El Athletic intenta despejar las dudas
El equipo rojiblanco vence al Levante con justicia, con goles de Berenguer y Williams
El Athletic intent¨® disipar las dudas que hab¨ªa creado en el comienzo de la Liga con un triunfo merecido ante un Levante sin argumentos. La ventaja pudo ser mayor, pero los dos goles son oro puro despu¨¦s de la zozobra de tres derrotas en cinco partidos.
San Mam¨¦s estaba hecho unos zorros, como el Athletic. Dicen que el estado del c¨¦sped se degrada con la falta de luz artificial. Desde que se ampli¨® la cubierta, el campo est¨¢ muy cerrado y no pega el sol lo suficiente pese a la medicina de los focos que activan la funci¨®n clorof¨ªlica en la hierba. Pero no hay focos que iluminen la propuesta futbol¨ªstica de los jugadores rojiblancos, salvo que jueguen con intensidad. S¨®lo chispazos de vez en cuando. Por eso el Levante, que pas¨® apuros s¨®lo mientras el ¨¢rbitro revisaba una acci¨®n en la que hab¨ªa se?alado penalti sobre Balenziaga -aunque luego se retract¨®-, jug¨® una c¨®moda primera parte. No se ve¨ªa esa intensidad por ninguna parte.
Percut¨ªa el Athletic a veces por la derecha, otras por la izquierda, por la que pululaba Berenguer, que se est¨¢ adaptando al equipo pero no terminaba de llegar con convicci¨®n. S¨®lo antes del penalti no nato acert¨® a crear una buena ocasi¨®n despu¨¦s de que Williams se deslizara hasta la l¨ªnea de fondo y, despu¨¦s de un centro confuso, Muniain rematara para que sacara la defensa debajo del larguero.
Berenguer, que no hab¨ªa aparecido demasiado durante la primera media hora, como si afrontara con prudencia su debut en San Mam¨¦s ¨Caunque ya jug¨® con Osasuna¨C, empez¨® a dejarse ver en una buena asistencia a Muniain y en un disparo cruzado que ataj¨® Koke Vegas.
En la segunda mitad se dej¨® la timidez en el vestuario. Berenguer se empez¨® a destapar, por una banda y por la otra. Cogi¨® protagonismo. Intent¨® un disparo despu¨¦s, tras recibir de Muniain en un c¨®rner, y eclosion¨® en el minuto 67, cuando despu¨¦s de que Ra¨²l Garc¨ªa ganara un duelo a¨¦reo, recibi¨® a diez metros del ¨¢rea, cuerpe¨® con Postigo, se llev¨® la pelota y, ante la salida de Koke, toc¨® con sutileza al palo contrario para abrir el marcador.
Andaba m¨¢s entonado el Athletic, m¨¢s convencido de que, ante un Levante sin demasiados argumentos, cualquier detalle pod¨ªa darle los tres puntos. El equipo de Paco L¨®pez, m¨¢s apocado que nunca, no sacaba ning¨²n r¨¦dito a sus llegadas al ¨¢rea. No estaba en el partido. El Athletic de la segunda parte, s¨ª. Y Berenguer m¨¢s. Hizo otro gol, anulado por un fuera de juego milim¨¦trico de Ra¨²l Garc¨ªa, e inici¨® la jugada del segundo tanto bilba¨ªno.
La comenz¨® por la derecha, luego la pelota cay¨® a la izquierda, donde Morcillo le gan¨® la carrera al defensa, centr¨® paralelo a la l¨ªnea de gol, y Williams par¨® con un pie y anot¨® con el otro a un metro de la porter¨ªa para lograr el marcador definitivo, que pudo haber sido m¨¢s amplio si hubiera acertado en la mejor ocasi¨®n del partido, la que siempre se asocia a su juego: recibi¨® en el centro del campo, se march¨® solo, en una carrera a la que ning¨²n defensa pod¨ªa llegar, y se ofusc¨® ante Koke, contra quien estrell¨® la pelota. Para entonces, el Athletic ya no ten¨ªa ning¨²n temor, porque el Levante no dio se?ales de vida en los 90 minutos.
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