De Vinicius a Vinicius, un a?o despu¨¦s

Ya hace un a?o de casi todo. Un a?o que en pandemia pesa como una d¨¦cada. De gol de Vinicius Jr. en 1 de marzo a gol de Vini Jr en 1 de marzo. Este lunes se cumpli¨® ese a?o del ¨²ltimo partido del Real Madrid en el Bernab¨¦u, un cl¨¢sico en el que el brasile?o abri¨® el marcador en coproducci¨®n con Gerard Piqu¨¦, que abri¨® el camino a la mala punter¨ªa de Vinicius despu¨¦s de una genialidad de Kro...

Ya hace un a?o de casi todo. Un a?o que en pandemia pesa como una d¨¦cada. De gol de Vinicius Jr. en 1 de marzo a gol de Vini Jr en 1 de marzo. Este lunes se cumpli¨® ese a?o del ¨²ltimo partido del Real Madrid en el Bernab¨¦u, un cl¨¢sico en el que el brasile?o abri¨® el marcador en coproducci¨®n con Gerard Piqu¨¦, que abri¨® el camino a la mala punter¨ªa de Vinicius despu¨¦s de una genialidad de Kroos. Vistas ahora aquellas im¨¢genes, con 80.000 personas rugiendo mientras el brasile?o se se?alaba el escudo, parecen tra¨ªdas de otro mundo. Uno alejado m¨¢s de una d¨¦cada. En este, Vini empez¨® en el banquillo el partido contra la Real Sociedad, despu¨¦s de cinco titularidades, peleado de nuevo con el gol. En su sitio, apareci¨® otra vez Isco, renacido en B¨¦rgamo.

Tambi¨¦n hace un a?o, y un poco m¨¢s, de la ¨²ltima visita de un equipo de David Silva al Real Madrid, en ese Bernab¨¦u que los blancos no han vuelto a pisar, cuatro d¨ªas antes del cl¨¢sico. Aunque aquella noche el canario no abandon¨® el banquillo del Manchester City durante todo el encuentro de ida de los octavos de la Champions. Como tampoco lo hizo Toni Kroos, con el que se cruz¨® a menudo sobre la hierba del Di St¨¦fano.

El alem¨¢n repart¨ªa la pelota de un lado a otro, regulaba el acelerador, escog¨ªa las rutas, y hasta pisaba el ¨¢rea. Mientras el Madrid de Kroos monopolizaba el bal¨®n, Silva aguardaba su momento, y cuando recuperaban se?alaba, m¨¢s desde la distancia, los lugares por los que cre¨ªa que deb¨ªa discurrir la jugada. Pero el bal¨®n no segu¨ªa demasiado a su dedo. La Real parec¨ªa moverse siempre un paso por detr¨¢s de la cabeza del canario, con un navegador distinto. Marcaba el siguiente movimiento, pero sus compa?eros encontraban alguna parada intermedia. Hasta que despu¨¦s de alg¨²n enredo le llegaba a ¨¦l, que de fondo o¨ªa gritar a Alguacil: ¡°?Pausa, David!¡±. Pero David, que no acostumbra precisamente a acelerarse, ya hab¨ªa visto una rendija entre Mendy y Nacho y por ah¨ª lanzaba a Portu. Los avances llegaban de sus fogonazos, iluminaciones de rutas reci¨¦n descubiertas, pasadizos por los que sus compa?eros se encontraban a la espalda de la defensa del Madrid.

Pero en general vivi¨® desabastecido y un tanto incomprendido. Hasta por el ¨¢rbitro. Cuando la Real iba a lanzar una falta cerca del ¨¢rea del Madrid, Silva decidi¨® colocarse un metro por detr¨¢s de la barrera, en una zona desierta. Gil Manzano se alarm¨®: ¡°Est¨¢s en fuera de juego, est¨¢s en fuera de juego. Si es gol, te lo voy a pitar¡±, le advirti¨®. Como si Silva no hubiera oteado los alrededores y se encontrara precisamente donde quer¨ªa estar, salvo por la imprudencia del ¨¢rbitro avisando al rival.

El 0-1 lleg¨® tambi¨¦n a partir de lo que ¨¦l vio antes que nadie. Se instal¨® en el p¨¢ramo que le abri¨® Casemiro cuando Zidane lo coloc¨® entre los dos centrales y desde all¨ª lanz¨® a Monreal a otro espacio vac¨ªo a la izquierda. El centro del lateral lo remat¨® en el otro lado a la escuadra Portu. Courtois explic¨® lo que hab¨ªa sucedido: ¡°La desconexi¨®n viene de que el m¨ªster quiso jugar con tres atr¨¢s y hacer las bandas con Mendy y Lucas¡±. Casemiro volvi¨® a colocarse como tercer central entre Varane y Nacho para que los carrileros pudieran lanzarse m¨¢s al ataque. No funcion¨®: ¡°Al principio no nos encontramos, y hab¨ªa mucho espacio para ellos, y m¨¢s cuando perd¨ªamos la pelota. El gol llega m¨¢s o menos as¨ª. Obviamente, nuestros carrileros estaban ya muy arriba, y creo que Mendy no lleg¨® al centro desde nuestra banda derecha [hasta la izquierda], y Portu mete un golazo¡±, dijo Courtois del 0-1.

Zidane explic¨® tambi¨¦n lo que pretend¨ªa con ese cambio a defensa de tres: ¡°Lo que buscaba es que no estaba contento con nuestra presi¨®n. Estuvimos mejor jugando 4-3-3¡±. El t¨¦cnico franc¨¦s admiti¨® el efecto negativo de la modificaci¨®n, aunque a rega?adientes: ¡°?Si ha perjudicado al equipo? Si t¨² me preguntas y ya son tres veces, s¨ª, puede ser¡±, dijo.

La respuesta fue cambiar a los tres delanteros, como ya hizo Zidane en Valladolid y en B¨¦rgamo. Sin Benzema, nada parece funcionar en la delantera. Quit¨® a Mariano, Asensio e Isco, y meti¨® a Hugo Duro, Vinicius y Rodrygo, que regresaba despu¨¦s de lesionarse los isquios de la pierna derecha el 23 de diciembre contra el Granada. Tambi¨¦n volvi¨® de otra lesi¨®n Valverde, fundamental en el empate con un taconazo a Lucas V¨¢zquez, que puso el bal¨®n al ¨¢rea. El centro le pas¨® a Duro por la espalda, pero all¨ª apareci¨® Vinicius, que como el pasado 1 de marzo marc¨® en coproducci¨®n con un defensa, esta vez Zubeldia. Y que como el pasado 1 de marzo, en otra liberaci¨®n por la tortura que le supone no anotar m¨¢s a menudo, se lanz¨® a besar el escudo.

Se trataba de una noche especial, como explic¨® luego: ¡°Es un orgullo jugar 100 partidos con esta camiseta. He hablado con mi familia hoy, he salido a dar la cara por esta camiseta que queremos tanto¡±, dijo. Alegr¨ªa, ma non troppo: ¡°Salimos tristes por no haber conseguido la victoria que necesitamos¡±. Zidane tambi¨¦n estuvo contenido: ¡°Entr¨® uno, menos mal¡±, dijo. ¡°Contento por su gol, pero hay que seguir. Y ¨¦l es lo que est¨¢ haciendo, trabajando mucho¡±.

Vinicius se qued¨® sin la camiseta de su partido n¨²mero 100, la que bes¨® tras su duod¨¦cimo gol con el Madrid. Al acabar la intercambi¨® con Barrenetxea, que le esperaba en la banda para ped¨ªrsela.