Nadal aplaca a Sinner de madrugada
El mallorqu¨ªn resuelve un duro cruce con el talento italiano (7-6(4), 6-4 y 6-1, en 2h 49m) , en el partido m¨¢s tard¨ªo de la historia de Roland Garros, para citarse con Schwartzman en las semifinales del torneo
A las 1.26, la madrugada cerrada de Par¨ªs acoge el triunfo de Rafael Nadal, que abate a un talento de 19 a?os que quiere presentarse al mundo haciendo ruido y le conduce durante un buen rato hacia el l¨ªmite. Yannik Sinner empuja y aprieta sin mirar atr¨¢s, pero el rey de la arcilla termina imponiendo la ley del m¨¢s fuerte en una velada que no olvidar¨¢ jam¨¢s. ¡°Gracias por quedaros hasta tan tarde¡±, se dirige a los 400 espectadores que todav¨ªa habitan la pista y han sido testigos del partido m¨¢s tard¨ªo de la historia d...
A las 1.26, la madrugada cerrada de Par¨ªs acoge el triunfo de Rafael Nadal, que abate a un talento de 19 a?os que quiere presentarse al mundo haciendo ruido y le conduce durante un buen rato hacia el l¨ªmite. Yannik Sinner empuja y aprieta sin mirar atr¨¢s, pero el rey de la arcilla termina imponiendo la ley del m¨¢s fuerte en una velada que no olvidar¨¢ jam¨¢s. ¡°Gracias por quedaros hasta tan tarde¡±, se dirige a los 400 espectadores que todav¨ªa habitan la pista y han sido testigos del partido m¨¢s tard¨ªo de la historia de Roland Garros, resuelto a 12 grados, en 2h 49m: 7-6(4), 6-4 y 6-1.
Toca cita, pues, con Diego Schwartzman, que a media tarde ha despachado a Dominic Thiem y ser¨¢, por tanto, el adversario en la semifinal del viernes.
Aunque la procesi¨®n va por dentro y la mascarilla camufla, Nadal lleva un cabreo morrocotudo al acceder a la Chatrier, donde entra el h¨²medo fr¨ªo del norte y rasca con sa?a el viento de la noche parisina. Pone el primer pie a las 22.28 y a todo el mundo (menos a Sinner, ?por qu¨¦ iba ¨¦l a tener prisas a su edad?) le interesa acelerar, de ah¨ª que la organizaci¨®n aumente el paso y a las 22.37 ya se est¨¦ dirimi¨¦ndose el primer punto. Nunca hab¨ªa jugado tan tarde el mallorqu¨ªn en su retiro franc¨¦s, este a?o un ¨¢rido paisaje que adem¨¢s de la climatolog¨ªa incorpora la nocturnidad y la luz artificial. Y esta vez, tambi¨¦n a Sinner.
Tiene el chico hechuras de fant¨¢stico jugador, tiene la estatura (1,88m), el temple de un treinta?ero y un rev¨¦s a dos manos que ya lo quisieran muchos. Nadal, que ha pedido entrenarse con ¨¦l tanto en Roma como en Par¨ªs porque tiene buen olfato, le mete prisa y cierra el primer juego en blanco, en tres minutos, pero ¨¦l no es Sebastian Korda y no se deja deslumbrar por el ¨¢ura del rival, ni presume de camisetas ni aut¨®grafos en las redes. ?l est¨¢ aqu¨ª para ganar. Se lo discute absolutamente todo al balear, que sabe de qu¨¦ pasta est¨¢ hecho el italiano y tambi¨¦n sabe que puede pasar un mal rato.
Han transcurrido apenas cuatro juegos y ya est¨¢ chorreando, mientras el joven pelirrojo, que iba para esquiador y con esa gorrilla y esos pelos que asoman de ella parece un empleado de una cadena de comida r¨¢pida, toma la pista y dispone. Ordena Sinner y apaga fuegos constantemente Nadal, que ante la ofensiva no encuentra tregua y encima no toca nada limpia la bola, m¨¢s pesada de por s¨ª, m¨¢s ahora porque la humedad es a¨²n mayor y el techo est¨¢ abierto, as¨ª que la hojarasca del Bois de Boulogne empapa todo lo que est¨¢ a su alrededor.
El oto?o no perdona y la central, por muy bonita que haya quedado, no es una excepci¨®n. No le importa demasiado al italiano, que pone por primera vez en apuros al mallorqu¨ªn en el torneo: break, 6-5 abajo, sirve para cerrar y, quien sabe lo que hubiera pasado, hacerse con el primer set. Pero ah¨ª se rebela Nadal, en cuyo diccionario no existe la palabra miedo. Le devuelve la rotura y en el desempate va marcando distancias con jerarqu¨ªa. Muy bien, chaval, eres muy bueno y est¨¢s haci¨¦ndome correr como Kipchoge, pero lo tuyo puede esperar. No es tu hora. No aqu¨ª. No contra m¨ª.
Pero el chico, c¨²spide del ambicioso plan que est¨¢ desarrollando el tenis italiano con su base, sigue erre que erre, empe?ado en tirar la puerta. Tiene un buen abanico de recursos y prosigue. Aqu¨ª estoy, me llamo Yannik Sinner y soy el chico alto del Trentino que tanto promete, quedaros con el nombre. Y sigue, sigue y sigue. Vuelve a embestir y le arrebata un saque a Nadal, que encima observa c¨®mo resuelve en la red a la media vuelta y escora tanto una volea que al ir a cazarla casi acaba estrell¨¢ndose con una silla; le sortea tambi¨¦n con un globo cruzado de rev¨¦s, par¨¢bola perfecta, y remata al ense?ar la personalidad mostrando el pu?o.
Al perder el primer set le han atendido de la rodilla derecha, pero da igual. No da su brazo a torcer, tira l¨ªneas de un lado a otro y Nadal, que ahora s¨ª, va entrando ya en calor y luce escudo en uno de esos d¨ªas que lo requiere, le da un zarpazo para 3-2 y despu¨¦s otro para 5-4. Son dos monta?as de cal viva encima y aun as¨ª, el chico no reh¨²ye la pelea y discute hasta el final, pero el gobernante ya bate entonces las alas de modo imperial. Un desenlace que parece escrito, tantas veces visto, disfrutado por unos y sufrido por la gran mayor¨ªa de sus rivales. Por todos en Par¨ªs, menos Robin Soderling y Novak Djokovic, los dos ¨²nicos que le han mordido en su reino.
Quiso Sinner, pero no le dej¨®. Deber¨¢ esperar y, mientras tanto, Nadal sobrevuela las semifinales habiendo pasado una dura prueba de fuego en la madrugada de Par¨ªs, Paris la nuit. Es su partido 100, 98 victorias. Ya 7 de octubre de 2020. Historia en Roland Garros.
¡°HACE DEMASIADO FR?O PARA JUGAR AS?, ESTO NO ES F?TBOL¡±
Nadal irrumpi¨® en la sala de conferencias a las 2.10 y atendi¨® a los periodistas durante algo m¨¢s de diez minutos, antes de coger un coche y regresar a su hotel.
¡°El problema es el tiempo, hace demasiado fr¨ªo para jugar. Honestamente, hace mucho, mucho fr¨ªo para jugar al tenis¡±, incidi¨® en ingl¨¦s; ¡°s¨¦ que los futbolistas juegan bajo esas condiciones, pero es un poco diferente, porque ellos est¨¢n en constante movimiento; nosotros paramos, volvemos y luego est¨¢n otra vez los descansos. El tenis es un deporte en el que te paras en muchos momentos. Creo que es un poco peligroso para el cuerpo jugar en estas condiciones tan duras, pero es lo que ha ocurrido¡±.
El mallorqu¨ªn, de 34 a?os, se tem¨ªa la noche anterior lo que finalmente termin¨® sucediendo. ¡°No s¨¦ por qu¨¦ pusieron cinco partidos en la Chatrier hoy, era un riesgo. Lo vi inmediatamente cuando me mandaron ayer el calendario; hab¨ªa claras opciones de que un par de partidos se fueran largos. Es un poco de mala suerte, pero ha sucedido as¨ª. Trat¨¦ de ser paciente, aceptar todo y adoptar una actitud positiva¡±, expres¨®.
¡°No, no, para nada, solo faltar¨ªa que empezase enfadado¡±, respondi¨® ya en espa?ol. ¡°He aceptado en todo momento las situaciones. No es lo ideal, sobre todo por la temperatura, pero sabemos lo que ocurre en estos torneos de dos semanas y tenemos que manejar todo esto. He ganado un partido dif¨ªcil contra un muy buen jugador, y estar en semifinales es un muy buen resultado¡±, valor¨®.
Con Schwartzman a la vista, transmiti¨®: ¡°Faltan dos d¨ªas; bueno, un d¨ªa y medio casi¡ Yo he hecho las cosas bien desde que llegu¨¦, en el sentido de intentar buscar un buen camino y de momento est¨¢ hecho. Ahora queda lo m¨¢s dif¨ªcil. Necesito mejorar algunas cosas y el final del partido me marca el camino. He de jugar con determinaci¨®n y agresividad, e intentar hacer cosas distintas a lo que hice en Roma¡±.