Recital del Real Madrid ante el Bayern

En la cartograf¨ªa del campe¨®n de Europa, la distancia que hasta esta noche separaba M¨²nich de Berl¨ªn era de casi 600 kil¨®metros, cinco meses de calendario y un cargamento de angustia. Con una exhibici¨®n de car¨¢cter y talento, el Real Madrid acort¨® esos m¨¢rgenes y agarr¨® con firmeza las opciones de acceder al top 16 que hace unos d¨ªas se tambaleaban en la cornisa. Los de Laso arrollaron al Bayern con un parcial de 2-21 al comienzo del tercer acto liderado por un tit¨¢nico Ay¨®n (22 puntos, 9 rebotes y cuatro asistencias para un 41 de valoraci¨®n) y dependen de s¨ª mismos para continuar en la pelea rumbo a su cuarta final four consecutiva, la que se disputar¨¢ en mayo en la capital alemana, si vencen en la ¨²ltima jornada al Estrasburgo en el Barclaycard Center en la ¨²ltima jornada de la primera fase. La batuta de Sergio Rodr¨ªguez (10 asistencias), la ¨¦pica de Llull (18 puntos) y la jerarqu¨ªa de Felipe completaron una memorable exhibici¨®n de los blancos.

Orgullo de campe¨®n, luciendo bajo presi¨®n. ¡°Esta situaci¨®n es muy diferente a la de otros a?os, pero no nos queda otro remedio que aceptarlo. Tenemos que hacer el esfuerzo de entender el partido desde el principio¡±, proclam¨® Laso en los proleg¨®menos del encuentro. Pero, entre los nervios y la galbana, sus jugadores concedieron un parcial de 12-5 en apenas cinco minutos que pronto empin¨® la misi¨®n en el Audi Dome. El t¨¦cnico vitoriano necesit¨® repasar de nuevo la cartilla y retocar el quinteto con la salida de Taylor por Maciulis para certificar el aterrizaje definitivo del Madrid en M¨²nich. Seis puntos consecutivos de Ay¨®n, un lote de defensas en zona con la presi¨®n adelantada y un bingo de Thompkins desde el 6,75 dieron la vuelta al marcador en un santiam¨¦n (14-15, m. 8). Los blancos cerraron filas en torno a su aro y, en ese tramo, solo concedieron una canasta en juego en los primeros cinco minutos del segundo cuarto. Argumento suficiente para discutir el mando a la entusiasta tropa local.

Mientras encontraba el paso y el tempo, el Madrid alternaba buenas y malas noticias. Thompkis, ansioso y desubicado en su regreso tras la lesi¨®n de mu?eca, coleccion¨® tres faltas personales antes de romper a sudar y la circunstancia precipit¨® el debut de Ndour. Pero, con un cinco in¨¦dito (Doncic, Carroll, Taylor, Ndour y Willy Hernang¨®mez), los blancos mantuvieron el tipo con solvencia a pesar de su desmedida en los lanzamientos de tres (alguno de ellos no tocaron ni el aro) y del dominio del conjunto alem¨¢n en el rebote ofensivo.

La pelea bajo los aros la compens¨® la vigorosa aparici¨®n de Willy (con siete rebotes en seis minutos), pero KC Rivers (22 puntos al final) escap¨® a los grilletes madridistas y con 8 puntos consecutivos y un 3 de 3 en triples situ¨® a los de Pesic en la pole rumbo al segundo periodo (38-34, m. 19). Pero ah¨ª se achic¨® el Bayern y se agigant¨® el campe¨®n. ¡°No tenemos que permitir que corran¡±, ped¨ªa el entrenador serbio. Pero, antes de acabar la frase, el campe¨®n ya hab¨ªa emprendido la fuga.

A la vuelta de los vestuarios, el Madrid imparti¨® un memorable recital defensivo que rompi¨® el partido, derriti¨® al Bayern, acredit¨® su furia competitiva y consolid¨® sus opciones de alcanzar el pase al top 16 tras superar la segunda de las dos finales a las que le aboc¨® un recorrido ciclot¨ªmico en el comienzo de la competici¨®n. El tercer acto fue el epicentro de una tormenta: un parcial de 2 a 21 que dej¨® tiritando al rival y dio lustre al colmillo blanco. 9 puntos de Ay¨®n, 8 de Llull y 4 de Sergio Rodr¨ªguez impulsaron en esos minutos al conjunto de Laso cuando m¨¢s lo necesitaba (40-57, m. 27). Un cicl¨®n de defensa, rebote y contraataque. La f¨®rmula del ¨¦xito. Solo pudieron anotar dos puntos los alemanes en mitad de la tormenta. La diferencia se dispar¨® por encima de los 20 puntos (55-79, m. 35) y se qued¨® en 19 (67-86). El campe¨®n sac¨® la furia cuando se vio acorralado.