Carlsen tropieza ante Bu y bordea el abismo

Dos grandes sorpresas marcaron la primera jornada de los dieciseisavos de final en Tiflis (Georgia). Magnus Carlsen perdi¨® con blancas ante Xiangzi Bu, lo que sit¨²a al campe¨®n con un pie fuera de la Copa del Mundo. Y el canadiense Ant¨®n Kovalyov, verdugo de Viswanathan Anand en la ronda anterior, no pudo jugar su partida por no cumplir con el c¨®digo de vestimenta de la FIDE, a pesar de que sus pantalones (bermudas) eran los mismos de las partidas anteriores. Wesley So y Lev¨®n Aroni¨¢n lograron las otras dos victorias, frente a Paco Vallejo y Maxim Matl¨¢kov, respectivamente.

La derrota del noruego es ilustrativa de la caracter¨ªstica m¨¢s aguda del sistema de eliminatorias cortas: basta un solo error para estar casi eliminado. Carlsen cometi¨® una inexactitud cuando su posici¨®n -que recordaba a las t¨ªpicas del Gambito Marshall de la Apertura Espa?ola- requer¨ªa una defensa precisa tras un sacrificio de pieza de Bu, a quien ahora le bastar¨¢ hacer tablas con blancas para entrar en octavos. Parad¨®jicamente, el campe¨®n del mundo dio la impresi¨®n de estar en forma, mejor que en torneos anteriores, durante las dos primeras eliminatorias.

Vallejo cambi¨® su estilo al volver a la alta competici¨®n tras un a?o sab¨¢tico que decidi¨® tomarse en octubre de 2012. La desaz¨®n se produjo porque su juego creativo y de riesgo, que le daba posiciones ventajosas con frecuencia, se transform¨® en varias derrotas, debidas a apuros de tiempo o imprecisiones, contra grandes estrellas en la Final de Maestros de Bilbao. En su nueva etapa abundan los planteamientos prudentes y los empates en posiciones llenas de vida. Esa actitud es l¨®gica si se tiene en cuenta lo que sufri¨® cuando mantuvo la opuesta, pero cabe preguntarse si es bueno que juegue en contra de lo que le pide su car¨¢cter, si no estar¨¢ coartando as¨ª su gran talento.

Hoy pod¨ªa plantear la partida, con blancas ante el 8? del mundo, de dos maneras: la habitual en los ¨²ltimos a?os, en busca de dos tablas que forzar¨ªan el desempate r¨¢pido; o el ataque a la bayoneta, que si sal¨ªa bien pondr¨ªa a su temible rival contra las cuerdas en una eliminatoria a s¨®lo dos partidas. Opt¨® por la segunda, pero luego pec¨® de exceso de valent¨ªa (12 Rd2?; v¨¦ase el an¨¢lisis de la partida en las noticias relacionadas con esta) cuando dispon¨ªa de una continuaci¨®n mucho m¨¢s s¨®lida, y pronto qued¨® perdido. Elegir el grado de riesgo es muy dif¨ªcil ante adversarios de ¨¦lite, y Vallejo hoy no acert¨®.

El drama de Kovalyov tiene muchas aristas y ser¨¢ objeto de un pr¨®ximo art¨ªculo de opini¨®n en esta secci¨®n de EL PA?S. El canadiense, que naci¨® en Ucrania y residi¨® en Argentina, fue advertido por el ¨¢rbitro-jefe, al llegar a la sala de juego, de que no podr¨ªa enfrentarse al israel¨ª Maxim Rodshtein en bermudas. Kovalyov arguy¨® que en la anterior Copa del Mundo pregunt¨® espec¨ªficamente si pod¨ªa jugar en bermudas, y le dijeron que s¨ª; y que hab¨ªa disputado las dos primeras eliminatorias de esta edici¨®n con esa misma vestimenta sin que nadie le dijese nada; y que, adem¨¢s, no ten¨ªa otros pantalones, ni tiempo para comprarlos y volver a la sala en quince minutos, para no perder por incomparecencia.

En ese punto lleg¨® Zurab Azmaiparashvili, presidente de la Federaci¨®n Europea de Ajedrez, del Comit¨¦ Organizador de la Copa del Mundo y del Comit¨¦ de Apelaci¨®n, y abronc¨® a Kovalyov con sus malos modos habituales. El canadiense escribi¨® despu¨¦s una nota en la que afirma que Azmaiparashvili le llam¨® ¡°gitano¡± dos veces en tono insultantes, que fue lo que m¨¢s le doli¨®. Azmaiparashvili no neg¨® ni confirm¨® despu¨¦s que lo hiciera, en una entrevista oficial, y argument¨® que los jugadores hab¨ªan firmado antes de empezar el torneo la aceptaci¨®n de las reglas, en la que se incluye el c¨®digo de vestimenta. Pero si lo que firmaron los jugadores es lo mismo que est¨¢ publicado en Internet, el asunto no est¨¢ nada claro.

Con su habitual interpretaci¨®n de lo que debe ser el periodismo libre, muy cercana a la de las dictaduras, la colecci¨®n de fotos de hoy publicada por la FIDE en el portal oficial del torneo no incluye ninguna del incidente de Kovalyov, a pesar de que una de sus fot¨®grafas, Mar¨ªa Emeli¨¢nova, s¨ª las hizo.