F¨²tbol sin alma
Jugadores y t¨¦cnicos que experimentaron jugar sin p¨²blico, como baraja LaLiga sin otro remedio, sostienen que descoloca psicol¨®gicamente a los futbolistas y baja su rendimiento
¡°Fue triste¡±, recuerda Miguel Tendillo. ¡°Cuando salimos al campo se me fue un poco la cabeza porque parec¨ªa un entrenamiento. Escuchaba cosas que normalmente no se o¨ªan. Escuchaba todo lo que dec¨ªan mis compa?eros, sent¨ªa los gritos que daba el rival, y cuando remataban a puerta o¨ªa el ruido que hac¨ªa el bal¨®n al rebotar en las vallas. Mi gol fue en un c¨®rner. Qued¨® un bal¨®n muerto, le di de exterior y le peg¨® a Giordano en la espalda. La pelota entr¨® y no o¨ª nada. Solo sent¨ª los abrazos de los compa?eros: Solana, M¨ªchel¡ Era raro. No me di cuenta de que era un gol important¨ªsimo de Copa de Europa¡±.
Su gol fue decisivo para eliminar al N¨¢poles de Maradona. Pero Tendillo no se sinti¨® como un h¨¦roe en la noche del 16 de septiembre de 1987, en la ida de los dieciseisavos de la Copa de Europa. Bajo el peso de una sanci¨®n disciplinaria por el pisot¨®n de Juanito a Matth?us, el Bernab¨¦u no pudo acoger p¨²blico y aqu¨¦l pas¨® a la historia como el partido m¨¢s espectacular jam¨¢s disputado a puerta cerrada. Una distorsi¨®n que ha suscitado especulaciones de todo tipo.
¡°Si llevamos a 22 jugadores a Marte y les damos una pelota, el f¨²tbol seguir¨ªa siendo f¨²tbol¡±, dec¨ªa Mauricio Pellegrino en 2002. ¡°El f¨²tbol no necesita nada m¨¢s para conservar su esencia¡±.
Dos d¨¦cadas despu¨¦s, la FIFA y la UEFA se plantean que el ¨²nico modo de salvar la industria es reanudar las competiciones a partir del germen del juego. Si las ligas se reinician en mayo o en junio deber¨¢n hacerlo en recintos cerrados a los que solo se permitir¨¢ la entrada a unas 100 personas.
La realidad supera a la ficci¨®n de Pellegrino. ¡°Es una situaci¨®n sin precedentes; no lo hemos vivido ni como personas ni como profesionales¡±, dice ahora el excentral argentino; ¡°las medidas que se tomen, por tanto, tampoco tendr¨¢n precedentes¡±.
Fue triste; no me di cuenta de que hab¨ªa hecho un gol important¨ªsimo de Copa de EuropaMiguel Tendillo, autor del 2-0 al N¨¢poles de Maradona
Juventus-Inter, Eibar-Real Sociedad y Borussia M?nchengladbach-Colonia fueron los ¨²ltimos partidos disputados esta temporada en las grandes ligas europeas, los tres sin p¨²blico. ¡°Fue la primera vez en la historia que se jugaba sin gente en la Bundesliga¡±, dice Jorge Mer¨¦, defensa del Borussia. ¡°En Alemania la gente vive much¨ªsimo el f¨²tbol. Los campos se llenan. Y esto era un derbi, as¨ª es que se hizo m¨¢s raro. Pero lo m¨¢s importante era proteger a las personas y creo que fue una buena medida. Lo m¨¢s coherente ser¨ªa volver a jugar a puerta cerrada porque juntar a 40.000 personas puede llevar a contagios y eso no lo quiere nadie¡±.
En las 11 jornadas que restan del campeonato liguero, adem¨¢s de la final de Copa, el f¨²tbol puede someterse a un procedimiento ins¨®lito. Juande Ramos, que como t¨¦cnico del Sevilla dirigi¨® un Sevilla-Betis a puerta cerrada en cuartos de final de la Copa de 2007, observa que la ausencia de p¨²blico remover¨¢ el estado de ¨¢nimo de los jugadores. ¡°A nivel t¨¢ctico, es lo mismo¡±, dice Juande. ¡°Cambia el escenario. Los futbolistas son como los actores. Trabajan para el p¨²blico. Hay equipos que muestran prestaciones mucho m¨¢s altas jugando de local porque sus aficiones los empujan mucho. Esa ventaja psicol¨®gica se va a perder. Los campos ser¨¢n neutrales¡±.
Adem¨¢s de las habilidades t¨¦cnicas los deportistas de alto nivel poseen rasgos temperamentales como la necesidad de autoimportancia y de reconocimiento, que les llevan a sobresalir y a ser l¨ªderes, y les afecta cuando no lo tienenN¨¦stor Szerman, psiquiatra del hospital Gregorio Mara?¨®n
¡°Un dato lo dice todo¡±, se?ala Juande. ¡°Cuando a los futbolistas los quitas del partido se cabrean, o tienen reacciones feas, a veces poco controladas, contra s¨ª mismos, contra el entrenador, contra sus compa?eros... Esto jam¨¢s sucede cuando los quitas de los partidos de entrenamiento: nunca reaccionan mal. En los partidos est¨¢n tan supermotivados que se transforman. El p¨²blico modifica el rendimiento¡±.
Mart¨ªn V¨¢zquez, que disput¨® el famoso Madrid-N¨¢poles, se sinti¨® tan desubicado aquella noche que pr¨¢cticamente no recuerda nada. ¡°T¨² profesi¨®n va ligada al espect¨¢culo¡±, razona; ¡°el espect¨¢culo es con p¨²blico. Cuando te falta el p¨²blico est¨¢s jodido. Te falta la chispa. Te faltan aquellos a quienes te debes. Te falta ese aplauso que esperas ganarte. Si haces una encuesta entre todos los jugadores de Primera te dir¨¢n que antes que a puerta cerrada prefieren jugar con el p¨²blico en contra, aunque les pite cada vez que tienen el bal¨®n. Esa sensaci¨®n de vac¨ªo, de tristeza, no tiene que ver con tu oficio¡ Es una sensaci¨®n de eco, de ultratumba¡±.
¡°A m¨ª siempre me ha gustado la adrenalina de sentir la presi¨®n del p¨²blico¡±, dice Juan Guti¨¦rrez, Juanito, que se enfrent¨® al Sevilla de Juande en el partido a puerta cerrada de 2007. ¡°Once jornadas seguidas a puerta cerrada pueden provocar bajadas en el rendimiento que estamos acostumbrados a ver. Porque si quitas el p¨²blico, a los jugadores les quitas parte de la adrenalina. Cuando acabas un partido ante 50.000 personas acabas sin energ¨ªa porque juegas sabiendo que tienes que actuar de cierta manera. Cuando acabas los partidillos del entrenamiento, aunque duren 90 minutos, ?acabas como nuevo!¡±
No hay un solo futbolista profesional que no sienta repulsi¨®n ante la idea de competir frente a una grada vac¨ªa. ¡°La principal hip¨®tesis es que el narcisismo es necesario para destacar en cualquier ¨¢rea de la vida¡±, dice Nestor Szerman, responsable de la Unidad de Salud Mental del Gregorio Mara?¨®n. ¡°Los que destacan, adem¨¢s de ser t¨¦cnicamente buenos, muchas veces poseen un elevado sentido de la autoimportancia. Adem¨¢s de las habilidades t¨¦cnicas poseen rasgos temperamentales como la necesidad de admiraci¨®n, de reconocimiento, que les llevan a sobresalir y a ser l¨ªderes¡±.
No se ver¨¢n esos arbitrajes que por presi¨®n te van minando poco a poco y que a veces hacen inclinar la balanza. Sobre todo lo van a sufrir los equipos que mueven m¨¢s afici¨®nJuanito, exinternacional y director deportivo del C¨®rdoba
Estimular a un jugador a saltar a un campo vac¨ªo es un problema pendiente de resolver. Juande Ramos se encoge de hombros: ¡°Les tienes que decir que tienen que trabajar para ellos mismos¡±. Juanito, que ahora es director deportivo del C¨®rdoba, aventura tres consecuencias: los jugadores mostrar¨¢n resiliencia, los entrenadores influir¨¢n m¨¢s y los ¨¢rbitros actuar¨¢n con m¨¢s libertad. ¡°Los futbolistas se adaptar¨¢n¡±, dice, ¡°porque se adaptan a todo¡±. Y agrega: ¡°Los ¨¢rbitros no van a sentir la presi¨®n del p¨²blico. Se notar¨¢ menos la diferencia entre locales y visitantes. Sobre todo lo van a sufrir los equipos que mueven m¨¢s afici¨®n¡±.
Tu entrenador te puede dar m¨¢s explicaciones porque se escucha todo; pero al escucharse todo, al equipo contrario le est¨¢s dando m¨¢s pistasJorge Mer¨¦, defensa del Borussia M?nchengladbach
Juanito, que ahora es director deportivo del C¨®rdoba, aventura tres consecuencias: los jugadores mostrar¨¢n resiliencia, los entrenadores influir¨¢n m¨¢s y los ¨¢rbitros actuar¨¢n con m¨¢s libertad. ¡°Los futbolistas se adaptar¨¢n¡±, dice, ¡°porque se adaptan a todo. Los ¨¢rbitros, que muchas veces son influidos por el p¨²blico a la hora de pitar algunas faltas, no van a sentir esa presi¨®n. Se notar¨¢ menos la diferencia entre locales y visitantes. Se puede ver menos ese arbitraje que por presi¨®n ambiental te va minando poco a poco y que a veces hace inclinar la balanza hacia un lado. Sobre todo lo van a sufrir los equipos que mueven m¨¢s afici¨®n¡±.
¡°Yo habl¨¦ mucho m¨¢s con el ¨¢rbitro¡±, coincide Mer¨¦. ¡°De un modo mucho m¨¢s tranquilo, con el tono adecuado. A veces gritas para hacerte o¨ªr, y los ¨¢rbitros lo interpretan como una protesta y te sancionan. Pero a puerta cerrada la comunicaci¨®n es m¨¢s fluida¡±.
¡°Recuerdo que cuando jugamos sin p¨²blico se escuchaba todo lo que dec¨ªan los entrenadores desde los banquillos¡±, apunta Juanito. ¡°Era extra?o porque cuando hay p¨²bico al entrenador solo lo ves gesticular y mover las manos. Hasta que no llega el descanso su capacidad para cambiar el juego es muy limitada; pero a puerta cerrada los t¨¦cnicos pueden cambiar muchas cosas t¨¢cticas sobre la marcha¡±.
¡°Sin gente, el entrenador te puede dar m¨¢s explicaciones porque se escucha todo¡±, reflexiona Mer¨¦. ¡°Pero al escucharse todo, al equipo contrario le est¨¢s dando m¨¢s pistas. ?Yo no cambiar¨ªa al p¨²blico por la posibilidad de entenderme mejor con el entrenador en el campo!¡±.
Acelerado por la vocaci¨®n robotizante de los t¨¦cnicos, el f¨²tbol ya hab¨ªa perdido espontaneidad. Por obra de la plaga de coronavirus, adem¨¢s, va camino de perder emoci¨®n.
LOS ACTORES PARA UN PARTIDO SIN P?BLICO:
LaLiga regula el personal m¨ªnimo necesario para la celebraci¨®n de un partido a puerta cerrada, al que podr¨ªan acceder los siguientes actores:
Jugadores: 36 personas (18 por equipo).
Cuerpos t¨¦cnicos y auxiliares: 18 personas como m¨¢ximo (9 por equipo).
?rbitros: 4 personas.
Delegados de LaLiga: director de partido, m¨¦dicos antidoping y personal sanitario: 8 o 9 personas.
Personal t¨¦cnico con funciones estrictamente relacionadas con la organizaci¨®n del evento (recogepelotas, personal de mantenimiento y limpieza), hasta un m¨¢ximo de 100 personas, seg¨²n LaLiga.
Oficiales de integridad, seguridad p¨²blica y privada, vigilantes, bomberos y t¨¦cnicos de primeros auxilios.
Personal necesario de la productora encargada de la retransmisi¨®n televisiva del partido.
La patronal permite adem¨¢s la entada de fot¨®grafos oficiales y ¡®community managers¡¯ de los dos equipos.
En total, un encuentro disputado a puerta cerrada puede necesitar a m¨¢s de 150 personas.
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