Klopp contra el c¨¦sped cultivado en Olot en el que se juega la final de la Champions

Antes de comparecer en la sala de prensa, el entrenador del Liverpool, J¨¹rgen Klopp, se fue a dar un paseo por la hierba del Stade de France por la que correteaban los ¨¢rbitros de la final de esta noche. El alem¨¢n se hab¨ªa enterado de que el c¨¦sped era muy reciente y quer¨ªa probarlo. No le satisfizo, y ante los periodistas mostr¨® su disgusto: ¡°No s¨¦ qui¨¦n pens¨® que ser¨ªa buena noticia traer un nuevo campo¡±, dijo. ¡°Ambos equipos son t¨¦cnicos y no ser¨¢ el mejor c¨¦sped que hemos visto en nuestra vida. Carlo, si le pregunt¨¢is, va a decir lo mismo¡±, adelant¨®. Pero Carlo, cuando se plant¨® ante los p...

Antes de comparecer en la sala de prensa, el entrenador del Liverpool, J¨¹rgen Klopp, se fue a dar un paseo por la hierba del Stade de France por la que correteaban los ¨¢rbitros de la final de esta noche. El alem¨¢n se hab¨ªa enterado de que el c¨¦sped era muy reciente y quer¨ªa probarlo. No le satisfizo, y ante los periodistas mostr¨® su disgusto: ¡°No s¨¦ qui¨¦n pens¨® que ser¨ªa buena noticia traer un nuevo campo¡±, dijo. ¡°Ambos equipos son t¨¦cnicos y no ser¨¢ el mejor c¨¦sped que hemos visto en nuestra vida. Carlo, si le pregunt¨¢is, va a decir lo mismo¡±, adelant¨®. Pero Carlo, cuando se plant¨® ante los periodistas, no dijo nada parecido, sobre todo porque no se hab¨ªa dado un paseo de reconocimiento como el alem¨¢n: ¡°Todav¨ªa no lo hemos probado, no nos hemos entrenado. No creo que vayamos a tener problema¡±, dijo.

La hierba sobre la que se jugar¨¢ esta noche la final de la Champions se plant¨® en noviembre en Olot (Girona), en los terrenos de la empresa Royalverd, que atiende tambi¨¦n a varios equipos de la Liga. Este lunes la arrancaron y la trasladaron a Par¨ªs en 500 rollos, que instalaron en el estadio entre el martes y el mi¨¦rcoles. El cambio fue necesario porque el s¨¢bado pasado, una semana antes de la final, el Stade de France bati¨® su marca de asistencia, con 97.000 espectadores en el concierto de Indochine, una banda parisina de nueva ola creada en 1981, el grupo franc¨¦s que m¨¢s discos ha vendido en la historia. Despu¨¦s del concierto que abr¨ªa la gira por el 40 aniversario del grupo, el c¨¦sped no resultaba apto para la final, as¨ª que Royalverd estaba en alerta.

Pese a los reparos de J¨¹rgen Klopp, el director t¨¦cnico de la empresa que cultiv¨® la hierba en Catalu?a, Eduard Rovira, asegura que el campo no tiene ning¨²n problema: ¡°Es un c¨¦sped que cumple con todos los valores biomec¨¢nicos que aseguran un campo totalmente jugable y seguro para el jugador¡±, dice. Y explica la desconfianza del t¨¦cnico alem¨¢n: ¡°Lo que s¨ª es cierto que visualmente seguramente no ser¨¢ perfecto, porque a¨²n se pueden apreciar las juntas o los diferentes colores del c¨¦sped¡±, explica.

Klopp ya se quej¨® el a?o pasado antes de jugar el partido de ida de los cuartos de final contra el Real Madrid en el Alfredo di St¨¦fano: ¡°Es cierto que estamos jugando en estadios vac¨ªos desde hace un tiempo, pero esto es algo completamente diferente¡±, comenz¨® en una entrevista realizada sobre el c¨¦sped de Valdebebas, que es exacto al del Bernab¨¦u. ¡°Es un campo de entrenamiento¡±, lament¨®. ¡°Es como si visit¨¢ramos al United y jug¨¢ramos en su campo de entrenamiento¡±. El partido termin¨® 3-1 para el Real Madrid.

Este viernes, despu¨¦s de los primeros dardos sobre la hierba catalana reci¨¦n extendida en el Stade de France, y despu¨¦s de recordar que en la final que perdieron en Kiev contra el Madrid su portero estaba conmocionado y sufrieron otras ¡°circunstancias¡±, Klopp quiso rebajar el lamento bot¨¢nico con cierta iron¨ªa: ¡°Cuando se dice que el c¨¦sped es nuevo, es buena noticia para los dos¡±, dijo. ¡°El impacto ser¨¢ el mismo para los dos¡±, insisti¨® en varias ocasiones. Y luego trat¨® casi de que se olvidara: ¡°No quiero que nadie publique historias de que estoy preocupado por el estado del c¨¦sped porque eso no es una noticia¡±, dijo antes de levantarse, subir las escaleras de la sala, ganar la puerta, y salir al c¨¦sped de Olot a completar con sus futbolistas el ¨²ltimo entrenamiento antes de la final, una sesi¨®n que comenz¨® con un derroche de risas y juegos en los que el castigo era un pasillo de collejas para los derrotados.

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