Hay Liga, mucha Liga
Un gol de Acu?a premia al Sevilla y castiga al Atl¨¦tico, un l¨ªder sumido en un momento de indefinici¨®n y que ha perdido su ventaja ante el Barcelona, que puede ponerse a un punto, y el Madrid
Un espl¨¦ndido Sevilla se impuso al Atl¨¦tico para colocar LaLiga en un pa?uelo y, de paso, dejar al l¨ªder en una evidente indefinici¨®n. El gran partido del equipo andaluz se fragu¨® en un primer tiempo espectacular y un segundo en el que supo golpear en el momento adecuado, cuando el Atl¨¦tico igual¨® algo el choque gracias a la intervenci¨®n de Simeone, incapaz, de todas formas, de impedir la derrota de su equipo. El Barcelona, de ganar al Valladolid, se colocar¨ªa a un punto del Atl¨¦tico, que ha dilapidado un colch¨®n que le manten¨ªa como l¨ªder solitario despu¨¦s de una primera vuelta espectacular. El Sevilla cuaj¨® un encuentro soberbio. Descansado tras el par¨®n, sus piezas se movieron con maestr¨ªa, con jugadores como Kound¨¦, Diego Carlos, Fernando, Navas y Jord¨¢n a un nivel alt¨ªsimo. La cuarta plaza parece asegurada para un equipo que pele¨® firme en todos los frentes. En el instante decisivo, adem¨¢s, surgi¨® la figura de Bono, imponente en el alargue para salvar ante Correa.
El Atl¨¦tico realiz¨® un ejercicio de supervivencia ante un gran Sevilla. Tan mal lo vio Simeone que a los 34 minutos cambi¨® el sistema y meti¨® a Correa por Lodi. El t¨¦cnico intent¨® as¨ª recuperar un elemento b¨¢sico para derrotar a un equipo como el Sevilla, el bal¨®n. Con Oblak al rescate, deteniendo un penalti a Ocampos a los ocho minutos por un pisot¨®n de Sa¨²l a Rakitic, el Atl¨¦tico fue un juguete en manos del equipo andaluz durante media hora.
Oblak para un penalti
Lopetegui hab¨ªa preparado con mimo el partido, sorteando con valent¨ªa y clase la presi¨®n adelantada del Atl¨¦tico, utilizando a Suso y Ocampos para buscar las zonas centrales y desarbolar a un adversario confundido, sin bal¨®n y casi sin ox¨ªgeno. Los de Simeone, amarrados a un tosco sistema de tres centrales, con Luis Su¨¢rez convertido en una isla, fueron testigos de lujo de las buenas maniobras de sus rivales.
El Sevilla, amparado en una gran circulaci¨®n de bal¨®n, meti¨® una multitud de centros en el ¨¢rea del Atl¨¦tico. Los de Lopetegui tocaban y tocaban, cambiando con sentido el juego, armados de paciencia y sentido, pero¡ El Sevilla no marcaba, Oblak emergi¨® como un muro en el penalti de Ocampos y muchos de los disparos de los jugadores andaluces no encontraban puerta. El Atl¨¦tico mejor¨® con la entrada de Correa y su alteraci¨®n t¨¢ctica, consciente de que hab¨ªa sido capaz de aguantar un chaparr¨®n considerable. Hasta entonces, el l¨ªder supo sufrir, superado en el juego pero no en el marcador porque el Sevilla fue incapaz de traducir en gol todo lo bueno que generaba en el centro del campo. Lopetegui hab¨ªa apostado por De Jong, goleador con Holanda, en detrimento de En-Nesyri. El Atl¨¦tico, inferior, suspiraba con el empate al descanso despu¨¦s de recibir hasta 12 remates de un Sevilla de alto nivel.
La primera acci¨®n del Atl¨¦tico en la segunda parte desvel¨® el plan de Simeone. Correa se meti¨® entre l¨ªneas con Jord¨¢n fuera de sitio, lo que le permiti¨® un centro al que no lleg¨® por poco Luis Su¨¢rez. El Sevilla sigui¨® jugando bien, pero el partido no se jug¨® de forma tan descarada en un solo sentido. Se movi¨® por cauces de m¨¢s igualdad.
A la hora de partido, Lopetegui meti¨® a En-Nesyri, su jugador m¨¢s determinante en ataque. La bomba se deton¨® a los 70 minutos. Suso dibuj¨® un pase excelente al hueco a la llegada de Navas, que la puso templada para que Acu?a rematara de cabeza y batiera a Oblak. Un gol gestado por los laterales, lo que habla a las claras del dinamismo de este Sevilla. En el inicio de la jugada hubo mano de Ocampos, pero tanto Gil Manzano como el equipo del VAR, capitaneado por Soto Grado, interpretaron que no hab¨ªa tenido incidencia en la creaci¨®n de la jugada, de aut¨¦ntico tiral¨ªneas entre Rakitic, Suso y Navas.
El Atl¨¦tico lo sigui¨® intentando, aunque Simeone quit¨® a Lemar, quiz¨¢s su jugador m¨¢s desequilibrante. El Sevilla, con una evidente superioridad, sigui¨® mostrando una gran capacidad para tener el bal¨®n y burlar la desordenada presi¨®n de los jugadores del Atl¨¦tico, desesperados por alcanzar, al menos, el empate, aunque sin capacidad para generar ocasiones. Hasta que una maniobra espectacular de Luis Su¨¢rez dej¨® solo a Correa en el minuto 91. El argentino remat¨® bien, pero Bono le hizo una parada espectacular para salvar a su equipo. Hay Liga, mucha Liga.
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