¨¦tico que experiment¨® con la l¨ªnea de interiores m¨¢s creativa en a?os: Diego Rivas, Arda y Koke. Desde Lisboa, el Madrid ha disputado seis partidos contra el Atl¨¦tico y no ha ganado ninguno. El balance: cuatro goles a favor y 11 en contra.
Los directivos y ejecutivos del Madrid ahora s¨ª dan la raz¨®n a Ancelotti, que ha utilizado el ejemplo del Atl¨¦tico para explicar que el club ha hecho un dise?o innecesariamente desequilibrado de su plantilla. Un dise?o que fuerza la formaci¨®n del 4-3-3 y que, puesto a confrontar el 4-4-2 de este Atl¨¦tico, resulta poco competitivo a pesar de reunir much¨ªsimo m¨¢s talento individual.
Simeone siempre logra superioridades num¨¦ricas en defensa y en ataque
Ancelotti explica que en el f¨²tbol moderno buena parte de los partidos se deciden en el tercio central del campo y que es precisamente ah¨ª donde el Atl¨¦tico siempre consigue una superioridad num¨¦rica. En ataque y en defensa. Para lograrlo, el plan de Simeone se ha repetido desde hace dos a?os: poblar el mediocampo con tres volantes centrales (elige entre Gabi, Tiago, Mario y Koke), situar a uno de ellos en una banda (Koke) y ocupar el otro costado con un interior (Sa¨²l) o con un mediapunta que ayude al mediocampo (Arda o Ra¨²l Garc¨ªa). El resultado es un 4-4-2 m¨¢s denso que la piedra, plagado de especialistas en cubrir los carriles centrales, cosa que implica altas dosis de generosidad en el esfuerzo.
En su exposici¨®n a los enviados de la directiva, Ancelotti ha subrayado que esta f¨®rmula del Atl¨¦tico coloca al Madrid en un doble dilema. Primero, cuando los tres volantes del Madrid atacan (pueden ser Kroos, Modric y James) chocan en inferioridad contra cuatro centrocampistas a los que siempre socorren los dos delanteros (Ra¨²l Garc¨ªa, Griezmann o Mandzukic se han dedicado a hostigar a Kroos en los ¨²ltimos derbis). Segundo, cuando defienden. El t¨¦cnico madridista advierte de que Simeone no permite a sus jugadores elaborar en campo propio, pero en campo rival los incita a mantener la posesi¨®n del bal¨®n. Ah¨ª vuelven a juntarse cuatro o cinco hombres del Atl¨¦tico para atacar a tres volantes del Madrid con escasa capacidad de robo. Ni Kroos, ni James, ni Isco, ni Modric se han formado en el oficio de defender y suelen sufrir para llegar a los cortes. Esto da tiempo a los jugadores del Atl¨¦tico ¡ªaunque sean t¨¦cnicamente inferiores¡ª a armar las jugadas.
Ancelotti lo avis¨®. Lo dijo antes del siete de febrero. Antes del 4-0. Entonces Florentino P¨¦rez comprendi¨® que el 4-3-3 pod¨ªa suponer un perjuicio. En adelante, procurar¨¢ corregirlo con otra pol¨ªtica de altas y bajas. Pero el martes, si est¨¢n todos sanos, la suerte estar¨¢ echada. Jugar¨¢n Bale, Benzema y Cristiano.
Cuatro genios en busca de sistema
El asunto es la comidilla de los t¨¦cnicos y empleados de los distintos departamentos y direcciones generales relacionados con el f¨²tbol en el Real Madrid. Dicen, y en esto los secunda el entrenador del primer equipo, Carlo Ancelotti, que el club se encuentra ante una paradoja de la exuberancia. Por un lado, la plantilla reune a cuatro de los mejores cinco especialistas del mundo para jugar en la mediapunta en un esquema de 4-2-3-1, por detr¨¢s del punta: Isco, Modric, Kroos y James ¡ªsolo falta Silva para reunir el quinteto top¡ª.Por otro, se?alan que el equipo no puede darles el espacio ideal para que florezcan sus virtudes ya que la presencia de Bale, Cristiano y Benzema obliga a jugar con un 4-3-3.
El resultado es que Isco, Modric, James y Kroos son fen¨®menos mundiales obligados a jugar fuera de la posici¨®n en la que se desarrollaron. Ancelotti lo dice en sus conversaciones con sus ayudantes en Valdebebas, con esa mezcla de pesimismo buc¨®lico e iron¨ªa que caracteriza sus juicios. ¡°Si cualquiera de estos futbolistas hubiera tenido que jugar como centrocampista en sus equipos de origen el Madrid no los habr¨ªa fichado¡±.
Isco, James, Modric y Kroos deslumbraron al mundo haciendo cosas que ahora se han visto obligados a dejar de hacer. M¨¢s o menos contra su naturaleza. Kroos y Modric son los m¨¢s adaptables. Isco y James, los menos. Pero todos encajan en el mismo patr¨®n.
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