Fernando Alonso se va consigo mismo
El espa?ol deja la F-1 tras convertirse en un fen¨®meno deportivo y social en Espa?a y abre una nueva etapa en la que busca explotar su tremendo gancho
Fernando Alonso cerr¨® ayer en Abu Dabi el c¨ªrculo que comenz¨® a dibujar en Australia el 4 de marzo de 2001: aquel d¨ªa, el espa?ol debut¨® en la F¨®rmula 1 al volante de un Minardi, el peor coche de la parrilla. 18 a?os, dos t¨ªtulos, 32 victorias y 312 grandes premios despu¨¦s, el campeonato despidi¨® a quien incuestionablemente ha sido uno de sus referentes de los ¨²ltimos tiempos, de nuevo metido en el b¨®lido m¨¢s fr¨¢gil y con menos pegada de todos, por m¨¢s sorprendente que pueda sonar al tratarse de un McLaren. Si aquel domingo en Melbourne no pudo cruzar la meta, esta vez s¨ª lo hizo, pero el und¨¦cimo, de modo que el bot¨ªn fue el mismo.
M¨¢s que romper moldes, Alonso los revent¨®. ?l solito fue capaz de crear, pr¨¢cticamente de la nada, una fiebre por la F-1 que en Espa?a nunca antes hab¨ªa existido, escenificada con la famosa marea azul que ti?¨® infinidad de gradas y pelouse de circuitos de todo el mundo en el cl¨ªmax de la trayectoria del ovetense, cuando fue capaz de destronar a Michael Schumacher, El Emperador, para encasquetarse las coronas de 2005 y 2006 con Renault.
El fen¨®meno Alonso da para mucho, y seguramente as¨ª quedar¨¢ reflejado en la biograf¨ªa que debe ver la luz el a?o que viene de la mano de la editorial Planeta. Es com¨²n en la mayor¨ªa de deportistas de ¨¦lite que su comunidad de seguidores y la de detractores nazcan pr¨¢cticamente a la vez, y este caso no es una excepci¨®n. Los reconocidos como alonsistas nacieron al mismo tiempo que los antialonsistas, en parte a ra¨ªz de la particular puesta en escena del piloto y sus declaraciones. ¡°Si soy campe¨®n vendr¨¢n muchos a sacarse la foto, pero a quien tendr¨ªa que agradecer o dedicar este t¨ªtulo no es a mucha gente. Los tres a?os he corrido solo, con mis cosas, con mi familia y con mi sacrificio. Y si gano lo dedicar¨¦ a mi familia y a mis amigos. Y absolutamente a nadie m¨¢s¡±, solt¨® en septiembre de 2005, justo antes de tocar el cielo en Brasil.
Aquella afirmaci¨®n comenz¨® a reflejar una divergencia entre su realidad y la de su comunidad de aficionados y la que percib¨ªa el resto del mundo, que no termin¨® de entender una actitud tan revanchista (tambi¨¦n honesta), en un momento de tanto jolgorio. Esa dicotom¨ªa ya no se despeg¨® de ¨¦l y probablemente le acompa?ar¨¢ siempre, aunque probablemente su figura est¨¦ menos presente a partir de ahora que deja la F-1, a la espera de saber si volver¨¢ en 2020 como algunos ya se atreven a afirmar (Vettel, Briatore o Ecclestone, entre otros).
La nueva vida empresarial
¡°Cuando debut¨¦ era un chico inseguro que iba a compartir pista con los mejores pilotos del mundo, como Schumacher, y vida con los mejores ingenieros y t¨¦cnicos. Al margen de todo lo que he aprendido en este tiempo, lo que he ganado sobre todo es mucha autoconfianza¡±, asegura el corredor, de 37 a?os, que a partir de este lunes deber¨¢ enfrentarse a una nueva vida, algo menos exigente en la vertiente competitiva ¡ªlos principales focos ser¨¢n el Mundial de Resistencia (WEC) y las 500 Millas¡ª, pero m¨¢s en la empresarial.
Al margen de su intenci¨®n de emular a Graham Hill y de hacerse con la Triple Corona, galard¨®n que se otorga a quien es capaz de ganar en M¨®naco, las 24 Horas de Le Mans y las 500 Millas de Indian¨¢polis ¡ªsolo le falta esta ¨²ltima prueba, que volver¨¢ a disputar en 2019¡ª, una de sus principales ocupaciones ser¨¢ tratar de capitalizar las m¨²ltiples inversiones en las que anda metido para hacer crecer unos ingresos que, seg¨²n la revista Forbes, rondan los 300 millones de euros. 12 de ellos corresponden al salario de este 2018 que le pag¨® McLaren, que tambi¨¦n le cedi¨® espacio en el monoplaza y firm¨® acuerdos de publicidad por valor de otros 20 millones con Kimoa, la marca de ropa que Alonso lanz¨® el a?o pasado y que seg¨²n parece se vende sola en los pa¨ªses asi¨¢ticos.
Derechos de televisi¨®n
El tir¨®n del bicampe¨®n del mundo es tremendo en China, donde hace unas semanas inaugur¨® una escuela de karting que prev¨¦ abrir 40 circuitos repartidos por todo el pa¨ªs articulados como franquicias, siempre de la mano de inversores asi¨¢ticos, y que estima promocionar a unos 1.500 chavales. Cuando no est¨¦ volando o compitiendo, su tiempo lo pasar¨¢ entre Lugano, donde tiene fijada su residencia, y Oviedo, donde hace m¨¢s de tres a?os abri¨® el Museo Fernando Alonso, adyacente a otro kart¨®dodromo que tambi¨¦n gestiona su familia. Y tambi¨¦n est¨¢ pendiente de c¨®mo evolucionen los jugadores de su equipo de eSports, el FA Racing Logitech.
No hay nada en la agenda del todav¨ªa piloto de McLaren que se haga por casualidad. Hace unos meses adquiri¨® la titularidad de los derechos televisivos de las 500 Millas de Indian¨¢polis de 2019 para Espa?a y para otros pa¨ªses. El certamen tuvo un pico de audiencia de casi un mill¨®n de espectadores en su edici¨®n de 2017 ¡ªla ¨²nica en la que ha formado parte de momento¡ª a pesar de ofrecerse a trav¨¦s de una plataforma televisiva de pago (Movistar), gracias al tremendo gancho que ha mantenido el asturiano durante todos estos a?os. La idea de Fernando Alonso ahora es multiplicar la inversi¨®n aprovechando el tremendo inter¨¦s que todav¨ªa genera, en una maniobra que evidentemente llev¨® a cabo antes de anunciar que iba a tomar parte en ella.
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