El Madrid se pierde por la cintura

La ausencia de especialistas en el centro del campo del Real Madrid, evidenciada tras la contundente derrota ante el PSG este mi¨¦rcoles en Par¨ªs (3-0), tiene su reflejo m¨¢s inmediato en la adaptaci¨®n forzosa de futbolistas como James, (no solo recuperado para la causa, sino pieza fundamental hasta el momento para Zidane) cuya mayor virtud consiste, precisamente, en liberarse de cualquier tarea burocr¨¢tica para desarrollarse libremente sobre el campo. ¡°Nos han superado en todo, especialmente el centro del campo¡±, reconoci¨® Zizou tras el partido, donde volvi¨® a emplear por segundo compromiso consecutivo, y por tercera vez en los seis partidos que van de temporada, el mismo eje con Kroos, Casemiro y James en la medular.

De esos tres jugadores, solo Casemiro posee en su briefing personal la obligatoriedad de abarcar el centro del campo desde la atenci¨®n a los huecos que generan todos los compa?eros que tiene a su alrededor. Ni James, ni mucho menos Kroos, atienden a ese concepto de sumisi¨®n t¨¢ctica, que tanto cohesiona a los equipos sin una estructura de presi¨®n ordenada. El alem¨¢n, tan fino en el desplazamiento de bal¨®n como contenido en la brega menos glamurosa, perdi¨® el tim¨®n del duelo de Par¨ªs cuando se vio superado en la marca por Gueye y Marquinhos, quienes representaron un perfil tan opuesto al suyo como eficaz. Ambos se intercambiaron la labor de recortar las dimensiones de actuaci¨®n, y utilizaron el posicionamiento como mejor arma para ahogar la salida de bal¨®n de un Madrid sin soluciones.

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Zidane: ¡°Nos han superado en todo¡±

Entre James (8), Kroos (12) y Casemiro (6) perdieron cerca de una treintena de posesiones, y fueron superados en la marca en nueve ocasiones por sus adversarios. Una fragilidad que Zidane justific¨® con la recurrente ¡°falta de intensidad¡±, ¡°de no meter la pierna¡±, que tan poco gust¨® a Casemiro. ¡°No nos ha faltado agresividad. Siempre somos agresivos¡±, replic¨® el brasile?o tras el duelo.

A pesar de que en los primeros 15 minutos de juego, previos al primer tanto de Di Mar¨ªa, la movilidad de James y su buena conexi¨®n con Kroos, resolvi¨® situaciones de salida de bal¨®n exigentes, el colombiano se difumin¨® del mismo modo que su compa?ero cuando la pelota paso a ser un elemento ajeno. Esa apropiaci¨®n del juego del PSG, elev¨® a Verratti, quien se sinti¨® con la suficiente libertad como para alcanzar la l¨ªnea de ataque y encontrar desahogo permanente por las bandas con las subidas de Bernat y Meunier. ¡°Planteamos el partido sabiendo desde el primer momento que ser¨ªa muy dif¨ªcil. Pero creo que fuimos justos ganadores¡±, reivindic¨® Thomas Tuchel, el alem¨¢n que dirige al PSG. ¡°Siempre hay d¨ªas malos y justo fue esta vez. Si pasa de nuevo un partido como estos es que somos tontos¡±, advirti¨® James, quien a pesar de terminar asfixiado en el ¨²ltimo partido de Liga ante el Levante, volvi¨® a adelantar a Lucas V¨¢zquez en la puesta en escena ante el PSG.

El remiendo de Milit?o y Mendy en defensa por las ausencias de Nacho, Ramos y Marcelo, tampoco cuaj¨® de la manera esperada. Entre el brasile?o y Varane, juntos en el centro de la zaga, perdieron en 14 ocasiones el bal¨®n (siete por cabeza) y se vieron incomodados notablemente por Icardi. A pesar de su inferior corpulencia (181 cent¨ªmetros del argentino, por los 191 de Varane, y los 184 de Milit?o) el nueve de PSG sostuvo por s¨ª solo el juego f¨ªsico de su equipo y logr¨® deshacerse de Varane en la maniobra previa al primer gol de Di Mar¨ªa. Carvajal (15 balones perdidos), tampoco fue suficiente para sostener al argentino, y mucho menos las llegadas en cobertura de Bernat, muy entonado durante todo el partido.

Ni siquiera la figura de Courtois complet¨® la tarea de pararrayos que se le presupone a un portero cuando su l¨ªnea defensiva se ve ampliamente superada. El belga suma ya nueve goles encajados esta temporada (solo Diego L¨®pez, del Espanyol, empeora esa marca con diez), y su media en la porter¨ªa del Madrid est¨¢ cerca del gol y medio por encuentro desde su llegada (58 tantos en 40 partidos). ¡°No voy a se?alar a nadie. Todos estamos en el mismo barco, y cuando perdemos lo hacemos todos¡±, le auxili¨® Zidane.

Los peores males de un equipo tienen su impacto directo en lo que sucede en la porter¨ªa propia primero, y despu¨¦s en la ajena. Y frente a un Keylor Navas de sobra conocido (¡°La verdad es que fue raro verlos en el t¨²nel de vestuarios como rivales¡±, reconoci¨® el costarricense) el Madrid complet¨® su primer partido en una d¨¦cada sin rematar a porter¨ªa (en un intervalo de 578 partidos), y el primero en Champions desde la temporada 2013-2014. Golpeado por las lesiones y condicionado por una err¨¢tica composici¨®n estructural de la plantilla, el Madrid navega con la l¨ªnea de flotaci¨®n m¨¢s err¨¢tica de las ¨²ltimas temporadas. Y no podr¨¢ remendarla hasta dentro de tres meses, aunque las peticiones sigan siendo las mismas (Pogba) y la r¨¦plica (los 200 millones que exige el Manchester United) no haya variado.