Villar amenaz¨® al Gobierno a trav¨¦s de la FIFA
La organizaci¨®n futbol¨ªstica esgrimi¨® la posible expulsi¨®n de los equipos espa?oles de competiciones internacionales
En los d¨ªas previos a la convalidaci¨®n del real decreto sobre la venta centralizada de los derechos audiovisuales del f¨²tbol hubo un tenso cruce de cartas entre el Gobierno espa?ol y la FIFA, a la que el presidente de la Federaci¨®n Espa?ola (FEF), ?ngel Mar¨ªa Villar, solicit¨® ayuda para intentar modificar la nueva norma. Villar alegaba que la reglamentaci¨®n incurr¨ªa en injerencias de terceros en la organizaci¨®n futbol¨ªstica al desposeerla de la titularidad de dichos derechos. Tambi¨¦n apelaba el presidente de la FEF a la vulneraci¨®n de los puntos 13 y 17 de los estatutos de la FIFA.
El socorro del organismo que rige el f¨²tbol mundial fue una misiva enviada el 11 de mayo a la propia Federaci¨®n Espa?ola en la que avisaba de que ¡°la situaci¨®n que se vive en Espa?a podr¨ªa dar lugar a la imposici¨®n de sanciones, que podr¨ªan incluir una suspensi¨®n¡±. De haberse llevado hasta el final esta amenaza la selecci¨®n y los clubes espa?oles hubieran quedado excluidos de las competiciones internacionales.
La falsa demencia que un detenido aleg¨® para ser estadounidense
En el escrito de acusaci¨®n del FBI contra directivos de la FIFA hay un caso relevante que muestra la capacidad para influenciar y corromper que ten¨ªan los dirigentes investigados. La treta que utiliz¨® el uruguayo Eugenio Figueredo para obtener la nacionalidad estadounidense en 2006 da la medida real de la alargada y oscura sombra de la FIFA.
Figueredo, vicepresidente y luego presidente de la Confederaci¨®n Sudamericana entre 2013 y 2014 y componente de las comisiones de finanzas de la FIFA, aleg¨® problemas mentales para obtener la nacionalidad estadounidense.
Con esta alegaci¨®n pudo sortear el examen de idioma requerido y tambi¨¦n el de conocimientos c¨ªvicos. Para ello, Figueredo present¨® documentos en los que explicaba que padec¨ªa una severa demencia. El uruguayo reside en Arcadia (California) desde 2005, pero ahora permanece incomunicado en la prisi¨®n de Z¨²rich y sus cuentas han sido embargadas.
Ante la beligerancia de la carta de la FIFA, firmada por su secretario general J¨¦r?me Valcke, el Gobierno espa?ol, por medio del secretario de Estado de Deportes, Miguel Cardenal, respondi¨® el 13 de mayo con un escrito duro y contundente que desafi¨® a la organizaci¨®n del dimitido Joseph Blatter. El punto tres de la carta fue un pulso en toda regla: ¡°A la vista de cuanto antecede, me gustar¨ªa indicarle que si se produjera la adopci¨®n por la FIFA de cualquier medida que pusiera en riesgo la participaci¨®n internacional de equipos espa?oles, es intenci¨®n de este Gobierno informar a los Ministros de Deporte de la Uni¨®n Europea y requerir la adopci¨®n de cuantos acuerdos sean oportunos para garantizar la soberan¨ªa del Reino de Espa?a¡±. La advertencia tuvo un efecto inmediato en la FIFA, que evit¨® reiterar la amenaza y esta vez se limit¨® a se?alar que segu¨ªa de cerca lo que suced¨ªa en el f¨²tbol espa?ol.
Villar intentaba echar un pulso al Gobierno, con la idea de que este podr¨ªa sentirse intimidado ante la proximidad del periodo electoral que se avecinaba y la posibilidad de que la FIFA hubiera impedido, por ejemplo, que el Barcelona o Real Madrid disputaran la final de la Liga de Campeones y el Sevilla de la Liga Europa. Seg¨²n fuentes gubernamentales, para cuando se convalid¨® el real decreto, el Ejecutivo, que hab¨ªa contactado con algunos miembros de la FIFA, ya sab¨ªa que esta no iba a actuar contra la nueva norma. La intenci¨®n de Villar era presionar al Gobierno para que se tramitara como proyecto de ley y aceptara las enmiendas propuestas por la FEF. Espa?a ya supo de la capacidad de la FIFA para amedrentar gobiernos en 2008 y de la facilidad de la FEF para recurrir a esa fuerza.
El intento del socialista Jaime Lissavetsky, por entonces secretario de Estado para el Deporte, de que Villar adelantara las elecciones de la FEF a fechas previas a los Juegos Ol¨ªmpicos, siguiendo la misma pauta que el resto de las federaciones deportivas, estuvo a punto de dejar a Espa?a sin acudir a la Eurocopa que terminar¨ªa conquistando. Villar articul¨® un c¨®digo electoral para impedir el adelanto de los comicios, y Lissavetsky, bajo la amenaza de la FIFA de no dejar participar a Espa?a en el campeonato de Europa, acept¨® que se postergaran las elecciones. Esta vez, el Gobierno no se amedrent¨®.
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