Mischa Zverev liquida a Andy Murray

Denis Istomin, hace unos d¨ªas, ense?¨® el camino. El uzbeko, 117 del mundo, elimin¨® contra todo pron¨®stico a Novak Djokovic, seis veces ganador en Australia, y les dijo al resto de jugadores por d¨®nde ir, cu¨¢l era la mejor ruta. El mapa de Istomin marcaba unos par¨¢metros muy claros: no tener miedo, jugar sin complejos, no mirar atr¨¢s y, qu¨¦ demonios, por qu¨¦ no romper todos los esquemas y hacer algo grande, que esto son dos d¨ªas. Marc¨® la ruta Istomin y le recogi¨® el testigo Mischa Zverev, hermano del jugador que acorral¨® ayer a Rafael Nadal. El alem¨¢n, un tenista de 29 a?os sin logros mayores en su expediente (ning¨²n t¨ªtulo ni ninguna final), sigui¨® al dedillo la pauta de Istomin y fulmin¨® al n¨²mero uno del circuito Andy Murray: 7-5, 5-7, 6-2 y 6-4 (en 3h 33m).

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Al cierre de la primera semana en Melbourne, entonces, doble campanada. Ya no figuran en el cuadro los dos mejores jugadores, seg¨²n el ranking. Se fue Nole y se fue Murray, que no perd¨ªa en un Grand Slam con un tenista fuera del top-50 desde que cayera frente al argentino Juan Ignacio Chela en 2006. Por lo tanto, todo un sorpres¨®n. "Estoy muy decepcionado conmigo mismo", dijo el escoc¨¦s, al que se le resiste el Abierto de Australia: ha disputado cinco finales, pero nunca ha conseguido el cetro. No se marchaba tan pronto del torneo desde 2009, cuando tambi¨¦n fue superado en los octavos; en aquella ocasi¨®n por el espa?ol Fernando Verdasco, en un pulso a cinco sets.

El caso es que Murray no fue Murray. Se desvaneci¨® por completo. Su actitud no fue la correcta y se confi¨® el escoc¨¦s, que al final no pudo invertir la desventaja ni frenar el juego de saque y volea de Zverev, Mischa. El alem¨¢n estuvo imponente en la red. "Hoy su juego me ha recordado al de John McEnroe, Boris Bekcer o Stefan Edberg", precis¨® el exjugador Mats Wilander, ahora analista de Eurosport. Y no le falta raz¨®n al sueco, porque la ofensiva de Zverev fue total: subi¨® en 118 ocasiones a la red y acert¨® en 65. Ante ese acoso, Murray padeci¨®.

El escoc¨¦s no perd¨ªa en un Grand Slam con un tenista fuera del top-50 desde 2006, ante Chela

No acert¨® el de Dunblane a convertir sus opciones de rotura (5/13) ni tampoco estuvo bien con el servicio (solo se hizo con el 36% de los puntos jugados con sus segundos). Pero la clave fue que el jugador que probablemente mejor interpreta los partidos t¨¢cticamente se equivoc¨® esta vez. Abus¨® de los tiros cruzados, interceptados por Zverev en las subidas, y no se dio cuenta de que el fil¨®n estaba en realidad en el juego paralelo. Su t¨¦cnico, Ivan Lendl, seguramente lo viera muy claro, pero en la misma l¨ªnea de siempre, se mantuvo impert¨¦rrito en la grada.

Murray, 29 a?os, todo lo contrario. Volvi¨® a recordar al tenista del pasado, a ese que perd¨ªa con excesiva facilidad los nervios. Se desquici¨® el escoc¨¦s, que hasta que no se vio entre la espada y la pared actu¨® con poca sangre, muy fr¨ªo, como si la historia no fuera con ¨¦l. Resultado: ko. Fuera del Open de Australia. Ahora, el cuadro masculino queda completamente abierto, m¨¢s despejado sin dos de los gigantes. Murray transitaba por la misma v¨ªa que Roger Federer, emparejado en los octavos con Zverev despu¨¦s de vencer a Kei Nishikori por 6-7, 6-4, 6-1, 4-6 y 6-3. Y por el otro lado, ya no est¨¢ Djokovic, pero s¨ª Rafael Nadal, que se enfrenta ma?ana (11.00, Eurosport) al franc¨¦s Gael Monfils. Todo en al aire, entonces.

Muguruza rompe la barrera australiana

Mientras, en el cuadro femenino avanza sin oposici¨®n Garbi?e Muguruza. La hispano-venezolana tan solo necesit¨® 65 minutos para derrotar a la rumana Sorana Cirstea (6-2 y 6-3) y romper as¨ª su barrera en el Open de Australia, pues nunca hab¨ªa conseguido alcanzar la cota de los cuartos. "Era el tercer a?o que llegaba hasta aqu¨ª, pero no lo consegu¨ªa... As¨ª que estoy muy feliz", manifest¨® la siete del mundo, a la que le aguarda un cruce complicado en la siguiente ronda, ya que su rival ser¨¢ la estadounidense Coco Vandeweghe, superior (6-2 y 6-3) a la n¨²mero uno, Angelique Kerber.

Garbi?e disfrut¨®. Interpret¨® que no deb¨ªa tener contemplaciones y por eso puso la directa

"Ahora empieza un torneo nuevo. Solo quedan las mejores y todos los partidos ser¨¢n batallas", augur¨® Muguruza, que con la victoria ante Cirstea aterriz¨® por quinta vez en su carrera en los cuartos de un Grand Slam. Mantuvo Garbi?e la inercia de los tres partidos previos, resueltos sin complicaciones. Ofreci¨® de nuevo un c¨®ctel de concentraci¨®n y agresividad, de saber leer la situaci¨®n. Frente a Cirstea disfrut¨®. Orden otra vez. Interpret¨® que no deb¨ªa tener contemplaciones y por eso puso la directa, sin titubeos.

"Los puntos eran muy cortos y muy r¨¢pidos, as¨ª que he intentado fallar poco", indic¨® la campeona de Roland Garros, inspirada en Melbourne, un cicl¨®n ante Cirstea. La rumana se llev¨® una tunda de las buenas, porque Muguruza le abras¨® con los primeros servicios: de 28 puntos tan solo le concedi¨® cuatro. Tuvo m¨¢xima eficacia en la red (5/5) y esencialmente evit¨® cometer errores. Fueron solo nueve, mientras que el ¨ªndice de su rival se dispar¨® hasta los 26.