13 grandes libros sobre deporte y aventura que debe tener en casa (II)
Toda gran aventura comienza con la lectura de un buen libro. Comience la suya con uno de estos 13 vol¨²menes o, al menos, disfrute de una lectura maravillosa
Aqu¨ª puede encontrar los 6 que faltan a los 13 grandes libros que he seleccionado para usted. No hay ning¨²n orden establecido. No son estos peores ni mejores que los 7 primeros. Han ido cayendo en los art¨ªculos seg¨²n sal¨ªan del mont¨®n en el que estaban apilados sobre mi escritorio, excepto el de A?os Salvajes que junto a el de las 1000 Aventuras Unicas tienen un puesto en mi mesilla de noche. El primero ya est¨¢ terminado, pero el segundo me ofrece una sesi¨®n de veinte minutos de pre-sue?o que me hace dormir con una sonrisa.
Espero que le gusten tanto como me han apasionado a m¨ª (lea la primera parte del art¨ªculo aqu¨ª).
?En qu¨¦ otro lugar del mundo puede uno saborear sidra local, recostado en una pared del siglo XI y disfrutar de la ic¨®nica left?
Lo reconozco, el surf es mi ojito derecho, el otro es el buceo. Pero cr¨¦ame que este libro puede ser disfrutado por cualquiera. De momento yo me pondr¨ªa guantes de algod¨®n para manipularlo y extasiarme con las im¨¢genes, que a p¨¢gina o a doble p¨¢gina, copan los pliegos de esta gran obra.
Las fotograf¨ªas son fant¨¢sticas. Trozos de oc¨¦ano que parecen esculturas de cristal en forma de tubo irregular y moldeadas por atletas sobre tablas de surf. Olas de todas las formas y colores. De color turquesa, sepia, naranja cenizo o azul intenso. La esencia de la belleza del surf y la grandeza del mar.
Los editores han elegido fotograf¨ªas fant¨¢sticas y les han otorgado un soporte acorde. Libro de gran formato, casi cuadrado donde la utilizaci¨®n de un quinto color da toques de elegancia a la apertura de los cap¨ªtulos y brillo de oriente platino a las p¨¢ginas. Bonito y refinado.
El libro no aporta solo fotograf¨ªa, tambi¨¦n tiene texto. Pero este palidece y se pierde entre tanta imagen espectacular. De hecho, tiene un anexo final con consejos pr¨¢cticos para los viajeros: lo b¨¢sico, cuando ir, como son las olas o equipaci¨®n necesaria.
Seas surfista o simplemente amante del oc¨¦ano, haz que te lo regalen estas navidades. Me dar¨¢s las gracias. Por cierto, la respuesta al titular de este apartado es¡. Mundaka, en Vizcaya.
Qu¨¦ hacer si le toca el gordo estas navidades
Este es el otro libro "juguete" que le sugiero ?Quiere jugar? Vamos all¨¢. Abramos el libro por cualquier p¨¢gina, al azar. De acuerdo ha salido la p¨¢gina 27, nos sugieren ir a esquiar fuera de pistas a Hakuba, en los Alpes Japoneses, donde hay tanta nieve virgen que no saben qu¨¦ hacer con ella. A sacarse un vuelo a Tokio y luego el tren bala hasta Hakuba. Como nos sobra la pasta nos compramos toda la equipaci¨®n de esqu¨ª all¨ª mismo ?Qu¨¦? ?Le seduce? ?No? Vale, jugamos otra vez, y abrimos por¡ la p¨¢gina 112 ?El marat¨®n reggae de Jamaica! Salimos a las 5 de la ma?ana a correr en Negril escoltados por bandas de reggae y luego fiesta en la playa ?Tampoco? Pues venga que a la tercera va la vencida. Vamos all¨¢, gira la bolita y caen en la p¨¢gina¡ 286 ?Buceo en el parque nacional de Thingvellir, Islandia! Las aguas son tan cristalinas y puras que la visibilidad supera con mucho los 100 metros. Se bucea entre las placas tect¨®nicas de dos continentes. Esto s¨ª que le va, seguro.
No me diga que este juego no es apasionante. Yo lo practico cada noche, tengo el libro en la mesilla al lado de la cama. Lo ¨²nico que me falta es el dinero para realizar todas las aventuras que me atrapan. Pero de ilusi¨®n voy sobrado.
El libro inspira aventuras para todos los gustos, presupuestos y nivel de riesgo asumible, son 1.000. H¨¢game caso, si quiere hacer algo memorable en sus pr¨®ximas vacaciones, p¨ªllese un ejemplar de este libro y empiece a so?ar. ?Ah! y no se olvide del d¨¦cimo de loter¨ªa...uff si toca
"Consuela saber que un santo vendr¨¢ en nuestra ayuda, porque sin duda el camino es obra de Sat¨¢n"
ASCENSIONES SECRETAS
Yo no soy un buen escalador. Yo soy ciclista mas bien de rodar en llanito y de descender, y no mucho que la gran bofetada que me he dado con una bicicleta, de monta?a claro, fue bajando la cuesta de la "merienda" en Madrid, me la merend¨¦ con vuelta de campana incluida. Pero subir me mata. Pedalear con plato peque?o, que viene a ser la materializaci¨®n de todo lo frustrante en este mundo, subiendo por una carreterucha con la lengua que lames la rueda delantera, atisbar el punto de inflexi¨®n de la carretera, el pin¨¢culo de la cuesta, llegar y descubrir que no hay bajada, ni llano, que hay una curva y la cuesta sigue, no se sabe hasta d¨®nde, te da ganas de coger la bici y tirarla ladera abajo mientras gritas ?A tomar viento la bicicleta!
?Por qu¨¦ entonces recomiendo un libro de ascensos para bicicleta? Primero porque reconozco que cuando llegas arriba del todo y paras a tomarte una coca-cola y recuperar aliento, mientras disfrutas de un panorama espectacular, experimentas una sensaci¨®n fant¨¢stica y un cansancio muy gratificante.
Segundo porque este libro es un men¨² degustaci¨®n para gourmets de 50 puertos que va a volver locos a los amantes de la bicicleta de carretera. El libro tiene un subt¨ªtulo interior que reza: ¡°Las escaladas m¨¢s misteriosas, extremas e inolvidables¡±, y estoy convencido que a los rayados de la bicicleta de carretera los dos ¨²ltimos adjetivos son los que m¨¢s les llama la atenci¨®n. A m¨ª me la llam¨® el primero ?misteriosas? Y leyendo el ascenso al refugio de Spindler, entre Polonia y la Rep¨²blica Checa encontr¨¦ la respuesta¡
Y esto me lleva a la tercera raz¨®n de porque sugerir este libro. Cada uno de los 50 ascensos tiene un texto fant¨¢stico que narra la historia de la carretera, los avatares de las vueltas ciclistas, la naturaleza que la engulle, pinceladas antropol¨®gicas que la salpican y curiosidades hist¨®ricas. Da igual si uno monta en bici o no, cuando lees cada cap¨ªtulo te entran ganas de ir all¨ª, de conocerlo. Yo detesto los ascensos y este libro ha conseguido que reserve una fecha en el calendario para hacerme el puerto de Ancares, en el parque natural, entre Galicia y Castilla y Le¨®n, el m¨¢s duro de todos los puertos de Espa?a. Y lo voy a hacer porque seg¨²n Carlos Sastre, ganador del tour 2008, ¡°aquello es el Para¨ªso¡±¡aunque sea a pie y empujando la bici.
"Cada vez que el profesor se daba la vuelta, me golpeaba con un list¨®n de madera, bonk¡bonk¡bonk"
A?OS SALVAJES
Suelo leer de veinte a treinta p¨¢ginas de un libro antes de decidir si quiero terminarlo. Si me engancha sigo leyendo, si no lo dejo. No es un m¨¦todo infalible para seleccionar buenos libros, seguro que libros fant¨¢sticos no han pasado el corte de las 30 p¨¢ginas, pero hay tanto para leer y tan poco tiempo. Y bueno, tambi¨¦n tengo la repesca que consiste en volverlo a intentar si escucho o leo muy buenas cr¨ªticas del libro. Con A?os Salvajes me termin¨¦ el primer cap¨ªtulo, 74 p¨¢ginas, sin darme cuenta, completamente absorto.
No es un libro de surf, es un libro de aventuras escrito con una calidad propia del mism¨ªsimo Jack London o Mark Twain. El surf no es m¨¢s que un elemento narrativo, un catalizador para cristalizar la esencia de la b¨²squeda vital, del viaje inici¨¢tico, de las emociones humanas con las que empatizamos.
Este es un libro cuya intensidad y epopeyas har¨¢ las delicias, no ya de los surfistas, si no de cualquier amante de la aventura o simplemente de la literatura. La narraci¨®n es tan genuina, tan pura y las descripciones tan vibrantes que uno no puede dejar de leer.
No quer¨ªa escoger un favorito de todos los libros que le he sugerido, pero si tengo que hacerlo, me quedo con este. Y, adem¨¢s, como dice mi madre, ¡°est¨¢ basado en hechos ver¨ªdicos¡± que, traducido del lenguaje materno, quiere decir que ¡°no es una chorrada que alguien se ha inventado, sino que ha ocurrido de verdad.¡±
Expreso a la Ciudad de las Mantas Rayas
BUCEO
Si antes he nombrado el libro "juguete", este es un libro suplicio, al menos para m¨ª. Sobre el mar o buceo suelo leer art¨ªculos t¨¦cnicos de biolog¨ªa marina. Evito las gu¨ªas y los de destinos ?Por qu¨¦? Porque si veo un destino en donde no he estado quiero ir impacientemente, y si ya he estado quiero regresar a toda costa. Es una tortura, la maldici¨®n del buceador rico encerrado en el cuerpo de un hombre pobre.
Pero puede que usted s¨ª disponga de capital para bucear todo lo que quiera o simplemente no se agobie al ver tanta oferta submarina, as¨ª que este es un gran libro para tener en casa.
El autor, Lawson Wood, es un fot¨®grafo y veterano buceador con m¨¢s de 15.000 inmersiones, que traducido en tiempo viene a ser unos cuatrocientos d¨ªas completos debajo del mar, por lo que seguro que sus sugerencias son de fiar. Yo en muchas coincido, pero en alguna no. Woods propone unas 250 inmersiones en 41 destinos en toda la mar del oc¨¦ano que ba?a el mundo, pero deja claro que la selecci¨®n est¨¢ basada en su experiencia y sensaciones personales. Yo me quedo con la inmersi¨®n Tiputa pass en Rangiroa, Polinesia francesa, no he buceado nada mejor hasta la fecha.
El libro da toda clase de informaci¨®n para tener encuentros con animales marinos, que ¨¦poca del a?o es la mejor para ciertos destinos y como preparar cada una de las inmersiones. Por supuesto la fotograf¨ªa es grandiosa y est¨¢ muy bien tratada en la edici¨®n. Un libro para tener encima de la mesa del sal¨®n, disfrutar de las im¨¢genes submarinas, y planificar los viajes de buceo.
La ciudad de las mantas rayas (Stingray City) se puede encontrar en las Islas Caim¨¢n, mar Caribe.
"En un d¨ªa claro se puede ver, en 360? a la redonda, m¨¢s de 300 Kil¨®metros de monta?as"
DESCENSOS M?TICOS
De las fotograf¨ªas no voy casi ni hablar porque se puede imaginar en un libro de gran formato como pueden quedar im¨¢genes de nieve virgen en laderas de monta?as impresionantes navegadas por un esquiador, a falta de un adjetivo mejor vamos a decir que fant¨¢sticas.
El libro est¨¢ escrito por Patrick Thorne, conocido como el cazador de nieve, y que puede aportar un curr¨ªculo con m¨¢s de 6.000 ¨¢reas esquiadas en m¨¢s de 80 pa¨ªses, con m¨¢s de 5000 datos GPS para cartografiar descensos fuera de pista, impresionante ?verdad? En esta obra nos ofrece 50 destinos localizados en todo el planeta, 50 destinos de los que hacen la boca agua.
Como todos los libros que le he sugerido de gran formato, es un libro para prepararse un t¨¦ durante una tarde y extasiarse contempl¨¢ndolo.
Eso s¨ª, cada destino tiene su propio cap¨ªtulo y su secci¨®n pr¨¢ctica, con sus mapas, gr¨¢ficos y consejos. No es que nadie vaya a utilizar este libro, que es muy grande, como gu¨ªa de esqu¨ª, pero el viejo "cazador de nieve" sabe perfectamente que si combina im¨¢genes espectaculares, panor¨¢micas de desniveles extremos con algunos datos pr¨¢cticos bien aderezados el lector esquiador sufrir¨¢ una dilataci¨®n de la pupila, un ascenso de los niveles de adrenalina, y una paralizaci¨®n del c¨®rtex cerebral liberando la pregunta ya cr¨®nica ?Por qu¨¦ no? ?Por qu¨¦ no ir a este destino? ?Menudo p¨¢jaro el Patrick Thorne!
A m¨ª me ha enganchado con Pic du Midi en los Pirineos franceses y con Mizuno no Sawa en Jap¨®n. Ya me dir¨¢ usted que destinos-proyectos-sue?os le ha generado este libro. Le advierto de que no tienen cura.
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