Nadal, por la v¨ªa de la consistencia
El n¨²mero cinco, cada vez m¨¢s s¨®lido, supera al ucraniano Marchenko y disputar¨¢ por 99? vez la ronda final de un torneo. Enfrente, el supremo Djokovic (6-3 y 7-6 a Berdych)
Lo contrario hubiese sido un sorpres¨®n, un pelotazo, as¨ª que?Rafael Nadal actu¨® acorde a la l¨®gica: 6-3 y 6-4 al ucraniano Illya Marchenko, despu¨¦s de 78 minutos. Es decir, el de Manacor alcanz¨® la final del torneo de Doha, la 99? de su carrera, tercera sobre la superficie dura del evento catar¨ª. En ella se medir¨¢ este s¨¢bado (16.00, Eurosport) al n¨²mero uno del circuito, Novak Djokovic, que bati¨® al checo Tomas Berdych por 6-3 y 7-6. Ante el serbio, igualdad estad¨ªstica: 23 triunfos para cada uno. Eso s¨ª, Nole le someti¨® el a?o pasado con cuatro victorias en otros tantos duelos: Montecarlo, Par¨ªs, Pek¨ªn y el Masters de Londres.?
Llega a las primeras de cambio una cita de altura para Nadal. Un duelo frente al rey del circuito, lo que permitir¨¢ extraer conclusiones m¨¢s fidedignas de su realidad actual. Un presente esperanzador, tanto por el hecho de que haya sido capaz de sortear sin excesivos contratiempos los cuatro primeros escollos del a?o como por las sensaciones que desprende a estas alturas, cuando en el horizonte asoma ya el primer grande de la temporada: el Abierto de Australia (del 18 al 31 de enero).
La radiograf¨ªa general expresa que Nadal es m¨¢s Nadal, en una versi¨®n menos ¨¦pica y m¨¢s lineal, pero nuevamente competitiva. Consistente. Su cuerpo y los golpes le acompa?an y la mente tambi¨¦n. En esta primera semana de competici¨®n oficial -el pasado domingo venci¨® en la exhibici¨®n de Abu Dabi- ha evidenciado que el mal de altura qued¨® atr¨¢s, lejos ya, que es capaz de afrontar escenarios adversos. Del mismo modo, que su derecha liftada va recuperando el tono y que su rev¨¦s es una ballesta. Pero, por encima de todo, en estos primeros partidos se obtienen otras dos lecturas bienvenidas: el servicio y el espacio.
Ante Marchenko, al que las bombas y la guerra le obligaron a emigrar de Donetsk a Eslovaquia hace dos a?os, el balear se asegur¨® el 89% de los puntos con primeros saques (33 puntos de 37 en total, y un 100% en el primer parcial, 22 de 22). Y, adem¨¢s, demostr¨® que poco a poco ha ido recuperando el sitio en la pista. Si el curso pasado era com¨²n verle desubicado, percutiendo desde posiciones escoradas e inc¨®modas, ahora domina de nuevo desde el centro de la l¨ªnea de fondo.
Disputar¨¢? su 99? final, algo de lo que solo pueden presumir Connors (163), Lendl (147), Federer (135),? McEnroe (108) y Vilas?(104)
Hoy d¨ªa, Nadal (15 ganarores y 11 errores no forzados, por 14 y 22 del otro lado) ans¨ªa ser m¨¢s concreto. En la medida de lo posible, busca r¨¢pido el punto y acortar su estancia en la pista. Qued¨® patente frente a Robin Haase, ventilado en 66 minutos, y esta vez frente al rudo Marchenko, resuelto en 77. Quebr¨® el servicio de del 94? del mundo a la primera opci¨®n y at¨® pl¨¢cidamente el set inicial; en el segundo, un poquito m¨¢s equilibrado, concret¨® la rotura al quinto juego, para 3-2. Venci¨® con autoridad y certific¨® as¨ª un gran arranque de a?o. Ser¨¢ la quinta vez que juegue la ¨²ltima ronda en la primera cita del calendario; lo hizo antes en Chennai (2008), Doha (2010 y 2014) y Vi?a del Mar (2013).
Disputar¨¢ el espa?ol su 99? final, algo de lo que solo pueden presumir otros cuatro fen¨®menos: Jimmy Connors (163), Ivan Lendl (147), Roger Federer (135), John McEnroe (108) y Guillermo Vilas (104). "Sigo con muy buenas sensaciones y es muy positivo tener continuidad en el juego. El 99 es un n¨²mero bonito, pero espero llegar pronto al 100", valor¨® tras lograr la victoria, a pie de pista. Aspira ahora a elevar el 68? trofeo de su trayectoria. ?La historia de un resurgimiento? Tiempo al tiempo...
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