Una Espa?a inagotable supera a Polonia y se clasifica para la semifinal del Mundial

Espa?a se clasific¨® en Shanghai para las semifinales del Mundial por tercera vez en su historia. La prolongaci¨®n de un recorrido memorable en el que, por 12? vez en los ¨²ltimos 14 a?os, la selecci¨®n volvi¨® a colocarse entre los cuatro mejores en los grandes campeonatos internacionales (Juegos, Mundiales y Europeos). Cay¨® Polonia rendida a un elenco abnegado y pasional liderado por Ricky Rubio (19 puntos y 9 asistencias) y en el que tuvieron un protagonismo decisivo los hermanos Hernang¨®mez y Rudy Fern¨¢ndez (cinco triples sin fallo). Triunf¨® una Espa?a sacrificada, gremial, intensa y comprometida; alejada de la estratosfera a la que la llevaron Pau y Navarro en anteriores viajes pero con la misma solvencia competitiva que dejaron marcada los mayores. Un equipo que, replicando la din¨¢mica ascendente que marca su libro de estilo, volvi¨® a cumplir en el d¨ªa D del campeonato. El viernes, en Pek¨ªn, los de Scariolo pelear¨¢n por una plaza en la final frente al vencedor del Australia-Rep¨²blica Checa.

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¡°Si, s¨ª, s¨ª, nos vamos a Pek¨ªn¡±, cantaba la orgullosa hinchada espa?ola en el Oriental Sport Center tras otro partido para la historia competitiva de un equipo inagotable. Un grupo agarrado a la entrega como argumento inquebrantable y garant¨ªa de pelea. De inspiraci¨®n epis¨®dica pero implicaci¨®n indeleble. Pek¨ªn se une a Cali 1982 (cuarto puesto) y Saitama 2006 (oro) en la cartograf¨ªa espa?ola de semifinales mundialistas. Ante Polonia tard¨® en cuajar la defensa pero, a cambio, fluy¨® mejor el ataque. Llegaron primeros los puntos y luego el cerrojo. Ricky apuntal¨® la presentaci¨®n espa?ola en el partido con ocho puntos en seis minutos y un alarde de dinamismo que complet¨® Marc con un pu?ado de asistencias. El dominio en el rebote permiti¨® a los de Scariolo comenzar con fluidez pero, con la intendencia de Waczynski y Slaughter y una remesa de triples estrat¨¦gicos, Polonia contuvo la efervescencia de la selecci¨®n y equilibr¨® r¨¢pidamente el pulso (18-18, m. 9).

Estaba a punto de llegar una tormenta con m¨¢s ruido que nueces ante un rival respond¨®n. El atasco en el per¨ªmetro espa?ol durante todo el campeonato explot¨® en Shanghai en forma de r¨¢faga demoledora. Con cuatro triples en apenas dos minutos (tres de Juancho y uno de Rudy), los de Scariolo dejaron tiritando a su rival (38-28, m. 14). Sin embargo, pesar de la sacudida, Polonia no perdi¨® tiempo en tribulaciones. Como dando por descontada la embestida de Espa?a, el conjunto de Mike Taylor se levant¨® sin remilgos de la lona. El chaparr¨®n no les rebaj¨® la valent¨ªa.

El parcial de Espa?a de 13-5 se convirti¨® en uno de vuelta de 1-9. La determinaci¨®n polaca evidenci¨® en ese tramo que el cemento espa?ol a¨²n no hab¨ªa fraguado. Con Ponitka fuera de carril en ataque, Wazcynski y Slaughter cargaron con la responsabilidad de un equipo descarado pero parad¨®jico. Los l¨ªderes estad¨ªsticos de Polonia no eran capaces de convertir la meritoria resistencia en un plan colectivo y la segunda unidad consolidaba la sensaci¨®n de bloque pero se quedaba hu¨¦rfana de puntos. A cambio Espa?a alcanz¨® los vestuarios con unas sensaciones superiores a la diferencia acumulada (46-41, m. 20). Con la hiperactividad de Rudy (9 puntos, 4 rebotes y 2 asistencias en apenas 13 minutos en pista) como met¨¢fora de la entrega gremial a la causa. Con buenas sensaciones en ataque a falta de recuperar la memoria defensiva que les lanz¨® ante Italia y Serbia.

Se mov¨ªan los de Scariolo en el juego de la presi¨®n. Ese que a menor peso del enemigo te carga con mayor responsabilidad. Y lo sortearon con madurez. Con la madurez de su capit¨¢n entre otros. Dos triples m¨¢s de Rudy y una canasta malabar¨ªstica de Ricky permitieron a Espa?a estirar de nuevo su renta por encima de los 10 (58-44, m. 23). Y, aunque tampoco ah¨ª se rindi¨® Polonia, el territorio comenz¨® a quedar delimitado. Slaughter y la tanqueta Kulig apretaron los dientes para pasar del 62-49 al 65-58 antes de alcanzar la frontera del ¨²ltimo cuarto. Sin embargo, el esfuerzo de la persecuci¨®n dej¨® en la reserva el dep¨®sito polaco y la firmeza espa?ola comenz¨® a abrirse paso definitivamente con unos buenos minutos de Willy (72-61, m. 32).

El mismo Willy que, despu¨¦s de la pen¨²ltima carga a la desesperada de los polacos (76-72, m. 35), rescat¨® un dos m¨¢s uno providencial ante Hrycaniuk. En ese momento, el mayor de los Hernang¨®mez sumaba 12 puntos seguidos (acab¨® con 18, cuatro m¨¢s que su hermano), pero Scariolo entendi¨® que era el momento de dar salida a Marc para rematar la faena con su primer espada. Lleg¨® la selecci¨®n a la meta sin alardes, pero gestionando con solvencia la renta. Con solidaridad para repartir esfuerzos, protagonismo y 28 asistencias. Con todos sinti¨¦ndose part¨ªcipes de un equipo de entrega infinita que ha permitido dar continuidad en China a una Espa?a inagotable.