J¨¦mez: ¡°Si en la vida tienes miedo, no puedes ser entrenador¡±

Paco J¨¦mez (Las Palmas, 45 a?os) hilvana una frase detr¨¢s de otra. La expresividad que desborda en un banquillo tambi¨¦n la tiene fuera del terreno de juego. Gesticula, mira a los ojos y habla sin tapujos. En los nueve a?os que lleva de entrenador, los ¨²ltimos tres y medio en el Rayo Vallecano, no ha tenido tiempo para grandes decepciones. Amante del f¨²tbol ofensivo y de la disciplina en sus plantillas, el equipo entr¨® en los puestos de descenso la semana pasada y este domingo visita el Santiago Bernab¨¦u (16.00, Canal + Liga). ¡°Vamos all¨ª a disfrutar. Estos partidos los interpretamos como un premio¡±, explica.

Pregunta. Estuvo en aquel Zaragoza que gan¨® al Real Madrid 1-5.

Respuesta. [Cierra los pu?os con fuerza y desborda alegr¨ªa]. No hay mucha gente que pueda decir eso, la liamos mucho. La gente puede interpretar que el 1-5 fue un accidente. Jugamos bien, pero entiendes que para que se d¨¦ ese resultado tienes que estar muy, muy bien y el Madrid muy, muy mal. En cambio, el 0-4 del Barcelona nadie entiende que fuera un accidente, sino que hab¨ªa algo m¨¢s.

P. ?Ha hablado con su plantilla del 1-5 para motivarlos?

R. Pues no s¨¦ si alguna vez se lo he contado, no soy muy de batallitas. A lo mejor para vacilarles s¨ª se la he podido tirar. Lo que hay que tener claro es que hay muy pocos equipos peque?os que ganen al Madrid o al Bar?a. Pasan las ligas y no lo consigue nadie.

P. ?Le preocupa que est¨¦n tan poco competidos estos partidos?

A m¨ª me importa que juguemos bien, sin importar el resultado. No soy un entrenador resultadista

R. A todos nos gustar¨ªa que la liga fuera m¨¢s competida. No somos tontos. Sabemos que casi no hay posibilidades de ganar en el Bernab¨¦u. Yo lo que intento transmitir a mis jugadores es que vayan a muerte para hacer realidad esa peque?a posibilidad de ganar.

P. A lo mejor con un marcaje individual como los que hac¨ªa¡­

R. No, no. Ni aun as¨ª nos valdr¨ªa. La clave no est¨¢ en preocuparse por estas cosas. Lo que no se puede cambiar hay que aceptarlo. Eso no quiere decir que vayas entregado a un campo, pero viajas sabiendo que es m¨¢s f¨¢cil que pierdas. A m¨ª me importa que juguemos bien, sin importar el resultado. No soy un entrenador resultadista. Cuando lo eres y no ganas, te quedas sin nada con lo que compensar a tus aficionados.

P. ?Qu¨¦ espera del partido?

R. Jugar bien, en eso podemos ganar al Madrid. A lo mejor llegamos al Bernab¨¦u y lo hacemos mejor que ellos. Que luego en resultado son mejores, ah¨ª tengo pocas dudas.

P. ?La afici¨®n le echa en cara no tener buenos resultados?

R. El primero que se juega la cabeza con los resultados es el entrenador; pero para ganar tenemos que jugar bien, que es lo que quiero que entienda la gente. ?Crees que voy al Bernab¨¦u pensando en los resultados? Estar¨ªa loco perdido, bueno, a veces un poco. No puede decirle a mis jugadores ¡®vamos chicos, vamos a ganar al Madrid¡¯. Se descojonar¨ªan de m¨ª. S¨ª les puedo contar que tenemos una oportunidad entre mil y que hay que aprovecharla.

P. La jornada siguiente otro derbi, contra el Atl¨¦tico. ?Qu¨¦ diferencias ve entre ambos clubes?

R. El Atl¨¦tico es una balsa de aceite y el Madrid todo lo contrario. Lo que ocurre en el Atl¨¦tico se minimiza y lo que pasa en el Madrid se le da un bombo tremendo. Y en lo futbol¨ªstico tambi¨¦n hay bastantes diferencias.

P. ?Ser¨ªa seleccionador de Espa?a?

R. Por supuesto que estar¨ªa dispuesto. Mi nombre ha salido hasta en las cajas de galletas y entiendo que esto es parte de mi trabajo, pero lo ser¨ªa.

P. ?Le ha llamado la Federaci¨®n?

R. No, no. Habr¨ªa sido un honor y ya le habr¨ªa dado la contestaci¨®n. Lo tengo clar¨ªsimo, pero no ha sido el caso y depender¨¢ de lo que Del Bosque haga a partir de la Eurocopa.

P. ?Lo aceptar¨ªa?

R. Claro que s¨ª. A partir del 30 de junio soy un entrenador que quedo libre y espero que esto no est¨¦ as¨ª por mucho tiempo.

P. ?Est¨¢ dispuesto a irse del Rayo Vallecano cuando termine la temporada?

R. S¨ª. Ahora tenemos algo que es muy problem¨¢tico. Tenemos a una parte de la afici¨®n sin animar y a otra que increpa a esta afici¨®n. Si esta situaci¨®n no se arregla, el a?o que viene no estoy aqu¨ª.

P. ?Echa en falta que animen?

R. ?Claro! Los equipos que vienen a Vallecas juegan con ventaja. No hay ning¨²n escenario mejor para los equipos que juegan aqu¨ª, es como si estuvieran en su casa. Nosotros vamos al l¨ªmite, pero al l¨ªmite del l¨ªmite. Todo tiene que funcionar para ayudar al equipo. En el momento que haya varias cosas que no funcionen, estamos jodidos.

P. ?Ha hablado con los bucaneros, que est¨¢n en huelga de animaci¨®n?

Tenemos a una parte de la afici¨®n sin animar y a otra que increpa a esta afici¨®n. Si esta situaci¨®n no se arregla, el a?o que viene no estoy aqu¨ª

R. S¨ª. Para nosotros son important¨ªsimos y se lo he hecho saber. Les he dicho que, con esa decisi¨®n, perjudican al equipo. No s¨¦ si es un problema de la presidencia o del Gobierno, que ha prohibido muchas cosas. La culpa no la tenemos nosotros.

P. Pero desde el asesinato de Jimmy, los grupos radicales est¨¢n m¨¢s controlados.

R. Desde mi experiencia aqu¨ª, nuestros aficionados han sido un ejemplo. No les he visto tirar nada al campo, un foll¨®n o una pelea. Que pas¨® lo que pas¨® en otro campo de la ciudad, cierto. Desde entonces se ha intentado evitar la aparici¨®n de estos grupos en los campos. No doy ni quito la raz¨®n, solo quiero que todos se junten, lleguen a un consenso y podamos trabajar lo m¨¢s a gusto posible.

P. ?Cree que los violentos han campado a sus anchas en el f¨²tbol?

R. A esos grupos radicales que cometen actos violentos, a por ellos. Yo aqu¨ª no lo he visto. Si alguien lo ha hecho, que me lo muestre.

P. ?Ha rechazo alguna oferta?

R. S¨ª, sobre todo de fuera.

P. ?De qu¨¦ ligas?

R. Grecia, Turqu¨ªa, Rusia¡­ Te intentan compensar con dinero, pero aqu¨ª sigo. No tengo prisa y creo que no es el momento.

P. ?En qu¨¦ entrenadores se fija?

R. En cualquiera. Puedes aprender de cualquiera. Veo a equipos que juegan de una manera diferente a la m¨ªa y aprendo much¨ªsimo. Mira, el otro d¨ªa fui a ver a los infantiles y me gust¨® un ejercicio que estaban haciendo. Me puse en casa, lo compliqu¨¦, le di mil vueltas y me sali¨® un ejercicio bastante bueno. ?Y lo aprend¨ª de infantiles!

P. A los extremos los cambia con cierta frecuencia¡­

R. Los cambios son as¨ª porque Bebe y Lass tienen que aprender a rendir durante 90 minutos. Si hacen un partido bueno, no los cambio porque hacen bien las cosas.

P. ?Es algo f¨ªsico?

Si alg¨²n d¨ªa viene un descenso, es parte de mi trabajo. Ojal¨¢ hubiera una f¨®rmula m¨¢gica

R. Es una cuesti¨®n m¨¢s mental. Se despistan. Quiero que me den 90 minutos de calidad.

P. ?Lo habla con ellos?

R. Ellos lo saben. Cuando los cambio, les explico por qu¨¦ los saco del campo.

P. ?Tiene miedo al descenso?

R. No tengo miedo a casi nada, solo a que mi gente no est¨¦ bien. Si en esta vida tienes miedo, no puedes ser entrenador; o ser¨ªa un entrenador cag¨®n. Si alg¨²n d¨ªa viene un descenso, es parte de mi trabajo. Ojal¨¢ hubiera una f¨®rmula m¨¢gica. La prueba m¨¢s patente la tenemos este a?o con el Chelsea de Mourinho. Es la grandeza del f¨²tbol.

P. ?Est¨¢ tranquilo?

R. Muy tranquilo. Le transmito tranquilidad a mis jugadores y ellos a m¨ª. Aqu¨ª hemos vivido momentos complicados. El segundo a?o, ¨ªbamos ¨²ltimos con 16 puntos en la primera vuelta y terminamos en mitad de la tabla. Los equipos que se meten en situaciones complicadas y no mantienen la calma son los que caen a Segunda seguro. No encuentro motivos para preocuparme en exceso, pero tampoco estoy dando saltos de alegr¨ªa.