La rabia del 10
Las tres semanas fren¨¦ticas del argentino, desde la humillaci¨®n en la Champions a la charla con Guardiola, el burofax y la aparici¨®n de su padre
Cuando ya estaba todo encaminado para que Lionel Messi firmara su noveno v¨ªnculo con el FC Barcelona, el rosarino le pidi¨® a su padre y represente, Jorge Horacio, que paralizara las negociaciones. No ve¨ªa clara su continuidad en el club azulgrana despu¨¦s de que el 10 de junio se negara a utilizar la cl¨¢usula en su contrato que le permit¨ªa abandonar la entidad a final de la temporada 2020. Una monta?a rusa emocional que hab¨ªa comenzado desde que se despidi¨® a Ernesto Valverde en enero y que parec¨ªa haber tocado fondo cuando firm¨® la tregua con Quique Seti¨¦n tras sucumbir en LaLiga ante el Real Madrid. Pero no. Pas¨® todo lo contrario. El 14 de agosto, Messi sufri¨® la peor derrota de su carrera, ante el Bayern (2-8). Desde entonces una vor¨¢gine de rabia que incluy¨® llamadas a Pep Guardiola, dos burofaxes al Bar?a, viaje rel¨¢mpago y medi¨¢tico de su padre y representante a Barcelona y que termin¨® este viernes siempre seg¨²n Messi, con Josep Maria Bartomeu en la diana.
El camino a Lisboa comenz¨® torcido para el Barcelona. La victoria frente al N¨¢poles en el Camp Nou (3-1) en la vuelta de los octavos de final no calm¨® los ¨¢nimos en el vestuario. La plantilla azulgrana volvi¨® a ense?ar viejas rencillas en el grupo. ¡°No se puede pretender competir en Europa y defender con nueve jugadores¡±, se quejaban en la caseta respecto a la actitud colectiva de Messi y Luis Su¨¢rez. El problema empez¨® entre los jugadores y la bronca alcanz¨® al cuerpo t¨¦cnico. No era la primera vez que pasaba. El grupo, que ya hab¨ªa sido acusado por Eric Abidal, secretario t¨¦cnico, de no ser demasiado propensos al trabajo, se quejaba de que el partido ante el Bayern estaba mal preparado. ?El resultado? ¡°No se puede enmascarar m¨¢s, esto es una verg¨¹enza¡±, sintetiz¨® Gerard Piqu¨¦.
Messi, como acostumbra a hacer cuando todav¨ªa le escuecen las derrotas, se refugi¨® en el silencio. Sin embargo, hab¨ªa algo que quer¨ªa decir: su etapa en el Barcelona hab¨ªa llegado a su fin. Y ten¨ªa un plan. Al menos, eso cre¨ªa. Recordaba qui¨¦n era el entrenador con el que hab¨ªa llegado a la cima en su carrera: Pep Guardiola. Con el t¨¦cnico catal¨¢n en el Camp Nou gan¨® cuatro de los seis balones de oro que tiene en su casa (2009, 2010, 2011 y 2012). Llam¨® a Guardiola y le dijo que esta vez s¨ª estaba dispuesto a mudarse a M¨¢nchester (en 2016 le hab¨ªa dicho lo mismo y recul¨® en el ¨²ltimo momento). Ferran Soriano, consejero delegado del City Group, le dio el OK a la operaci¨®n, pero puso una condici¨®n: ¡°Messi tiene que llegar libre¡±.
Reuni¨®n con Koeman
El capit¨¢n del Barcelona, en cualquier caso, acept¨® reunirse con Ronald Koeman, que ya hab¨ªa reemplazado a Quique Seti¨¦n. Messi condujo su coche desde la Cerdanya donde estaba descansando con su familia hasta Barcelona para encontrarse con el holand¨¦s el 21 de agosto. El central del Dream Team le aclar¨® que sus amigos Luis Su¨¢rez y Arturo Vidal no formaban parte de su proyecto. El 10 no dijo nada: segu¨ªa convencido de su decisi¨®n. ¡°No es por Luis ni por Koeman. Ciclo cumplido. Nuevos aires¡±, informaban desde la familia del rosarino. Cuatro d¨ªas m¨¢s tarde, los abogados del rosarino enviaron un burofax al Camp Nou. En resumidas cuentas, cre¨ªa que ten¨ªa derecho a activar la cl¨¢usula de su contrato que le permit¨ªa abandonar el club al finalizar la campa?a 2020 (la misma que hab¨ªa desechado utilizar el 10 de junio, cuando todav¨ªa se jugaba LaLiga). En el Bar?a, no pensaban lo mismo.
Messi se volv¨ªa a sentir enga?ado por el presidente despu¨¦s de que en el ¨²ltimo a?o le dijera que no iba a fichar a Griezmann y que iba a traer a Neymar. Decidi¨® no acudir a las pruebas PCR (lo avis¨® a trav¨¦s del segundo burofax) y, por lo tanto, tampoco se present¨® al primer d¨ªa de Koeman como t¨¦cnico del Bar?a. Pasaba el tiempo y se desvanec¨ªa la opci¨®n de dejar el Camp Nou. En M¨¢nchester lo sab¨ªan y su padre, tambi¨¦n. Jug¨® su ¨²ltima carta y aterriz¨® en Barcelona. El mi¨¦rcoles se reunieron Jorge Messi y Bartomeu. Ambas partes coincidieron en que la reuni¨®n fue cordial, pero ninguno se movi¨® de su guion. Y fin de partido para Messi. El jueves realiz¨® la entrevista con Goal que se public¨® este viernes en la que anunciaba que se quedaba en el Bar?a. No escondi¨® su malestar. Antes, su padre hab¨ªa querido mandarle un mensaje a LaLiga asegurando que la cl¨¢usula de 700 millones no estaba vigente.
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