G¨¹iza, el nuevo m¨¢gico del C¨¢diz

¡°Lo primero que tengo que hacer es pedir perd¨®n. He dicho muchas tonter¨ªas a lo largo de mi vida, pero he madurado bastante y solo espero poder subir con el C¨¢diz¡±. A sus 34 a?os, Dani G¨¹iza tiene de nuevo que pedir perd¨®n. Lo hizo en su presentaci¨®n como nuevo jugador del club andaluz, al que llega de la mano del presidente Manuel Vizca¨ªno. Se supone que ser¨¢ el ¨²ltimo viraje de su dilatada carrera deportiva. Por supuesto, la pol¨¦mica le ha vuelto a acompa?ar en esta nueva aventura, tal y como ha ocurrido en una trayectoria salpicada de accidentes extradeportivos y tambi¨¦n de indudables ¨¦xitos. Ahora, viste la camiseta del C¨¢diz, en Segunda Divisi¨®n B y con el objetivo inexcusable de subir a Segunda A, despu¨¦s de haberse confesado un destacado anticadista. ¡°Jam¨¢s vestir¨¦ la camiseta amarilla del C¨¢diz¡±, afirm¨® G¨¹iza en 2007. Algo l¨®gico siendo de Jerez y xerecista. El Xerez y el C¨¢diz mantienen una ac¨¦rrima rivalidad.

La afici¨®n amarilla no se lo perdon¨® en su presentaci¨®n, que tuvo que ser a puerta cerrada en el Ram¨®n de Carranza. ¡°G¨¹iza mu¨¦rete¡±, gritaron los aficionados del equipo andaluz mientras el delantero se vest¨ªa con la camiseta del C¨¢diz. En mayo de 2006, el Getafe en el que jugaba G¨¹iza gan¨® al C¨¢diz y lo mand¨® a Segunda Divisi¨®n. A lo largo de la semana, G¨¹iza no se cort¨® a la hora de expresar su deseo de mandar al C¨¢diz a la categor¨ªa de plata.

Nueve a?os despu¨¦s, G¨¹iza llega como el gran fichaje estrella de un equipo que cay¨® ante el Athletic B en la ¨²ltima eliminatoria de ascenso a Segunda A.

Cerca de cumplir los 35 a?os, el jerezano ha vivido una carrera de lo m¨¢s rocambolesca. Se inici¨® en el Xerez de su tierra natal y desde muy pronto combin¨® sus excelencias futbol¨ªsticas con su pasi¨®n por las salidas nocturnas y una vida personal de lo m¨¢s desordenada. Pas¨® luego al Dos Hermanas, Mallorca B, Mallorca, Recreativo y Barcelona B. En el cuadro catal¨¢n jug¨® media temporada (2002-03) al lado de V¨ªctor Vald¨¦s, Iniesta, Verd¨², Trashorras o Sergio Garc¨ªa. Cuando su estrella se apagaba, recal¨® en el Ciudad de Murcia, en Segunda Divisi¨®n A, donde destacaron las cualidades de este futbolista como delantero: un gran olfato de gol y una cualidad innata para el desmarque. ¡°Es el futbolista que mejor he visto desmarcarse en mi vida deportiva¡±, recuerda Juanito, central del Betis y compa?ero de G¨¹iza en la selecci¨®n nacional.

Pichichi y Bota de Plata europeo en 2008, G¨¹iza prob¨® fortuna en el f¨²tbol malayo y el Cerro Porte?o de Paraguay

Tras dos temporadas en el Ciudad de Murcia, G¨¹iza recala en el Getafe, donde explota en su rendimiento. Encauza su vida privada y en la temporada 2007-08 consigue un hito en la historia del f¨²tbol espa?ol: anota 27 goles con el club madrile?o y se lleva el Pichichi. Adem¨¢s de ser Bota de Plata europeo, G¨¹iza es el ¨²ltimo m¨¢ximo goleador espa?ol de la Liga antes de la dictadura impuesta por Messi y Cristiano con un a?o de dominio de Forl¨¢n.

2008 en su a?o de gloria. Luis Aragon¨¦s lo lleva a la Eurocopa y anota dos goles en un torneo donde Espa?a gana y borda el f¨²tbol. Su segundo gol, el tercero ante Rusia en las semifinales, pone el punto final a una de las mayores disertaciones de f¨²tbol espa?ol de su historia.

Aragon¨¦s se lo lleva al Fenerbah?e, donde juega tres temporadas a un nivel irregular. Se convierte en un aut¨¦ntico sult¨¢n y comienza a ser conocido m¨¢s por sus andanzas fuera que dentro del campo. No obstante, supera una grave lesi¨®n, vuelve al Getafe y todav¨ªa emprende una ex¨®tica aventura al f¨²tbol malayo. Alejado ya de los focos medi¨¢ticos, G¨¹iza todav¨ªa se siente futbolista en el Cerro Porte?o, un hist¨®rico del f¨²tbol paraguayo al que llega en julio de 2013. Gana un Clausura y se convierte en uno de los cuatro espa?oles que ha logrado anotar en la Copa Libertadores. Quique Pina, con el que convivi¨® en los lejanos tiempos del Ciudad de Murcia, lo ha contratado para el C¨¢diz, que tiene ya a su nuevo m¨¢gico, genial en el terreno de juego y d¨ªscolo fuera de ¨¦l.