Niep¨®mniachi se desploma ante Carlsen

Magnus Carlsen ha ganado el Leyendas del Ajedrez (4? torneo r¨¢pido por internet del circuito que lleva su nombre) por su enorme consistencia y porque su rival en el duelo decisivo, el ruso Ian Niep¨®mniachi, ha confirmado que la inconsistencia es su principal problema: tras su dura resistencia de ayer en la 1? manga (que perdi¨® en el desempate rel¨¢mpago) hoy se ha desmoronado (0,5,2,5). El noruego, vencedor de tres de los cuatro torneos, disputar¨¢ la gran final del 9 al 20 de agosto en Chess24.com con el otro ganador, el ruso Danil D¨²bov, y los dos mejores clasificados: el estadounidense Hikaru Nakamura y el chino Liren Ding.

En los tres torneos que jug¨®, Carlsen solo ha perdido un duelo, contra Nakamura. "En general, creo que he jugado bien durante el circuito, pero tengo cosas que mejorar, porque mis oponentes en la final ser¨¢n muy duros", resumi¨®. Y sobre lo que acababa de ocurrir, manifest¨®: ¡°El error de Ian en la primera partida de hoy es tan grosero que me sorprendi¨® much¨ªsimo. Supongo que debe estar cansado porque su trayectoria hasta la final fue m¨¢s dura que la m¨ªa¡±. Tras su nueva victoria en la segunda, uno de los comentaristas de Chess24, el ruso Alex¨¢nder Grischuk, triple campe¨®n del mundo en la modalidad rel¨¢mpago, exclam¨®: ¡°La ¨²nica manera de salvar a Ian es que los piratas rusos ataquen el servidor de Chess24¡±.

Desde la primera partida de esta segunda manga, Niep¨®mniachi se mantuvo fiel a la tesis de Anatoli K¨¢rpov ¨C¡°Para ganar a Carlsen hay que llevarle a posiciones agudas¡±, a pesar de que conduc¨ªa las piezas negras. Tras los quince primeros movimientos, la posici¨®n era equilibrada, aunque tensa. Y entonces el ruso hizo una jugada claramente mala, sospechosa a primera vista -no solo para grandes maestros- porque debilitaba al propio rey y el complejo de casillas blancas cercanas al enroque. El castigo de Carlsen fue inmediato y contundente.

Es decir, m¨¢s all¨¢ del consejo de K¨¢rpov, Niep¨®mniachi dio la impresi¨®n de jugar pasado de revoluciones. En ello podr¨ªa influir no solo el ansia por jugar bien frente al campe¨®n, sino tambi¨¦n el cansancio acumulado: la semifinal de Niep¨®mniachi frente al neerland¨¦s Anish Giri fue mucho m¨¢s extenuante que la de Carlsen frente al octacampe¨®n de Rusia, P¨¦ter Sv¨ªdler.

Y esa impresi¨®n se acrecent¨® en el segundo asalto. Niep¨®mniachi, con blancas, recibi¨® un jaque en el decimoquinto lance. Cualquier jugada de rey le daba una posici¨®n m¨¢s que razonable, incluso algo ventajosa. En lugar de ello, elimin¨® el alfil jaqueador a cambio de entregar una torre, lo cual no era necesariamente malo, porque parec¨ªa tener compensaci¨®n posicional suficiente. Por tanto, se manten¨ªa fiel al consejo de K¨¢rpov, complicando el juego.

Pero inmediatamente despu¨¦s omiti¨® un golpe t¨¢ctico sencillo, que cualquier ajedrecista de cierto nivel ve de inmediato. Eso dio clara ventaja a Carlsen, quien volvi¨® a ser implacable en su explotaci¨®n, con el matiz de que la presi¨®n del reloj le quit¨® precisi¨®n y alarg¨® la partida, pero su ventaja siempre fue grande. El tercer asalto fue muy f¨¢cil para Carlsen, quien desde la apertura, con blancas, eligi¨® un camino seguro, y no tuvo el menor problema para hacer tablas. Su premio es de 45.000 d¨®lares (38.243 euros); Niep¨®mniachi cobrar¨¢ 30.000 (25.491).

Dada la persistente baja forma de Ding desde marzo -aunque sus ¨²ltimas partidas en la primera fase de este torneo alumbraron alguna esperanza-, el juego de Niep¨®mniachi este lunes en la 1? manga contra Carlsen pudo hacer pensar que su presencia en la gran final podr¨ªa ser m¨¢s interesante que la del chino. Pero su flojo rendimiento en la 2? cuestiona esa idea. La otra duda es la del estadounidense Fabiano Caruana, cuyo juego en los torneos m¨¢s recientes indica que la modalidad r¨¢pida ha dejado de ser su claro punto d¨¦bil. No cabe ninguna de que D¨²bov y Nakamura son quienes m¨¢s pueden hacer sufrir a Carlsen.

Pero tampoco de que el emperador noruego es claro favorito al triunfo en la final del circuito que ¨¦l mismo ide¨® para que el ajedrez sea muy popular durante la pandemia. Grischuk lo defini¨® as¨ª: ¡°Magnus juega tan bien que a veces parece que hace trampas¡±.