Fernando Navarro: ¡°Hemos dejado de mirar hacia la esencia del f¨²tbol¡±
El futbolista en activo que lleva m¨¢s temporadas consecutivas en la Liga espa?ola repasa su trayectoria ante la que puede ser su ¨²ltima visita al campo del Barcelona, el club en el que creci¨® desde alevines
El jugador en activo que lleva m¨¢s temporadas consecutivas en la liga espa?ola defiende el escudo del Deportivo, se llama Fernando Navarro Corbacho (Barcelona, 1982) y es un futbolero que mantiene la pasi¨®n por el deporte del que se enamor¨® y en el que cada vez encuentra m¨¢s matices que le desagradan. Detesta lo anecd¨®tico y lo superfluo y por eso pasa de puntillas por el hecho de que fue ¨¦l quien le dio el relevo a Messi para que debutase con el Barcelona una noche en Oporto hace ahora poco m¨¢s de 14 a?os. Hoy (20,45. Movistar Partidazo) se enfrenta al argentino en la casa en la que creci¨® y acarici¨® el sue?o que cumpli¨®, el de ser un futbolista profesional. Y eso trasciende ahora porque barrunta que puede ser su ¨²ltima visita de corto al Camp Nou tras 17 temporadas en la ¨¦lite que justamente inici¨® con un partido del Barcelona en Riazor.
Pregunta. ?Qu¨¦ ve cuando mira hacia atr¨¢s?
Respuesta. Orgullo, dedicaci¨®n, un sentimiento de haber trabajado mucho..
- P. ?Era otro f¨²tbol el que se jugaba hace 17 a?os?
- R. S¨ª. Ahora es todo mucho m¨¢s artificial, antes no hab¨ªa tantas distracciones. Era un f¨²tbol m¨¢s puro y sin tanto empe?o en aparentar. Nada ha cambiado en el sentido de que tienes que entrenar y jugar lo mejor posible para que el entrenador te elija, sigue siendo la base, pero mucho m¨¢s adornada. Se le da valor al detalle, a la an¨¦cdota, a lo ef¨ªmero, a la carcasa. Hemos dejado de mirar hacia la esencia del f¨²tbol. El f¨²tbol ahora es un show, pero lo hemos fomentado entre todos, no es una cuesti¨®n solo de los medios que lo transmiten.
- P. Antes se le¨ªan peri¨®dicos, ahora tuits.
- R. Yo compraba la prensa deportiva y me la llevaba al colegio en la mochila. Me sab¨ªa las alineaciones de todos los partidos, hasta los de Segunda B. Si te gustaba estar informado disfrutabas y ten¨ªas esa ilusi¨®n de comprar el peri¨®dico o esperar al domingo para ver los res¨²menes de los partidos. Cuando llegaba lo paladeabas toda la semana. Cuando daban los goles de las ligas extranjeras¡ ese era mi momento.
- P. Ahora tiene cualquier partido de aquellos en youtube.
- R. Ah¨ª est¨¢n, al alcance de la mano. Pero ya no le das aquel valor y eso me fastidia. Antes lo esperabas y era todo m¨¢s rom¨¢ntico. Me acuerdo much¨ªsimo de aquella sensaci¨®n, de levantarme de madrugada con diez a?os para ver la final de la Copa Intercontinental del Bar?a con el Sao Paulo. Ahora lo tienes en el disco duro y lo ves al d¨ªa siguiente. Est¨¢ muy bien, pero¡
"El f¨²tbol antes era m¨¢s puro y sin tanto empe?o en aparentar. Ahora se le da valor al detalle, a la an¨¦cdota, a lo ef¨ªmero, a la carcasa"
- P. ?Dentro del campo tambi¨¦n es otro f¨²tbol?
- R. Es m¨¢s exigente ahora. Los equipos est¨¢n m¨¢s preparados a nivel t¨¢ctico. Siempre hubo buenos jugadores, pero el trabajo f¨ªsico se ha mejorado y del 2010 hacia ac¨¢ ha cambiado de manera espectacular la preparaci¨®n de los partidos en cuanto al an¨¢lisis propio o del rival. Los grupos de trabajo que forman los t¨¦cnicos est¨¢n mucho m¨¢s especializados y eso influye en el rendimiento, sin duda.
- P. ?C¨®mo ha logrado convertirse en un cl¨¢sico en ese entorno que percibe tan ef¨ªmero?
- R. El trabajo y la mente. Debes saber que en este mundillo todos, salvo unos pocos elegidos, pasamos por el banquillo o la grada. Y que tambi¨¦n llega una oportunidad. Es importante tener una visi¨®n larga, creer en tu trabajo y prepararse para aprovechar ese momento.
- P. ?D¨®nde aprendi¨® a jugar al f¨²tbol?
- R. En mi barrio, V¨ªa Trajana, en Barcelona cerca de Sant Adri¨¤ de Bes¨°s. Jugaba en unas pistas de f¨²tbol sala en las que estaba de diez a dos y de cuatro a ocho y media. Era un entorno humilde, duro, pero tuve una infancia muy bonita, con muchos ni?os, mucha calle, canicas, peonza y, por supuesto, f¨²tbol. Invent¨¢bamos nuestros torneos contra chicos de otras zonas del barrio, ¨ªbamos de visitantes a otras pistas¡
- P. ?Qu¨¦ queda de aquello en el f¨²tbol que vive ahora?
- R. Es otra historia. A m¨ª eso del amateurismo no me gusta. Esto es f¨²tbol profesional, un trabajo. Se parecen muy poco porque aqu¨ª est¨¢ todo muy medido. A¨²n as¨ª a la gente de barrio se les nota much¨ªsimo. Lucas P¨¦rez, por ejemplo. O Fede Cartabia. En el Sevilla me pasaba con Reyes o Jes¨²s Navas.
- P. ?A qu¨¦ edad se incorpora al Barcelona?
- R. Ten¨ªa 10 a?os. Jugaba en el Trajana y llegaron dos cartas invit¨¢ndome a acudir a unas pruebas, una del Espanyol y otras del Bar?a. Y tuve la suerte de poder elegir. Entr¨¦ en alevines y llegu¨¦ al primer equipo. De aquellos ni?os solo yo logr¨¦ llegar a Primera. Otro compa?ero, Felipe Sanch¨®n, ascendi¨® el a?o pasado con el Girona y ahora juega en el Sabadell. En infantiles ya coincid¨ª con V¨ªctor Vald¨¦s y en cadetes con gente como Arteta, Nano, Reina o Babangida.
- P. ?Es divertido el f¨²tbol para un defensa?
- R. Mis caracter¨ªsticas no son las de atacar y me encanta defender, pero yo no disfruto en los partidos, quiz¨¢s lo hago en los entrenamientos, en la preparaci¨®n, pero el fin de semana es un examen, una obligaci¨®n y una responsabilidad. No me identifico con eso de ¡°sal y disfruta¡±.
- P. Vamos, que no se hubiera cre¨ªdo a Cruyff en Wembley.
- R. S¨ª que le hubiese cre¨ªdo, pero no hubiese disfrutado. Al final s¨ª, pero no durante el proceso. Usted cuando escribe seguro que no le da tiempo ni a disfrutar ni a sufrir: est¨¢ haciendo un trabajo. Si fuera Messi o Iniesta igual ser¨ªa diferente, no lo s¨¦.
- P. ?Las puertas del primer equipo del Barcelona est¨¢n ahora m¨¢s cerradas para los canteranos?
- R. S¨ª, pero es l¨®gico porque se han instalado en la excelencia. Y en el Madrid ocurre algo similar. El nivel antes era inferior. ?Qui¨¦n puede suplir a Iniesta, Messi o Busquets? Nadie se les puede comparar.
- P. Usted lleg¨® al primer equipo una temporada antes que Iniesta.
- R. Jug¨¢bamos en el B, yo con 18 a?os y ¨¦l con 16. Ya le ve¨ªas que era muy bueno y sobre todo un futbolista tipo Bar?a. Entonces ¨¦l jugaba por delante de la defensa, de cuatro.
- P. Podemos distinguir un genotipo de centrocampista cul¨¦, incluso de extremo. ?Usted es un defensa t¨ªpico del Barcelona?
- R. Cuando empec¨¦ all¨ª pod¨ªa serlo porque jug¨¢bamos 3-4-3 y yo era el zurdo en la l¨ªnea de atr¨¢s, una especie de lateral-central. Pero ahora, en el 4-3-3, ya no. No tengo las cualidades de Jordi Alba. A lo mejor podr¨ªa adaptarme a ser central. Sub¨ª al primer equipo con Van Gaal y se buscaba otro perfil.
- P. ?Intimidaba Van Gaal?
- R. A m¨ª lo primero que me dijo es que si entrenaba bien iba a jugar. Y cumpli¨®. Yo ten¨ªa 19 a?os. Es un t¨ªo de principios, muy recto, a veces inflexible, pero legal y muy buen entrenador. Se le ha dado m¨¢s valor con el tiempo.
- P. Pero usted juega casi media liga como titular y se lesiona.
- R. Me romp¨ª la rodilla. Ahora van a hacer 16 a?os de aquello. Al poco destituyen a Van Gaal y ya se me hace dif¨ªcil volver a engancharme porque el Bar?a no se para, llegaron nuevos jugadores y tard¨¦ diez meses en recuperarme porque estuve seis con la triada y cuatro con una infecci¨®n en la rodilla.
- P. ?Lleg¨® a plantearse que pod¨ªa ser el final?
- R. No. Afortunadamente ten¨ªa un contrato largo de cinco a?os por delante y eso me dio calma. Fue complicado porque la lesi¨®n llega justo cuando hab¨ªa conseguido mi sue?o, pero siempre tuve claro que si me pon¨ªa bien iba a tener la oportunidad de seguir en el f¨²tbol profesional. No en el Bar?a, que era imposible. Y as¨ª fue.
- P. Y vuelve a jugar.
- R. Me proponen ir al filial y estuve unos partidos, pero no quer¨ªa. Buscamos una soluci¨®n para estar en Primera y sal¨ª al Albacete. Jugu¨¦ seis o siete partidos,
- P. Y salv¨® la estad¨ªstica. Ahora cuenta para sumar 17 temporadas.
- R. Pues s¨ª, ahora lo valoramos. Entonces me sirvi¨® sobre todo para recuperar sensaciones.
- P. Mientras volv¨ªa a sentirse futbolista ocurre que llega Laporta al Barcelona y su c¨ªrculo virtuoso. ?Se sinti¨® como si saliese de la Tierra y llegase a Marte?
- R. Algo as¨ª. Vino Ronaldinho y el Barcelona cambi¨®. Muchos futbolistas dejaron atr¨¢s una mala ¨¦poca, fue el resurgir de bastantes, pero todo giraba alrededor de Ronaldinho, una bestia en todos los sentidos, f¨ªsica y t¨¦cnicamente.
- P. ?Era un l¨ªder?
- R. S¨ª, dentro del campo. Ah¨ª nada es enga?o. Y ¨¦l mandaba mucho sobre el c¨¦sped.
- P. Eto¡¯o.
- R. Otro l¨ªder, con car¨¢cter y personalidad. Comprometido. Muy buena gente y muy generoso. Se tom¨® la oportunidad del Bar?a como una revancha por no haber podido triunfar en el Madrid.
"Es fastidiado ser entrenador, cada vez lo tengo m¨¢s claro. Los futbolistas somos muy egoistas"
- P. ?Se podr¨ªa entender aquel equipo sin alguien como Rijkaard al frente?
- R. Imposible. Lo un¨ªa todo por su manera de ser. A Van Gaal le hubiese resultado complicado, pero Rijkaard era muy flexible.
- P. ?Es esa la clave para gestionar un vestuario?
- R. Para mi s¨ª. Es fastidiado ser entrenador. Cada vez lo tengo m¨¢s claro.
- P. Por eso usted no lo va a ser.
- R. No lo s¨¦ a¨²n, pero se me quitan las ganas. Los futbolistas somos muy egoistas.
- P. ?C¨®mo se tratan los egos?
- R. Para un entrenador es dif¨ªcil. Entre jugadores es m¨¢s sencillo porque al final el grupo te aparta si no eres legal.
- P. ?Tiene el Deportivo un vestuario complicado?
- R. Ahora no. Lo tuvo en mi primer a?o aqu¨ª y fue culpa de todos, del club, de los jugadores y del cuerpo t¨¦cnico. El pastel nos lo comimos entre todos. Vi mucho egoismo ese a?o. No logramos entender la importancia del grupo. Hay que saber ser suplente y titular, estar en todas las situaciones.
- P. ?Cu¨¢ndo eso ocurre que es lo peor?
- R. El d¨ªa a d¨ªa. Era insoportable porque siempre pasaba algo. No a nivel de peleas porque al final entre futbolistas te respetas, pero notabas en todo momento que no hab¨ªa afinidad para trabajar juntos. Reconducir algo as¨ª no es sencillo, pero solo aquel a?o viv¨ª en un vestuario con mal ambiente.
- P. Tambi¨¦n vivi¨® todo lo contrario, el ¡°esp¨ªritu de Neustift¡±, aquella m¨¢gica concentraci¨®n de la Eurocopa del 2008. ?C¨®mo lo recuerda?
- R. Debut¨¦ en la selecci¨®n en un amistoso previo al torneo, era el nuevo, pero hab¨ªa un ambiente familiar que no me sorprendi¨® porque ya conoc¨ªa a mucha gente. Los roles estaban muy marcados y encontramos esa armon¨ªa tan necesaria para trabajar. Yo ten¨ªa la ilusi¨®n de que gan¨¢ramos y no tanto la de jugar partidos.
- P. Ten¨ªa la ilusi¨®n del aficionado m¨¢s que la del futbolista.
- R. Exacto. Estaba con De la Red, Sergio Garc¨ªa, Andr¨¦s Palop, Arbeloa, Albio¡ Cazorla y G¨¹iza participaron m¨¢s. No ten¨ªa la ambici¨®n de jugar todos los partidos, el que me tocara lo iba a disfrutar y as¨ª lo hice, pero sobre todo quer¨ªa era ayudar y que la selecci¨®n ganase. Hab¨ªamos llegado a la Eurocopa muy discutidos, con jugadores espectaculares que no hab¨ªan ganado. Hasta que no demuestras no te puedes considerar.
- P. ?Conect¨® con Luis?
- R. Claro. Era cercano, un hombre de f¨²tbol de los pies a la cabeza. Se sab¨ªa los c¨®digos del vestuario. El primer d¨ªa me lleva a una sala y me dice: ¡°Si le escucho dar las gracias porque le he tra¨ªdo a la selecci¨®n no vuelve m¨¢s¡±. Me estaba explicando que si estaba all¨ª era porque me lo hab¨ªa ganado.
- P. ?Pero usted hab¨ªa dicho algo?
- R. ?Que va! Pero igual me hac¨ªan una entrevista y pod¨ªa decir lo t¨ªpico, que agradec¨ªa la oportunidad y todo eso¡ ?l me insisti¨® en que hab¨ªa llegado all¨ª por mis m¨¦ritos. Yo llevaba tres temporadas en el Mallorca. En cada cosa que dec¨ªa o que hac¨ªa Luis ya se ve¨ªa que cuando t¨² ibas ¨¦l ya hab¨ªa hecho ese trayecto varias veces. Y sab¨ªa mucho de f¨²tbol, de planteamiento de partidos porque identificaba situaciones para hacerle da?o al rival. Era un tipo gracioso, entra?able, con mucho carisma.
- P. Con Del Bosque ya no volvi¨® a vestir de rojo. Y ya estaba en el Sevilla y a un alt¨ªsimo nivel. ?Lo entendi¨®?
- R. Igual era m¨¢s f¨¢cil llevarme, ?no?. Estuve en algunas convocatorias. Me sorpendi¨® salir de la selecci¨®n, pero que le voy a hacer. El seleccionador eligi¨® otro perfil para mi puesto.
- P. Le fich¨® Monchi. No es una an¨¦cdota.
- R. Me llam¨® y me pregunt¨® si me ilusionaba jugar en el Sevilla e iniciar una negociaci¨®n. Y le dije que s¨ª, claro. Nunca pens¨¦ en otra alternativa desde que descolgu¨¦ esa llamada. Monchi nunca te la juega.
- P. ?Es replicable su modelo?
- R. No es f¨¢cil imitar el ¨¦xito porque ahora el mercado est¨¢ cada vez m¨¢s complicado, pero se puede intentar. No se trata de ¨¦l solo sino de la labor de un equipo. Lo dice el propio Monchi, que ¨¦l tiene dos ojos, pero que trabaja mejor con 24. As¨ª que hay que buscar ojos y no elegir tuertos.
- P. ?Nunca le atrajo la posibilidad de dejar la Liga y probar otra competici¨®n?
- R. Ahora s¨ª, pero antes era muy cag¨®n y estaba muy bien en Sevilla.
- P. Llor¨® al irse. Y su apariencia es la de un duro
- R. Eso lo dice quien no me conoce, por lo que se transmite del campo hacia fuera. Nos pasa a muchos, de verdad. Soy de l¨¢grima f¨¢cil y Sevilla es mi casa. No s¨¦ si volver¨¦, pero s¨ª que tengo las puertas abiertas.
- P. Acaba contrato en el Deportivo. ?Seguir¨¢ en activo el a?o que viene?
- R. S¨ª, lo tengo claro. Pero ya no es solo lo futbol¨ªstico porque tambi¨¦n se tienen que reunir las condiciones necesarias desde el punto de vista familiar. Yo ya no elijo. Lo evidente es que el f¨²tbol, sea en lo que sea, no lo voy a dejar.
- P. Con diez a?os ya sab¨ªa que era defensa. ?Ahora sabe lo que puede ser?
- R. Me apasiona el f¨²tbol. No me importa ver partidos de Tercera en la televisi¨®n. Me gusta hablar de f¨²tbol, pero no de jugadores sino de t¨¢ctica, de comportamiento de los equipos, analizar el juego. Y leer historias bien escritas sobre deporte.
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