N¨²ria Cast¨¢n regresa al Freeride World Tour tras la conmoci¨®n cerebral y es tercera en los Alpes
La especialista de ¡®snowboard¡¯ catalana hab¨ªa hecho p¨²blicas sus reflexiones y sus dudas sobre la posibilidad de dejar de competir
?El miedo? Derrotado. ?Las dudas? En un lugar olvidado del cerebro. ?La determinaci¨®n? B¨¢rbara.
Doce d¨ªas despu¨¦s de sufrir una dura ca¨ªda en la prueba freeride de Baqueira, N¨²ria Cast¨¢n vuelve a engancharse a la tabla y contempla sin v¨¦rtigo la ladera vertical y nevada, los 500 metros de nieve blanda, profunda, y toda la noche hab¨ªa nevado, y rocas, del lago negro de Val Thorens, en los Alpes de la Saboya francesa. Tres grados bajo cero en las alturas, 2.500 metros. Se lanza y baja espl¨¦ndida, cabra mont¨¦s que desprecia la ley de la gravedad, ligera, l¨ªnea propia entre las roderas profundas que han dejado minutos antes los esquiadores, fluida, t¨¦cnica y osada en sus saltos. Consigue una magn¨ªfica puntuaci¨®n (83 puntos) que solo fue superada por dos francesas, la reina Marion Haerty, de 33 a?os, la invencible cu¨¢druple campeona del mundo, aquella que todas querr¨ªan ser, y hace una bajada perfecta (95 puntos), y la jovencita que llega No¨¦mi Equy, de 24 a?os (88,33), que ya gan¨® en La Vall d¡¯Ar¨¢n, Pirineos, la primera prueba, y en Val Thorens est¨¢ en su casa. ¡°Me dej¨¦ un salto al final, que me habr¨ªa acercado a ellas¡±, explica despu¨¦s la corredora catalana, de 27 a?os, la ¨²nica espa?ola en el exclusivo circuito mundial de freeride.
Es la segunda prueba del circuito mundial y ella est¨¢ all¨ª, decidida y convencida tras unos d¨ªas de introspecci¨®n y autoan¨¢lisis publicados en su Instagram en forma de lista ¡ªcaligraf¨ªa clara¡ª de a favor y en contra, tal como Robinson Crusoe en la isla desierta, ?qu¨¦ es lo que quiero?, ?qu¨¦ es lo que temo?, y un encabezamiento en el frontispicio: ¡°Lo importante es que sea yo quien decida mi vida. Es mi historia, no la de otros¡±.
Las dos ca¨ªdas sufridas en la Bamba de Vielha el 17 de enero no le rompieron ning¨²n hueso, pero s¨ª le causaron una fuerte conmoci¨®n cerebral y, tambi¨¦n, la necesidad de mirar dentro de s¨ª otra vez, de metabolizar mentalmente lo ocurrido, como hace casi dos a?os, cuando sobrevivi¨® a un alud, y volvi¨®. ¡°Quiero hacer lo que me haga sentir bien ah¨ª, recuperarme de la confusi¨®n y culpa, escuchar mi cuerpo y mi coraz¨®n¡±, escribe Cast¨¢n, tambi¨¦n dise?adora gr¨¢fica en Innsbruck. ¡°Lo que siento ahora (miedo). Me voy a sentir muy est¨²pida si decido seguir compitiendo y me vuelvo a caer. No controlamos el ¨¦xito de nuestras decisiones pero s¨ª la toma de decisi¨®n¡±.
Su experimento introspectivo se convirti¨® en las redes en un experimento de extrospecci¨®n. Seguidores y amigos observaron desde fuera su vida y opinaron, la apoyaron, le mostraron su admiraci¨®n. Inclinaron la balanza. El domingo pasado, Cast¨¢n anunci¨® que competir¨ªa en Val Thorens. Solo deb¨ªa superar otro obst¨¢culo. El protocolo postconmoci¨®n recomendaba que permaneciera 21 d¨ªas sin competir para asegurar la recuperaci¨®n del cerebro antes de recibir otro impacto. Cast¨¢n comunic¨® a un m¨¦dico la evoluci¨®n de sus s¨ªntomas y este le expidi¨® un certificado que le permit¨ªa hacer actividad f¨ªsica y competir, aunque solo hubieran pasado 12 d¨ªas desde los golpes. Termina tercera ¡ª¡°un gran hecho, ahora, a seguir escalando¡±, dice despu¨¦s, y ya es cuarta en el r¨¢nking del World Tour¡ª y proclama sonriente, casi riendo, m¨¢s fuerte siempre: ¡°Me alegro de haber decidido volver a competir¡±.