Bolivia se rebela contra su historia

Hay equipos que parecen condenados a la derrota. Es el caso de Bolivia, que en cada excursi¨®n lejos de la altura de La Paz camina de derrota en derrota. Bolivia se rebel¨® contra su curr¨ªculo y se llev¨® los tres puntos, despu¨¦s de 17 partidos sin conocer la victoria en la Copa Am¨¦rica. La moneda ten¨ªa que caer del lado boliviano y su suerte la padeci¨® Ecuador. La Tricolor se fue de Valpara¨ªso con sabor amargo. No mereci¨® la derrota y sucumbi¨® frente a sus propias debilidades: distracciones en la zaga y la falta de punter¨ªa de sus delanteros.

Arranc¨® atrevida Bolivia. Olvidadiza de su etiqueta de la cenicienta de Am¨¦rica. Mauricio Soria, t¨¦cnico del cuadro boliviano, sabe perfectamente las debilidades de sus muchachos. Su estrategia, simple: disimularlas. Plant¨® un 4-4-2 el entrenador del conjunto verde, bien cerca de su portero sin el bal¨®n. Y busc¨® incomodar con la presi¨®n alta a los ecuatorianos. Todo eso, m¨¢s un plus, a Bolivia le salieron todas bien. Todo lo contrario le pasaba a Ecuador. Despistada e imprecisa, la Tricolor no daba pie con bola. Ni Noboa cog¨ªa el tim¨®n en el medio ni Jefferson Montero pon¨ªa v¨¦rtigo.

Peg¨® r¨¢pido Bolivia. El central Raldes se aprovech¨® de que su pareja de baile, el extremo Fidel Mart¨ªnez, todav¨ªa ni se hab¨ªa enterado del pitido inicial, y cabece¨® en soledad el c¨®rner de Smedberg. Tiene una derecha venenosa el sueco, que ya hab¨ªa avisado con un tiro libre desde la frontal (hizo estirar al portero Dom¨ªnguez) y no dud¨® ni un segundo para soltar un disparo desde el balc¨®n del ¨¢rea que sentenci¨® la segunda diana boliviana. Ayov¨ª se durmi¨® en la salida y esa es una mala receta frente a un trotamundos como Martins. El delantero desprendi¨® r¨¢pido el bal¨®n para el escandinavo, que lo mand¨® a la red.

El cuadro verde capitalizaba todas las ?o?er¨ªas de Ecuador en el fondo. Como la de Erazo, que en su torpe af¨¢n por despejar el bal¨®n casi le arranca la cabeza Lizio. Penalti, que Martins se encarg¨® de cambiar por gol. Antes Enner Valencia hab¨ªa desperdiciado otra pena m¨¢xima en la otra ¨¢rea. El ¨¢rbitro se?al¨® un penalti dudoso por un supuesto manotazo de Zenteno a Enner Valencia. El mismo Valencia se deb¨ªa encargar de rematar la faena. Y lo hizo bien. Pero, el ¨¢rbitro, quiz¨¢ culposo, se lo hizo repetir por invasi¨®n de ¨¢rea. En su segunda oportunidad, le regal¨® el bal¨®n al guardameta Qui?onez.

Ten¨ªa la noche nublada el conjunto ecuatoriano. El 3-0 s¨®lo se explicaba por sus errores defensivos, que contrarrestaba con el acierto boliviano. Agit¨® el banquillo Gustavo Quinteros. Mand¨® al campo a Cazares, que espabil¨® al resto de sus compa?eros, sobre todo a Jefferson Montero. El extremo se sac¨® a dos marcadores de encima en un movimiento y le cedi¨® el cuero a Enner Valencia para anot¨¦ el primero para la Tricolor. Con todo el segundo tiempo por delante, Ecuador acorral¨® a Bolivia, a la que s¨®lo la sosten¨ªan los guantes de su arquero y la fortuna. Bola?os puso el 2-3 con un bombazo de media distancia, pero el larguero escupi¨® lo que hubiese significado un empate justo. Sin embargo, el f¨²tbol no entiende de justicias.

Despert¨® tarde Ecuador, que pec¨® de inocente en el primer tiempo y de falta de punter¨ªa en la segunda parte. Para Bolivia, contundencia y desobediencia a su curr¨ªculo. Se rebel¨® contra su historia el conjunto verde y ya sue?a con los cuartos de final.