Estados Unidos, el talento de nunca acabar

El 1 de septiembre de 2006 un terremoto de 4,8 grados en la escala Richter zarande¨® el Hotel Urawa Royal Pines de Saitama. All¨ª se hospedaban las selecciones de Espa?a y Argentina. Varios jugadores pudieron ser vistos despavoridos por los pasillos. No pas¨® a mayores. El verdadero terremoto baloncest¨ªstico iba a producirse un d¨ªa despu¨¦s. Espa?a arranc¨® un triunfo ag¨®nico ante Argentina, tras un tenso final en el que Pau Gasol sufri¨® una grave lesi¨®n y Nocioni fall¨® el ¨²ltimo tiro: 75-74. Espa?a era finalista de ese Mundial de Jap¨®n.

El gran se¨ªsmo, sin embargo, se produjo a continuaci¨®n. Estados Unidos perdi¨® ante Grecia, 101-95. Mike Krzyzewski, con un joven pero estelar equipo en el que formaban LeBron James, Carmelo Anthony, Dwayne Wade, Chris Paul, Elton Brand o Dwight Howard, se qued¨® pasmado ante las r¨¢fagas de tiros exteriores de los griegos. El seleccionador estadounidense no pod¨ªa quitarse de la cabeza, en especial, a un alero que fri¨® el aro de su equipo y del que no acert¨® siquiera a recordar su nombre en la multitudinaria rueda de prensa que ofreci¨® en el Saitama Super Arena. Se llamaba, y se llama, Vasileios Spanoulis.

¡°Aquella derrota demostr¨® que en una noche determinada, un equipo que anote sus tiros, sus tiros libres y que no pierda balones, mientras que t¨² fallas tiros libres y pierdes balones, puede pasar lo que pas¨®¡±, explica el veterano presidente de la Federaci¨®n Estadounidense, Jerry Colangelo. ¡°Aquella derrota tiene mucho que ver con nuestra preparaci¨®n y nuestra mentalidad desde entonces¡±.

Desde aquel d¨ªa, Estados Unidos ha ganado todos sus partidos. Krzyzewski y Colangelo consiguieron el compromiso de los jugadores, establecieron nuevas l¨ªneas de disciplina y trabajo, pusieron al equipo por encima de las individualidades y Estados Unidos volvi¨® a dominar con mano de hierro. El escalaf¨®n de los jugadores que pudieron reclutar para el Mundial de 2014 en Espa?a baj¨® uno o dos pelda?os. La escuadra parec¨ªa m¨¢s vulnerable, al alcance de la Espa?a que hab¨ªa hurgado como ninguna otra selecci¨®n en las debilidades de los tremendos equipos con los que Estados Unidos conquist¨® el oro en Pek¨ªn 2008 y Londres 2012. Pero Irving, Harden, Anthony Davis, Klay Thompson y compa?¨ªa arrasaron, aunque no se encontraron, como se vaticinaba, con Espa?a, eliminada en cuartos de final.

El patr¨®n se repite en R¨ªo. Krzyzewski no contar¨¢ con los dos nombres m¨¢s rutilantes de la NBA, Stephen Curry y LeBron James, adem¨¢s de otra buena colecci¨®n de primeros espadas como Westbrook, Chris Paul, Anthony Davis o Harden. Sin embargo, ni siquiera tan importantes deserciones modifican las perspectivas de una selecci¨®n que ya se ha mostrado inabordable para sus rivales, incluso en su versi¨®n B o incluso en la C. Las bajas dejan a Estados Unidos con solo dos jugadores con experiencia ol¨ªmpica, sus dos l¨ªderes en R¨ªo, Kevin Durant y Carmelo Anthony. Pero la calidad del equipo queda fuera de cualquier duda, con jugadores como Irving, Butler, Paul George, Draymond Green, Butler, Cousins, todos.

¡°Nuestro mayor rival somos nosotros mismos¡±, asevera Colangelo. ¡°Nos divertimos demasiado. Tenemos que moderarnos¡±, ha advertido Krzyzewski por las celebraciones de algunas canastas ante China, uno de los rivales a los que ha arrollado durante la preparaci¨®n. Lo ¨²ltimo que desea el seleccionador estadounidense es que pueda repetirse el pecado de prepotencia y hasta menosprecio del rival en el que incurri¨® el equipo que disput¨® y perdi¨® tres partidos en los Juegos Ol¨ªmpicos de Atenas.

La supremac¨ªa del baloncesto estadounidense es todav¨ªa mayor en categor¨ªa femenina. En R¨ªo buscar¨¢ su sexto oro ol¨ªmpico consecutivo. Desde los Juegos de Los ?ngeles en 1984, ha ganado su balance en los Juegos de 55-1 y su ¨²nica derrota se produjo en las semifinales de Barcelona 92, contra el equipo Unificado, la antigua Uni¨®n Sovi¨¦tica. Para esta ocasi¨®n cuenta con estrellas como Diana Taurasi, Tamika Catchings, Sue Bird, Sylvia Fowles, Maya Moore y debutar¨¢n en los Juegos jugadoras que ya son estrellas en la WNBA como Delle Donne y Brittney Griner. Australia, finalista en tres de las cuatro ¨²ltimas ediciones de los Juegos, se configura como la ¨²nica selecci¨®n con capacidad para sorprender a la estadounidense o, cuando menos, para ponerla en apuros. En baloncesto, no hay m¨¢s favorito que Estados Unidos.