Djokovic y una tiran¨ªa a la vista
Con su segundo t¨ªtulo en Nueva York y su 10? del Grand Slam, el rey Djokovic refrenda su dominio absoluto del circuito y se postula para ingresar en el club de los m¨¢s grandes
En las entra?as de la Arthur Ashe, la pista de tenis m¨¢s grande del mundo, un rugido tremendo a dos voces: ¡°This is Sparta!¡±. Despu¨¦s de batir a Roger Federer (6-4, 5-7, 6-4, y 6-4, en tres horas y 20 minutos) y alzar su segundo trofeo en Nueva York, el s¨¦ptimo de la temporada, Novak Djokovic estaba euf¨®rico. Depart¨ªa el serbio con Gerard Butler, el protagonista de 300, y al un¨ªsono exhalaron el grito de guerra espartano, con un tono grave y ronco, intimidatorio. Previamente, antes de la ceremonia final, Nole ya hab¨ªa proferido la misma consigna junto a su equipo, una vez que se hab¨ªa encaramado a la grada. Era una forma de decir: aqu¨ª estoy yo, yo mando. El rey es Djokovic.
Y, hoy d¨ªa, no hay objeci¨®n alguna al respecto. A sus 28 a?os, padre feliz y n¨²mero uno indiscutible del circuito, el de Belgrado est¨¢ redondeando un a?o maravilloso. Se ha adjudicado tres de los cuatro grandes ¡ªsolo se le escap¨® Roland Garros¡ª, adem¨¢s de otros cuatro laureles del Masters 1.000 (Indian Wells, Miami, Montecarlo y Roma); cosecha 63 triunfos y solo cinco derrotas; ostenta el r¨¦cord de puntos (16.145) en el r¨¢nking de la ATP, con Federer (9.405), Andy Murray (8.660), Stanislas Wawrinka (6.000) o Rafael Nadal (3.770) a un mundo de distancia; y con su 10? corona de un Grand Slam, comienza a asomarse sin disimulo al club m¨¢s selecto del tenis.
¡°He llegado a los dos d¨ªgitos y me halaga estar en ese grupo de jugadores, entre esas leyendas de nuestro deporte¡±, admit¨ªa Nole, que ejerce con tiran¨ªa desde que se hiciera con el n¨²mero uno el 7 de julio de 2014; ¡°he cuidado siempre mucho mi cuerpo y mi mente, as¨ª que conf¨ªo en que ese estilo de vida me aporte longevidad y pueda luchar por m¨¢s triunfos. Ha sido una temporada incre¨ªble. Me siento m¨¢s completo, f¨ªsicamente m¨¢s fuerte y mentalmente m¨¢s preparado¡±.
Es un muro. Ahora selecciona y trabaja como los grandes" Alex Corretja, extenista
Este a?o, Djokovic ha ganado pr¨¢cticamente todo; para los dem¨¢s, unas pocas migas. Su opositor m¨¢s firme ha sido Federer, que a sus 34 a?os reinventa f¨®rmulas para plantarle cara, aunque lo l¨®gico ser¨ªa que estuviera ya de vuelta. El resto, poquita cosa. No se adivina rival que pueda frenarle a corto plazo. La pregunta es, entonces: ?Hasta d¨®nde llegar¨¢ el serbio? ?Alcanzar¨¢ los 14 de Nadal o los 17 de Sampras?
¡°Nunca se sabe, porque las rachas cambian, pero los pr¨®ximos tres o cuatro a?os ser¨¢ el hombre a batir¡±, afirma el extenista Alex Corretja. ¡°A un partido, tal vez... Pero lo que est¨¢ haciendo es casi insuperable. El tema es que no veo indicios de que vaya a ceder o a bajar el tirmo¡±, prolonga Carlos Moy¨¤, en su d¨ªa n¨²mero uno. ¡°Llegar a esas cifras es complicad¨ªsimo, pero si ni siquiera el mejor Federer ha podido con ¨¦l...¡±, agrega Jordi Arrese, plata en Barcelona 92.
La metamorfosis de Nole ha sido progresiva, pero en el ¨²ltimo lustro ha ido imponi¨¦ndose poco a poco. En ese periodo suma nueve Grand Slams (en 16 finales), 19 Masters 1.000 y tres Copas de Maestros. Nadal acumula ocho grandes (en 12 finales) y 12 cetros de segunda categor¨ªa, mientras Federer se queda en dos (en seis finales) y seis, respectivamente, adem¨¢s de dos ATP World Tour Finals (Londres). ¡°Es un muro. Se est¨¢ dando cuenta de hasta d¨®nde puede llegar. Ahora selecciona y trabaja como los grandes¡±, explica Corretja. ¡°F¨ªsicamente es el m¨¢s fuerte y a nivel mental cambi¨® de actitud. Es m¨¢s serio, ya no hace teatro¡±, apunta Arrese. ¡°En los momentos decisivos, ¨¦l nunca te va a regalar nada. A cinco sets es el mejor, con mucha diferencia¡±, remata Moy¨¤.
No veo indicios de que a corto o medio plazo vaya a ceder o bajar el tirmo" Carlos Moy¨¤, extenista
As¨ª dicta y ordena Djokovic, el espartano, capaz de anular 19 opciones de ruptura a todo un Federer. ¡°Yo no dir¨ªa que estoy dominando, pero s¨ª que estoy muy orgulloso de todos los logros¡±, aten¨²a el serbio, al que hoy d¨ªa parece imposible hacerle sombra. Est¨¢ ¨¦l y, a sus espaldas, un pelot¨®n resignado. A la vista, escasas opciones de que cambie el panorama. Su grito de guerra resuena demasiado fuerte.
V?DEO: Novak Djokovic, Gerard Butler y un grito de guerra: This is Sparta!
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