Llull conduce al Madrid a la victoria en el Wizink contra el Olimpia Mil¨¢n

A Sergio Llull le encanta apagar fuegos, aunque parezca que en el Wizink enter no se pueden producir porque fuera jarrea. Pero s¨ª se encienden, alimentados por el ardor guerrero del Mil¨¢n de Ettore Messina, especialista en prender chispas con su defensa intensa, que llevan al Real Madrid a cometer errores y a perder balones como si no hubiera un ma?ana, incluso a desesperarse haciendo faltas en ataque que noquean a Tavares, cargado enseguida de personales, o a protestar y comerse una t¨¦cnica, como le pasa a Poirier. Los brazos de Mirotic son inabarcables, y con esa envergadura y el apoyo de lo...

A Sergio Llull le encanta apagar fuegos, aunque parezca que en el Wizink enter no se pueden producir porque fuera jarrea. Pero s¨ª se encienden, alimentados por el ardor guerrero del Mil¨¢n de Ettore Messina, especialista en prender chispas con su defensa intensa, que llevan al Real Madrid a cometer errores y a perder balones como si no hubiera un ma?ana, incluso a desesperarse haciendo faltas en ataque que noquean a Tavares, cargado enseguida de personales, o a protestar y comerse una t¨¦cnica, como le pasa a Poirier. Los brazos de Mirotic son inabarcables, y con esa envergadura y el apoyo de los suyos, les basta para dome?ar en la primera parte al equipo de Chus Mateo.

Pero Llull no puede evitar sacar su car¨¢cter de apagafuegos, y este jueves le bast¨® con un chispazo de genio en el ¨²ltimo instante de la primera parte para anotar un triple en carrera, con resbal¨®n incluido, y plantarse frente a la grada de fondo, con los brazos abiertos diciendo que all¨ª est¨¢ ¨¦l, con el extintor, para empatar el partido (42-42) y cambiar la tendencia negativa de manera casi definitiva, porque despu¨¦s del triple de Llull, y aunque quedaban todav¨ªa 20 minutos, todo fue a mejor. Ya nada fue igual.

Surgi¨® el Real Madrid alegre en ataque, que impuso su demoledor juego que pocos equipos pueden parar. Salieron como b¨²falos los blancos tras el descanso con el objetivo de disipar cualquier duda que se hubiera podido generar en la primera parte. Sin que Causeur tuviera que jugar ni un minuto y Tavares apenas apareciera en los dos ¨²ltimos cuartos, ¨Cacab¨® con 8 puntos en 11 minutos¨C, Sergio Rodr¨ªguez, Deck y Campazzo le dieron diversidad al juego de ataque, mientras a Hezonja no se le mov¨ªa un pelo del tup¨¦ mientras firmaba un partido completo.

Despu¨¦s del parcial de 13-2, el Mil¨¢n casi tir¨® la toalla. Solo Shields y Mirotic, abucheado en cada acci¨®n y con el ojo a la virul¨¦ despu¨¦s de un golpe, mantuvieron el tipo mientras Poirier encadenaba un aleup tras otro con las asistencias de Chacho Rodr¨ªguez. Llull se march¨® feliz al banco con 19 puntos y 5 triples, y su equipo acab¨® disfrutando ante un Milan deprimido (88-71).

Mientras, el Baskonia sufri¨® su segunda derrota consecutiva en el Buesa Arena, esta vez frente al Zalgiris, que domin¨® todo el partido, y aguant¨® el arre¨®n final de los vitorianos, que intentaron acercarse para claudicar al final (82-99). Ni los puntos de Markus Howard (24), ni el liderazgo de Chima Moneke pudieron en ning¨²n momento con el juego din¨¢mico del Zalgiris que, adem¨¢s, estuvo muy acertado en el tiro exterior, con catorce triples (67%). Entre Manek y Dovydas Giedraitis apuntalaron el triunfo lituano, merecido de principio a fin.

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