Sporting y Oviedo, 14 a?os esper¨¢ndose
Los dos grandes equipos asturianos se reencuentran intentando olvidar agravios y con el masivo respaldo de sus aficiones
Acostumbrado a las batallas, dentro y fuera del campo, de los Independiente-Racing de Avellaneda, Hugo P¨¦rez, centrocampista del Sporting en la d¨¦cada de los 90, se llevaba las manos a la cabeza ante cada partido de rivalidad asturiana, cuando participaba en actos de confraternizaci¨®n alentados por los clubes. ¡°Est¨¢n locos, si hacemos esto all¨¢ nos matan las barras bravas¡±. Este s¨¢bado (18.00 horas), despu¨¦s de catorce a?os de abstinencia por la traves¨ªa del desierto del Oviedo por Tercera y Segunda B, vuelve el cl¨¢sico del f¨²tbol asturiano. Pese a ser considerado un partido de alto riesgo, la previa se ha desarrollado en un clima de normalidad y buenas intenciones, con la ¨²nica excepci¨®n de la barra libre de las redes sociales.
No tienen la proyecci¨®n medi¨¢tica de los Madrid-Bar?a, la gracia de los Sevilla-Betis o la carga simb¨®lica de un Bar?a-Espanyol, pero los Oviedo-Sporting tienen su punto. Al menos eso destac¨® el guardameta Esteban, retirado al final de la pasada temporada, tras jugar cl¨¢sicos de la m¨¢xima rivalidad gallega, madrile?a y sevillana. Separadas por s¨®lo 28 kil¨®metros, a Gij¨®n y Oviedo les alejan demasiadas cosas, empezando por sus equipos de f¨²tbol. Y desde 2003, cuando el Oviedo cay¨® en un mismo verano desde Segunda a Tercera y roz¨® la desaparici¨®n, se han vigilado por el rabillo del ojo.
Al ¡°Volveremos¡±, el grito de guerra de la afici¨®n azul, respond¨ªan los rojiblancos con el ¡°Os pudrir¨¦is en Tercera¡±. El oviedismo acumul¨® agravios y se agarr¨® a s¨ªmbolos como Michu, que ayud¨® en casa cuatro a?os hasta que decidi¨® relanzar su carrera en el Celta, y se gan¨® definitivamente al oviedismo al negarse a fichar por el Sporting, entonces en Primera. ¡°Michu es mi ¨ªdolo¡±, grita Diego Cervero, actualmente delantero del Mirand¨¦s y que fue la bandera del Oviedo, un forofo que se pon¨ªa las botas para devolver al equipo al f¨²tbol profesional.
Cervero, 250 partidos y m¨¢s de 140 goles con el Oviedo, reconoce que sin la crisis de 2003 probablemente nunca hubiera llegado al primer equipo. Y por eso hace suyas las afrentas que la afici¨®n azul acumul¨® en esos a?os de plomo, como las declaraciones de Abelardo Fern¨¢ndez, entonces entrenador del filial sportinguista, en las que expresaba su deseo de impedir la participaci¨®n del Oviedo en una fase de ascenso. Y lo consigui¨®, para desgracia de Cervero ¡°Aquel 1-4 con el Sporting B, ante 17.000 personas en el Tartiere y jug¨¢ndonos entrar en la promoci¨®n, es mi peor pesadilla¡±.
Un cabezazo de Cervero hace dos a?os, frente al C¨¢diz, empez¨® a cambiar la historia y a poner las bases del reencuentro en Segunda. Se consum¨® gracias al descenso del Sporting, que no ha hecho mella en la afici¨®n gijonesa, como demuestran los 24.000 socios que han renovado su abono. El Oviedo anda por los 17.000, que esta semana han recibido desde M¨¦xico el mensaje movilizador de Arturo El¨ªas, representante del Grupo Carso, accionista mayoritario: ¡°Ellos tienen el doble de presupuesto, pero nosotros tenemos el doble de coraz¨®n¡±.
Al margen de la cartera de Carso, con una inyecci¨®n econ¨®mica y una gesti¨®n que ha permitido sanear al Oviedo en apenas tres a?os, El¨ªas procura lanzar gui?os a la afici¨®n que impidi¨® la desaparici¨®n del club: ¡°Por cada chaval de la cantera que se marche a Gij¨®n, nosotros les quitaremos dos¡±. El Oviedo tiene capacidad de respuesta, al contrario de aquel verano de 2003 en que el Sporting, seg¨²n las quejas del eterno rival, aprovech¨® para llevarse las joyas de la cantera azul.
Ya no est¨¢n Michu ni Cervero. Tampoco el Sporting cuenta con jugadores que enganchen a la grada. S¨®lo cuatro asturianos ser¨¢n titulares en El Molin¨®n. Pero las aficiones cierran filas y los clubes, habitualmente herm¨¦ticos, les lanzan gui?os. El Oviedo decidi¨® abrir las puertas del Tartiere para el ¨²ltimo entrenamiento. Y el Sporting, que meti¨® al equipo en una burbuja evitando actos conjuntos, recurri¨® a Quini para lanzar un mensaje de concordia. Lejos queda la pol¨¦mica de la pasada semana, cuando la asociaci¨®n de pe?as del Oviedo incluy¨® con la venta de las 1.200 entradas una camiseta en la que pod¨ªa leerse: ¡°Invasi¨®n Aldea 2017. Oviedo capital¡±. El coordinador de seguridad polic¨ªal rega?¨® al club ¡°por apoyar la incitaci¨®n a la violencia¡±, las pe?as guardaron la camiseta para otro momento y, salvo chispazos aislados, el primer Sporting-Oviedo en 14 a?os llega en paz.
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