La Real Sociedad vence a un Valencia de dos caras

Una hora de juego excelso de la Real, en la que tuvo ritmo, orden, concierto y oficio, procur¨® al conjunto de Eusebio tres goles, explotando las deficiencias del Valencia, condenado por sus errores defensivos, con un gol en propia puerta de Alves, un penalti innecesario cometido por Siqueira y un tercer tanto logrado por Oyarzabal. Dos terceras partes de partido en las que los donostiarras convirtieron Mestalla en el patio de su casa, con Odriozola clavando una y otra vez el veneno a la defensa local con sus internadas por el flanco derecho.

El Valencia, con coraz¨®n y ¨¢nimo, se levant¨® de su propia mediocridad para apretar el marcador con dos goles en cinco minutos. Y la Real qued¨® aturdida con el empuje del equipo de Voro, al que le falt¨® punter¨ªa para alcanzar el empate. El conjunto de Eusebio, con sufrimiento final, logr¨® resguardar la victoria, que le mantiene firme en la lucha que mantiene con el Villarreal y el Athletic por posicionarse lo m¨¢s arriba posible en los puestos que dan derecho a Europa.

La victoria de los donostiarras comenz¨® a cimentarse muy pronto. A los 32 segundos de partido ya aventajaba al Valencia en el marcador, en una jugada sencilla mal defendida por la defensa de Voro. Un bal¨®n enviado desde su propio campo por ??igo Mart¨ªnez a la espalda de los centrales che, fue amortiguado por Canales de cabeza para la entrada de Juanmi, terminando en la red de Alves, que se introdujo ¨¦l mismo el esf¨¦rico tras disparar sin ¨¢ngulo el atacante malague?o. En la acci¨®n qued¨® retratado el portero brasile?o, que recibi¨® la silbatina de Mestalla, y Aderlan Santos, que midi¨® mal el salto con Canales.

La relajaci¨®n inicial del Valencia tuvo su consecuencia en el marcador y en el juego, m¨¢s d¨²ctil la Real en el despliegue iniciado a partir de Zurutuza o Illarramendi, continuado por Xabi Prieto y Canales, muy suelto el c¨¢ntabro ante su exequipo. Sin Parejo de br¨²jula, ausente el de Coslada por sanci¨®n, m¨¢s atropelladas resultaban las llegadas al ¨¢rea de Rulli por parte del conjunto che intentando encontrar r¨¢pidamente la referencia de Zaza.

M¨¢s orgullo

Se gustaba el conjunto de Eusebio, pausado en la elaboraci¨®n, picante en los metros finales con dos aguijones por las bandas, Yuri y, sobre todo, Odriozola, que sac¨® un penalti absurdo a Siqueira. El mermado f¨ªsicamente lateral brasile?o, en su intento de despeje y ante la presi¨®n del lateral donostiarra, solt¨® un manotazo al de San Sebasti¨¢n. Desde los once metros, Willian Jos¨¦ no se dej¨® intimidar por Alves. Fuera de forma, Siqueira era una r¨¦mora para el Valencia. Desde el calentamiento lo adivin¨® Eusebio. La Real escor¨® su ataque por el costado derecho, hiperactivo Odriozola.

Siqueira no regres¨® tras el descanso del vestuario. Ah¨ª termin¨® su calvario y quiz¨¢ su paso por el Valencia, sustituido por Lato, junto a Gay¨¤, los due?os del carril izquierdo che en los pr¨®ximos a?os. La Real sigui¨® a lo suyo, explotando el carril diestro, alcanzando el tercer gol en una nueva llegada de Odriozola para asistir a Oyarzabal, el sustituto de William Jos¨¦.

El Valencia tir¨® de orgullo para no verse humillado, logrando en cinco minutos apretar el marcador con dos goles. El primero de penalti anotado por Nani por manos de Ra¨²l Navas y, posteriormente, acertando Zaza en un remate cercano. La Real, sin imagin¨¢rselo, se vio sometida, superada por su propio v¨¦rtigo y el esfuerzo del Valencia, al que no le fue suficiente su empe?o final.