El Baskonia de las dos caras cae ante el Panathinaikos
Los de Perasovic caen en el OAKA despu¨¦s de remontar 21 puntos en contra tras una nefasta primera parte (72-70)
![Vougioukas ante Diop](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/7TEQZ32AGUQDOIDROM356627HQ.jpg?auth=893392bd192c8d23554555b6ba6390c90b2266dc6d3f2a529e632ed9f055de12&width=414)
El Baskonia se atasc¨® en el inicio y se grip¨® en el final. Lleg¨® al descanso perdiendo por 21 puntos, pero le dio la vuelta al partido y a falta de seis minutos se puso por delante en el marcador. Era la primera vez, y casi la ¨²nica, porque el Panathinaikos sac¨® sus ¨²ltimas fuerzas para ganar el partido empujado por la incansable afici¨®n del OAKA.
Rick Pitino se parece cada vez m¨¢s a Ortega Cano, pero es de Nueva York y lo de torear no parece que le va mucho. El baloncesto tambi¨¦n es de dar pases, pero su equipo, el Panathinaikos, es m¨¢s de correr que de especular. Lo demostraron sus jugadores en diez minutos en los que pasaron como una apisanadora por encima del Baskonia. Los vitorianos bien har¨ªan en solicitar una indemnizaci¨®n por lo que sucedi¨® en el primer cuarto. Fueron arrollados, laminados sin piedad. Despu¨¦s de siete minutos, perd¨ªan 21-2. Se fueron a recibir la fil¨ªpica de Perasovic con un 22-6 que no pintaba nada bien, pese al maquillaje de un triple de Hilliard y un tiro libre posterior.
A Pitino no le pas¨® por alto que el Baskonia juega con ocho hombres, sota, caballo y rey, as¨ª que imprimi¨® un ritmo fren¨¦tico al juego para evitar que el equipo vasco pudiera coger aire, adem¨¢s, las p¨¦rdidas de bal¨®n fueron constantes, lo que no ayudaba demasiado. Cuando la ventaja era pr¨¢cticamente inabordable, los jugadores vitorianos lo intentaron a base de triples, pero eso tampoco dio demasiado resultado. La cara de Perasovic en el banquillo lo dec¨ªa todo. El Panathinaikos se dedicaba a correr y a encestar, sin demasiados alardes. Daba la sensaci¨®n de que cualquier otro equipo m¨¢s entonado que el Baskonia podr¨ªa hacerles un roto.
Y el Baskonia tambi¨¦n, claro. El que sali¨® a la cancha tras el descanso. Adem¨¢s, de tanto correr, Calathes ya no andaba tal sutil en su distribuci¨®n. Se acabaron los robos en cancha contraria y los rebotes en defensa. El equipo vitoriano cambi¨® de registro. Hilliard y Poirier se implicaron m¨¢s; Marcelinho dio un paso adelante, y con m¨¢s calma en ataque y m¨¢s sentido en defensa, el marcador comenz¨® a estrecharse, pese a las decisiones arbitrales que, en tres acciones consecutivas ¨Cla ¨²ltima fue la quinta falta de Diop¨C, perjudicaron al Baskonia.
Pero los jugadores del equipo vasco no estaban ni para protestar. Segu¨ªan a lo suyo, buscando un milagro, que pareci¨® llegar a falta de 6,15, cuando un tiro de Hilliard puso por delante al conjunto de Perasovic. El OAKA enmudeci¨® por un instante. Dos tiros libres de Poirier ampliaron la ventaja, pero todo se qued¨® ah¨ª, porque varias decisiones equivocadas impidieron que la diferencia aumentara, y Rick Pitino movi¨® las fichas para poner por delante a su equipo, que durante 98 segundos zozobr¨® frente al Baskonia.
La mala noticia es que el Panathinaikos se une al club de los equipos que pelean por una plaza en la siguiente fase cuando s¨®lo restan tres jornadas para acabar la liguilla. El equipo vitoriano tiene tres huesos duros de roer. El Real Madrid, el Efes y el CSKA, tres de los cuatro primeros.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.