?xtasis de DeChambeau y tragedia de Rory McIlroy en el US Open
El estadounidense, jugador de la Liga saud¨ª, conquista su segundo grande despu¨¦s de que el norirland¨¦s firmara tres ¡®bogeys¡¯ en los cuatro ¨²ltimos hoyos
El ¨¦xtasis de Bryson DeChambeau fue la tragedia de Rory McIlroy. El estadounidense conquist¨® este domingo su segundo grande, su segundo US Open tras la victoria de 2020, en un final de infarto en el trazado de Pinehurst, en Carolina del Norte. DeChambeau se coron¨® con -6 en el ¨²ltimo hoyo despu¨¦s del hundimiento del rival con el que midi¨® sus fuerzas durante una cuarta jornada apasionante. El norirland¨¦s (-5) dej¨® escapar la gloria cuando acariciaba el trofeo con las manos y era l¨ªder de la clasificaci¨®n a falta de las brazadas finales. A las puertas de la redenci¨®n, McIlroy firm¨® tres bogeys en los cuatro ¨²ltimos hoyos (15, 16 y 18) fallando un par de putts muy cortos, de apenas metro y medio, y no solo vio desaparecer la opci¨®n de besar la copa, sino tambi¨¦n de cerrar una sequ¨ªa en los grandes que dura ya 10 a?os.
El grito de DeChambeau fue tambi¨¦n el festejo de LIV, la Liga saud¨ª que tiene en el norteamericano a uno de sus mejores cromos, seguramente quien mejor se ha desempe?ado en los grandes desde que el golf se partiera en dos. Es el segundo bingo de un hombre de LIV en una parada del Grand Slam, despu¨¦s del ¨¦xito de Brooks Koepka en el Campeonato de la PGA del a?o pasado. En tiempos todav¨ªa de guerra civil, cualquier batalla ganada es buena, y m¨¢s cuando el derrotado es alguien del simbolismo de McIlroy, una de las banderas m¨¢s potentes del circuito americano. Hace ahora un a?o que ambas partes anunciaron un acuerdo de paz para enterrar las armas, pero han pasado los meses y nada se firma, las estrellas siguen divididas en dos bandos y cada grande es el escenario de una lucha de poder.
Fue una preciosa contienda ante McIlroy, llena de cambios de direcci¨®n. DeChambeau parti¨® el domingo con tres golpes de renta, el norirland¨¦s remont¨®, el estadounidense reaccion¨®, y llegaron esos ¨²ltimos fallos producto de la tensi¨®n por lo que hab¨ªa en juego. Hubo una gran dosis de drama en esos putts perdidos por McIlroy cuando parec¨ªa que solo quedaba empujarla. DeChambeau hab¨ªa aterrizado debajo de un ¨¢rbol en el hoyo 18 cuando Rory acab¨® por hundirse. De esa trampa surgi¨® como pudo hasta un b¨²nker y ah¨ª conect¨® un gran golpe para atar el par y su segundo US Open con 30 a?os. De premio, el cheque m¨¢s alto en la historia de los grandes: 4,3 millones de d¨®lares.
El cielo deber¨¢ esperar para McIlroy. Nunca ha dejado ser un gran jugador y un l¨ªder carism¨¢tico, pero a los 35 a?os su quinto grande sigue sin llegar. Se coron¨® en el US Open en 2011, en el Campeonato de la PGA en 2012, y de nuevo en el PGA y el Open Brit¨¢nico en 2014. Desde entonces, el norirland¨¦s suma 21 clasificaciones entre los 10 mejores de un grande, siete de ellas comprimidas en 2022 y 2023, cuando m¨¢s cerca, hasta ahora, hab¨ªa estado de reverdecer laureles. Este curso fue 22? en el Masters de Augusta (el ¨²nico grande que le falta), 12? en el PGA y segundo en este US Open. Patrick Cantlay y Toni Finau fueron terceros con -4.
Sergio Garc¨ªa finaliz¨® 12? con +1, su mejor clasificaci¨®n en un grande desde que en 2017 conquistara la chaqueta verde del Masters de Augusta. Desde entonces hab¨ªa fallado el corte en 15 citas del Grand Slam, sin victorias tampoco en la Liga saud¨ª aunque las hayas rozado en varios desempates. El castellonense se ha convertido en el primer golfista europeo que pasa el corte en 20 ediciones del US Open. Un prodigio de regularidad.
David Puig vivi¨® su peor d¨ªa de la semana con +8 en la ronda para +11 en la general, aunque con la misi¨®n cumplida de haber pasado el corte y por lo tanto haberse clasificado para los Juegos Ol¨ªmpicos de Par¨ªs superando en la carrera a Jorge Campillo.
En la cola se despidi¨® el n¨²mero uno del mundo, Scottie Scheffler, irreconocible en este US Open en el que nunca mostr¨® la versi¨®n arrolladora que ha exhibido en este arranque de temporada, con victoria incluida en el Masters de Augusta. El estadounidense firm¨® cuatro rondas por encima del par (71, 74, 71 y 72 golpes en el par 70 de Pinehurst) para marcharse de vuelta a casa con +8. Y este domingo, como el viernes en la segunda ronda, ni un solo birdie en la tarjeta.
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