Pareja: ¡°Por mis compa?eras, a Miki Oca le debo un respeto¡±

En febrero festej¨® en Holanda la clasificaci¨®n para los Juegos de R¨ªo peleando en la pileta. Jennifer Pareja (32 a?os; Olot) supo el lunes que hab¨ªan pisoteado ese sue?o cuando Miki Oca, el seleccionador, la dej¨® fuera de la convocatoria por ¡°cuestiones deportivas¡±. Icono de la selecci¨®n, llor¨® su pena mientras encontr¨® refugio afectivo entre sus compa?eras del CN Sabadell y de Espa?a. El viernes cogi¨® el tren y se fue de la ciudad buscando distancia, un poco de aire. El s¨¢bado levant¨® la mano para explicarse. Este es el resultado de una conversaci¨®n telef¨®nica. Demasiadas l¨¢grimas, mucho dolor para un final traum¨¢tico. Hace siete d¨ªas era la capitana del equipo que cambi¨® el waterpolo femenino. Hoy, sabe que ver¨¢ los Juegos por televisi¨®n. Siempre ser¨¢ un referente.

Pregunta. ?Recuerda su primer partido con la selecci¨®n?

Respuesta. Perfectamente, no fue en 2003 como dicen, sino en 2001 en Copenhague. Y fue espectacular porque cumpl¨ª mi primer sue?o. Era una enana y me trataron de maravilla. Inolvidable.

P. ?Y el ¨²ltimo?

R. El ¨²ltimo, hasta el momento, fue contra Alemania, de la Liga Mundial. Ganamos f¨¢cil, en Manresa. No le di importancia y eso me quema. No recuerdo ni el olor de la piscina porque no pensaba que iba a ser el ¨²ltimo y no prest¨¦ atenci¨®n a los detalles. No imagin¨¦ que fuera el ¨²ltimo. Ahora lo lamento. Lo pens¨¦ el otro d¨ªa. Al menos tiene algo de simb¨®lico: fue en Manresa, donde naci¨® Manel Estiarte. En verdad no imagin¨¦ el ¨²ltimo; siempre pens¨¦ que ser¨ªa decisi¨®n m¨ªa. Que un d¨ªa le dir¨ªa al entrenador: ¡®hasta aqu¨ª¡¯. O que sabr¨ªa cuando estaba jugando el ¨²ltimo partido. Me sabe muy mal no haberlo disfrutado en la piscina, no saber que era el ¨²ltimo, disfrutar de la ¨²ltima imagen, el ¨²ltimo olor, pensar que me cambi¨¦ al lado de tal... Esas cosas.

P. ?Sabe el motivo por el que no va a los Juegos?

R. S¨¦ lo que me explic¨® Miki en dos reuniones. Una hace un mes y otra el lunes por la ma?ana. Me cont¨® un d¨ªa unas cosas, otro otras¡­ El caso es que estoy fuera. Y duele que no veas.

Me duelen las razones que ha dado; me duele c¨®mo lo ha hecho

P. ?Le entiende, le cree? ?Considera que ha sido justo?

R. He de respetarle. Pero me cuesta seguir su idea. Me duelen las razones que ha dado; me duele c¨®mo lo ha hecho. Pero le respeto, respeto su decisi¨®n porque por encima de todo respeto profundamente a mis compa?eras.

P. ¡°Es lo mejor para el equipo¡±, dijo. ?Le cree?

R. Estoy obligada a creerlo. Si es lo que piensa, no tengo nada que decir. Debatir¨ªa otras cosas, no esa; cosas que a m¨ª me dijo y no se sostienen y ¨¦l lo sabe. Y adem¨¢s, toda esta situaci¨®n, por c¨®mo la ha manejado, se la pod¨ªa haber ahorrado y se lo he dicho. Pero lo que hablamos ¨¦l y yo queda entre ¨¦l y yo. Supongo.

P. ?Se siente traicionada por Miki?

R. No, me siento decepcionada. Desilusionada. Primero como persona. Hablo de un entrenador muy importante en mi carrera, cuidado. No es un cualquiera, es alguien con el que hemos convivido y con el que hemos conseguido mucho. Pero estoy dolida, eso s¨ª, creo que me sobran razones.

P. ¡°Hay jugadoras que empujan fuerte. No hay nada extradeportivo¡±, dijo en p¨²blico.

Lo juro: nunca me he puesto por delante de una decisi¨®n de equipo

R. En eso tiene toda la raz¨®n. Todas las que est¨¢n en la lista merecen estar. Se lo han ganado. ?Qu¨¦ puede haber de extradeportivo en una selecci¨®n? Esto es deporte de alto nivel. Es todo deportivo, por supuesto, faltar¨ªa m¨¢s. Es su criterio y debe ser deportivo, ?no? Pero es ¨¦l, no yo, quien debe argumentarlo. Yo lo acepto. No me queda otra, pero no puedo explicarlo. Y si ¨¦l no puede explicarlo, es su problema. Bueno, y el m¨ªo, en parte. Creo que a¨²n ten¨ªa cosas por ofrecer a este equipo, dentro y fuera de la piscina. Normalmente, estas decisiones se suelen tomar despu¨¦s de una gran competici¨®n o tras un fracaso, pero a 70 d¨ªas de unos Juegos... Ha dicho lo que ha dicho. Punto.

P. Es dif¨ªcil pensar que Miki haya hecho algo en contra del equipo o de usted¡­

R. No, seguro que a ¨¦l le sobran razones. Pero la que no va a los Juegos soy yo y creo que es normal sentirme mal. Pero nada m¨¢s lejos de mi intenci¨®n que esto sea una guerra que perjudique al equipo un minuto. No voy a entrar en esto de ¡®t¨² dices y yo contesto¡¯. No es esto lo que me ha ense?ado el waterpolo y menos este equipo. Hace un mes luch¨¢bamos por ir a los Juegos. Era la capitana de Miki. R¨ªo fue, es y seguir¨¢ siendo mi sue?o. Y eso no lo puede cambiar nada. Yo estuve en Gouda (Holanda) y luch¨¦ por este sue?o. Hice m¨¢s o menos, pero hice todo lo que pude por este sue?o y me siento parte de ¨¦l, aunque lo vea por la televisi¨®n.

P. ¡°No se ha dejado ayudar¡±, dicen en la federaci¨®n. ?Qui¨¦n le ha pagado el psic¨®logo?

R. ?Que no qu¨¦? Que me lo digan. Pues mira, el psic¨®logo me lo pagu¨¦ yo si es lo que preocupa.

P. ?Hay algo que usted ha hecho mal? ?Ha bajado de rendimiento desde el preol¨ªmpico?

R. Seguro que algo he hecho mal, todos nos equivocamos. Y es verdad que he bajado de rendimiento, pero no de Gouda hasta aqu¨ª; no en los ¨²ltimos dos meses. El caso es que tengo 32 a?os y es evidente que no soy la jugadora que era a los 28. Lo sabemos todas. Soy Jenny a los 32, con lo que llevo aprendido en la mochila y lo que he dejado en el camino¡­

P. ?Fue la mejor del mundo hace tres a?os y ahora no est¨¢ entre las mejores 20 de Espa?a?

R. No, al parecer no. Pero nunca me sent¨ª la mejor del mundo, siempre he sido una m¨¢s. Me eligieron la mejor jugadora tras el Mundial, que es diferente porque me sali¨® todo bien, seguramente, pero no me sent¨ª la mejor. ?En qu¨¦ me equivoqu¨¦? En algo, seguro, no lo niego. Tengo mi car¨¢cter y se me gira la cara.

P. S¨ª, ya, car¨¢cter.

R. Pero es un enfado conmigo misma, soy autoexigente, mucho. Y tambi¨¦n he jugado mal, seguro. Pero te juro que hay cosas que como capitana de este equipo volver¨ªa a hacer igual. Llevo mucho tiempo decidiendo antes por el equipo que por m¨ª. Y lo juro por lo que m¨¢s quiero: nunca me he puesto por delante de una decisi¨®n de equipo. Tengo la conciencia s¨²per tranquila y estoy orgullosa de mi comportamiento, en ese sentido. Y me he podido equivocar, pero si he discutido con Miki en alguna ocasi¨®n fue por defender al equipo. Hay cosas por las que no paso. Si he ha hablado con Miki para cambiar un entrenamiento o pedir un d¨ªa libre no ha sido para llevarle la contraria, sino porque el equipo me lo ha pedido. Y eso es consecuencia de mi responsabilidad como capitana.

P. Perfectamente.

R. Y volver¨ªa a hacerlo. Me dej¨¦ la vida por ir a unos Juegos y lo logramos dos veces. Y lo har¨ªa ma?ana aunque Miki me dijera: ¡®Si nos clasificamos, no ir¨¢s¡¯. Me dejar¨ªa la vida otra vez. Este sue?o es m¨ªo. Otra cosa es que no lo pueda vivir; lo disfrutar¨¢n mis amigas.

P. ?Acaba contrato con el Sabadell?

R. S¨ª. Pero seguir¨¦ en casa, a¨²n me quieren. Se han portado muy bien y dado todo su apoyo.

P. La decisi¨®n de Oca, ?c¨®mo afecta al plan Ado?

R. Pues no lo s¨¦. No es lo m¨¢s importante; nunca jugu¨¦ por dinero. Solamente quise ir a unos Juegos. Y me he quedado sin los segundos; me los han quitado de las manos de golpe. As¨ª que cuando me recupere del palo, tendr¨¦ que mirarlo porque sin ADO me cambia la vida. Algo tendremos que hacer, ?no?