La chaqueta verde cumple 70 a?os en un reducto sin m¨®viles

La chaqueta verde cumpli¨® este mi¨¦rcoles 70 a?os. Fue el 10 de abril de 1949 cuando Sam Snead se convirti¨® en el primer ganador del Masters de Augusta en ser reconocido con esta prenda hoy universal. Todos los campeones anteriores, desde la primera edici¨®n del torneo en 1934, recibieron de manera retroactiva una igual. Los socios del club hab¨ªan comenzado a llevarla por una raz¨®n pr¨¢ctica m¨¢s que de elitismo: ser reconocidos en el campo por los aficionados cuando necesitaban ayuda. Desde entonces, uno de los trofeos m¨¢s peculiares del deporte es tambi¨¦n una de esas tradiciones que por nada del mundo se tocan en Augusta.

Como la prohibici¨®n de entrar en este jard¨ªn del golf con m¨®viles. Los tel¨¦fonos est¨¢n vetados en el Masters para seguidores (la organizaci¨®n obliga a las televisiones a llamarles patronos) y periodistas, que solo pueden usarlo dentro del edificio de prensa. El campeonato se convierte as¨ª durante una semana en un reducto sin m¨®viles. Extra?o en una ¨¦poca en que los hinchas acostumbran a vivir cada momento (un gol, el paso del pelot¨®n ciclista...) m¨¢s a trav¨¦s de la pantalla del aparato que con sus ojos.

Los golfistas lo agradecen porque evitan alg¨²n descuido al no silenciar el m¨®vil y el ajetreo fuera de las cuerdas para tomar fotograf¨ªas. ¡°Es una de las cosas que hace especial a Augusta¡±, cuenta Sergio Garc¨ªa; ¡°en las jornadas de entrenamiento s¨ª est¨¢s oyendo todo el rato el clic clic de las c¨¢maras, pero luego son muy estrictos con esta normativa¡±.

Rahm, por ejemplo, se quej¨® en el pasado Open de Espa?a, en Madrid, de la distracci¨®n que eso le causaba entre el p¨²blico. ¡°Cuando la gente ha aprendido lo que es aceptable y lo que no, es simple¡±, comenta Tiger Woods. ¡°No nos importa que hagan fotos o est¨¦n jugando con el m¨®vil, pero que lo pongan en silencio. El Masters en eso es ¨²nico. Es puro golf. Solo el jugador y el caddie, sin m¨¢s gente dentro de las cuerdas¡±.

Tambi¨¦n McIlroy agradece esa norma antim¨®viles. ¡°Es muy agradable que la gente no est¨¦ todo el rato mirando su m¨®vil. Es estupendo que Augusta haya mantenido esta tradici¨®n¡±.