Nick Nurse en el Teatro de los Sue?os
Estos Raptors son lo m¨¢s parecido que hemos visto los ¨²ltimos a?os a los admirados Spurs de Popovich
La antigua Copa Korac, lo que hoy podr¨ªamos comparar con la Eurocup, ten¨ªa su personalidad muy marcada. Aquello s¨ª que era la celebraci¨®n de la Europa de los pueblos, y alrededores. Mi equipo, Estudiantes, tuvo que enfrentarse nada menos que con el Manchester, que hab¨ªa dejado en la cuneta al Sangalhos, portugu¨¦s. Nos ¨ªbamos a Inglaterra. Un aut¨¦ntico regalo para cualquier mit¨®mano... del f¨²tbol. Y de aquel equipo, sobre todo Alberto Herreros creo que hubiera cambiado, sin dudar, alguno de sus numerosos premios ACB por haberse sentido Fernando Redondo aquella recordada noche en el Teatro de los Sue?os.
¡°Hay que ver Old Trafford¡±. ¡°A las 12 hay v¨ªdeo. No da tiempo¡±. ¡°Pues hay que encontrar la camiseta oficial¡±. Si quieren el dato del partido, me suena que no ganamos por mucho. Lo que no se me olvida es el aspecto de deporte de serie b que el baloncesto siempre tuvo en Inglaterra. Los Gigants de Manchester nos recibieron en un pabell¨®n tipo vel¨®dromo medio vac¨ªo, sin energ¨ªa ninguna, como casi siempre ha venido sucediendo en la British Basketball League (BBL).
Les cuento todo esto porque por aquellos a?os iniciaba Nick Nurse su curiosa aventura como entrenador de baloncesto de ¨¦lite. Nada menos que nueve temporadas estuvo en Inglaterra, dos de ellas con mis queridos y a?orados Gigantes de Manchester, a los que lamentablemente no pudo llevar al t¨ªtulo de campeones.
La vuelta a EE UU de Nurse, y lo que ha pasado desde entonces, lo asemeja bastante a los inicios de Phil Jackson. Unos a?os exitosos en lo que ahora se llama Liga de Desarrollo (dos campeonatos obtenidos), la oportunidad de un trabajo de asistente en una franquicia NBA y, si la cosa no se estropea, la posibilidad de hacer historia en esa misma franquicia y en su primer a?o como entrenador principal.
Llegados a este punto, toca rematar el sue?o. Hay datos que juegan muy a su favor; sus Raptors tienen ahora mismo una qu¨ªmica muy especial. Con la aportaci¨®n de Marc, el quinteto titular est¨¢ muy bien balanceado. Marc ha aceptado ser el cuarto recurso ofensivo, despu¨¦s de Kawhai, Siakam y Lowry, pero ¨¦l disfruta mucho haciendo de bisagra en sus equipos. Adem¨¢s, los minutos de juego de gente como VanVleet, o Serge Ibaka, no pueden igualarlos los Warriors con ning¨²n reserva. Esa frase tan rimbombante que venimos escuchando sobre la conveniencia de ¡°no subestimar el coraz¨®n de un campe¨®n¡± a veces surte efecto, pero una cosa es que ese coraz¨®n pueda latir un d¨ªa sin echar de menos a dos de sus cuatro pilares fundamentales, y otra que sea capaz de aguantar el latido durante un playoff al mejor de siete choques.
Si algo puede dejar este a?o como legado Nick Nurse es, sin lugar a dudas, la capacidad que han tenido sus Raptors para que los partidos se les hagan eternos a los rivales. Es casi imposible achacar parte de esa riqueza t¨¢ctica del baloncesto que est¨¢n ofreciendo a las diferentes experiencias directas de Nurse en el baloncesto internacional (Inglaterra y B¨¦lgica son dos ligas muy alejadas del primer nivel europeo). Sin embargo, estos Raptors de Nurse son lo m¨¢s parecido que hemos visto los ¨²ltimos a?os a los admirados Spurs de Popovich. De aquellos Spurs se dec¨ªa que su estilo ten¨ªa un ADN muy de baloncesto FIBA, y Popovich jam¨¢s lo desment¨ªa. Si esa idea es tomada por buena, es evidente que la incorporaci¨®n de entrenadores ayudantes como Ettore Messina en el caso de los Spurs y ahora de Sergio Scariolo en los Raptors, como todo lo que pasa en la elite de cualquier deporte, tiene un significado muy especial.
Dudo que Sir Bobby Charlton haya o¨ªdo hablar en su vida de Nick Nurse; y me extra?ar¨ªa que en alg¨²n momento se haya acercado a ver el espect¨¢culo de esos Gigantes de Manchester, tan peque?itos. Pero si Nurse hace a los Raptors campeones, propongo que lo reciba en Old Trafford. Al inventor de uno de los t¨¦rminos m¨¢s emblem¨¢ticos del deporte le gustar¨¢ su historia.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.