Quir¨®fano para Bale, golpe para Zidane
El t¨¦cnico del Madrid pierde como m¨ªnimo un mes y medio al gal¨¦s, su jugador m¨¢s desequilibrante esta temporada, que se ve frenado en el mejor momento de su carrera
La entrada que Gareth Bale recibi¨® del uruguayo Coates en el tobillo derecho frente al Sporting pas¨® de ser en unas horas un simple golpe a una luxaci¨®n traum¨¢tica de los tendones, para terminar convirti¨¦ndose ayer en el peor de los frenazos para el gal¨¦s, que tendr¨¢ que pasar por el quir¨®fano, y en el peor de los contratiempos para Zinedine Zidane, que perder¨¢ a su pupilo por un periodo m¨ªnimo de entre seis y ocho semanas.
El Real Madrid anunci¨® a ¨²ltima hora de la ma?ana la decisi¨®n de los servicios m¨¦dicos del club y del jugador de descartar el tratamiento conservador y operar el tobillo derecho de Bale. El gal¨¦s ser¨¢ intervenido el pr¨®ximo 29 de noviembre en el King Edward VII Hospital de Londres por el doctor ingl¨¦s James Calder, un prestigioso m¨¦dico requerido en multitud de ocasiones por clubes de alto nivel para tratar lesiones de tobillo (oper¨® al mediocentro del Arsenal Jack Wilshere, entre otros).
El momento de la cirug¨ªa ser¨¢ tan decisivo como el de la rehabilitaci¨®n para determinar el tiempo de recuperaci¨®n del gal¨¦s, que en ning¨²n caso bajar¨¢ del mes y medio. Entre ese plazo y las ocho semanas se enmarca el tiempo de baja habitual si no hay contratiempos. Un periodo de en torno a dos meses en el que el Madrid de Zidane se jugar¨¢ el segundo t¨ªtulo de la temporada, el Mundial de clubes, y en el que tendr¨¢ que hacer frente a partidos de Liga decisivos para el objetivo final de los blancos de hacerse con el campeonato cinco a?os despu¨¦s.
El primero de los grandes compromisos que se perder¨¢ Bale ser¨¢ el cl¨¢sico que Barcelona y Madrid disputar¨¢n en el Camp Nou el s¨¢bado 3 de diciembre. Tampoco contar¨¢ con ¨¦l Zidane unos d¨ªas despu¨¦s para recibir al Dortmund en el ¨²ltimo partido de la fase de grupos, ni para visitar el S¨¢nchez Pizju¨¢n el 15 de enero. Antes, del 15 al 18 de diciembre el Madrid pelear¨¢ sin Bale en Jap¨®n por poner en su camiseta la escarapela de campe¨®n del mundo de clubes.
El Mundialito ser¨ªa el segundo t¨ªtulo de la temporada para el club que preside Florentino P¨¦rez. El dirigente contrat¨® a Bale en el verano de 2013, a los 24 a?os, seguro de que las condiciones del entonces jugador del Tottenham le convert¨ªan en el molde m¨¢s similar a Cristiano Ronaldo en el mundo del f¨²tbol y, por lo tanto, en su mejor heredero para el futuro. Ese pensamiento optimista se fue desmontado por culpa de la intermitencia y la falta de liderazgo mostradas por el jugador gal¨¦s en sus primeros a?os. Hasta que en el tramo final del curso pasado, en ausencia de Cristiano, lesionado, Bale despert¨®, se autroproclam¨® el referente del Madrid, al que mantuvo en la lucha por la Liga y condujo a la final de la Champions. Fue el primer momento en el que Bale se mostr¨® regular y capaz de asumir la etiqueta de l¨ªder del Real Madrid. Unas cualidades que potenci¨® en este tramo inicial de temporada. El brit¨¢nico se creci¨® ante el baj¨®n de Cristiano y la desaparici¨®n de Benzema hasta convertirse en la pieza m¨¢s fiable y resolutiva del ataque del Madrid.
Numerosas soluciones
Zidane encontr¨® por fin a un Bale constante y decisivo, capaz de quitarse el traje de complemento para ponerse el de referente. Ante el vac¨ªo de poder, el gal¨¦s pas¨® a ser el valor m¨¢s seguro de un Madrid que le pierde, como m¨ªnimo, hasta finales de enero y que espera recuperarle para los octavos de la Champions. En este arranque, Bale estaba siendo el jugador m¨¢s desequilibrante del Madrid gracias a su potencia y su capacidad para generar peligro. Hab¨ªa encadenado tres meses sin lesiones musculares, su gran martirio estos a?os, y sumaba siete goles y cuatro asistencias.
Su ausencia priva de nuevo a Zidane de la BBC, con la que apenas ha contado esta temporada, y le obliga de nuevo a decidirse entre el exitoso esquema del Calder¨®n, con la medular reforzada, o el 4-3-3. El primer escenario potenciar¨ªa la importancia de Isco y podr¨ªa suponer a una nueva oportunidad para James, mientras que el segundo promocionar¨ªa a Lucas V¨¢zquez, Asensio o Morata como acompa?antes de Cristiano y Benzema. Sea cual sea, el Madrid acusar¨¢ la ausencia del Bale m¨¢s determinante que se recuerda.
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