Vuelve la Premier con otra victoria rotunda del City sobre el Arsenal
El equipo de Guardiola obtiene su s¨¦ptimo triunfo consecutivo ante un rival desencajado por los disparates de David Luiz. El espa?ol Eric Garc¨ªa debi¨® abandonar el campo en camilla
Volvi¨® la Premier despu¨¦s de tres meses de una pandemia que en Inglaterra se ha cobrado casi 30.000 fallecidos, seg¨²n los registros oficiales. El primer bal¨®n rod¨® en Birmingham ¡ªel Villa empat¨® ante el Sheffield¡ª y el segundo en el norte de Manchester, en donde el City interpret¨® la variaci¨®n de un viejo tema. El equipo de Guardiola se enfrent¨® al Arsenal derrot¨¢ndolo por s¨¦ptima ocasi¨®n consecutiva.
Ca¨ªa una lluvia torrencial sobre el Etihad y el crep¨²sculo se cargaba de una bruma pesada cuando son¨® la canci¨®n f¨²nebre y los equipos honraron a los muertos en el c¨ªrculo central. El estadio vac¨ªo parec¨ªa el escenario de una pel¨ªcula apocal¨ªptica. Nada hac¨ªa pensar en un duelo vibrante. Pero contra la inercia let¨¢rgica de los meses de inactividad en las piernas, a ratos el City dej¨® un aroma espl¨¦ndido. Enfrente se encontr¨® con un Arsenal disciplinado, tan cumplidor que a ratos se qued¨® tieso de tan poca imaginaci¨®n, perplejo ante las permutas que De Bruyne, Silva, Mahrez y Sterling hacen de memoria.
La an¨¦cdota folcl¨®rica tuvo pendiente a la multitud televisiva. En el banquillo del Arsenal se sent¨® Mikel Arteta, por primera vez enfrentado al que hab¨ªa sido su mentor, pues hace seis meses Arteta renunci¨® al cargo de ayudante de Guardiola para ocuparse del declinante quipo de Londres. Ah¨ª contaban que Arteta, que en marzo dio positivo por covid-19, aprovech¨® la reclusi¨®n para hacerse con todos los hilos del vestuario en un despliegue de liderazgo que dej¨® a la directiva impresionada. Lo cierto que Arteta adopt¨® medidas tajantes nada m¨¢s comenzar. Dej¨® fuera de la convocatoria a ?zil, la estrella del club, y en el banquillo a Lacazette, un delantero eminente, postergado por los j¨®venes Saka y Niketiah. De entrada mand¨® a sus muchachos a meter balones largos a la espalda de los centrales locales, cosa presumible dada la insistencia en los pelotazos para que Aubameyang y Nikeitiah intentaran sorprender. Laporte, el jefe de la zaga, casi se come el primer embate. A su lado, el jovenc¨ªsimo Eric Garc¨ªa, no se dej¨® burlar ni una vez. El central catal¨¢n fue un reloj. Lo hizo todo bien hasta que a falta de diez minutos Ederson le derrib¨® de un pu?etazo desaforado cuando intentaba despejar un bal¨®n que no necesitaba despejar. La procesi¨®n de m¨¦dicos y auxiliares llev¨¢ndose al chico en camilla result¨® preocupante.
Un golpe de suerte sonri¨® al Arsenal en los instantes de tanteo: Granit Xhaka, el siempre atribulado mediocentro, pidi¨® el cambio por lesi¨®n y fue sustituido por Ceballos, que no tiene ¨ªnfulas de capataz pero es mejor futbolista. El City se adue?¨® de la pelota sin demasiado ritmo hasta que Pablo Mar¨ª tambi¨¦n pidi¨® el cambio por lesi¨®n. Lo sustituy¨® David Luiz, un futbolista impredecible en el momento m¨¢s decadente de su carrera. Disgustado por su suplencia, entr¨® al campo en avanzado estado de dispersi¨®n.
Despu¨¦s de un acoso progresivo y tres llegadas peligros¨ªsimas, el City desatornill¨® la r¨ªgida armaz¨®n de su oponente. Se abrieron los interiores Silva y De Bruyne, se cerraron los extremos Mahrez y Sterling, y Jes¨²s arrastr¨® a sus marcadores. Desorientados por el movimiento, los zagueros del Arsenal se quedaron mirando al lado equivocado de la jugada mientras Sterling se les colaba, desmarc¨¢ndose nada m¨¢s ver el control de De Bruyne. El belga hizo el pase y David Luiz midi¨® mal, toc¨® el bal¨®n, y se lo sirvi¨® a Sterling, que remat¨® el jugad¨®n a la red.
El partido deriv¨® en baile de los visitantes antes de acabar precipitadamente. Ocurri¨® tras el descanso, cuando David Luiz derrib¨® a Mahrez dentro del ¨¢rea del modo m¨¢s ostentoso imaginable. Como si quisiera hacerse expulsar. Le mostraron roja directa, el Arsenal se qued¨® con uno menos, De Bruyne meti¨® el 2-0 y lo dem¨¢s fue equiparable a un entrenamiento. Foden hizo el 3-0.
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