C¨®mo convertir un viejo futbol¨ªn en un negocio

Todos aquellos que recordamos con felicidad nuestra infancia sufrimos a menudo alg¨²n ataque de nostalgia. Pienso en las tardes que me pasaba dibujando en un papel a mis jugadores favoritos. Luego los colocaba en una mesa y recreaba partidos imaginarios. Tambi¨¦n me vienen a la memoria jornadas interminables en el garaje de mi casa con mi hermano y mis amigos jugando con un futbol¨ªn de los buenos, de los de madera. Hace un par de a?os, cumplidos los 36, un pensamiento me golpe¨® de repente: rescatar esa magia del f¨²tbol de antes.

Se me ocurri¨® la idea de recuperar esos mu?ecos de futbol¨ªn para venderlos individualmente como regalos. Habl¨¦ con carpinteros, con gente que lleva mucho tiempo fabricando futbolines, pas¨¦ horas indagando e inform¨¢ndome, reclut¨¦ a V¨ªctor, uno de mis grandes amigos de toda la vida y decid¨ª abrir el taller y la tienda f¨ªsica en Las Rozas de The Pichichi Company. Fue poco antes de la pandemia. Dej¨¦ el marketing y la publicidad para meterme de lleno en el nuevo proyecto. Aunque fue un momento un poco dif¨ªcil, yo sab¨ªa que no iba a parar y por ahora estoy muy contento.

Nos hacen pedidos aficionados de todos los equipos de LaLiga Santander y de LaLiga SmartBank. Los que m¨¢s, los del Atl¨¦tico de Madrid. Tambi¨¦n triunfan los mu?ecos personalizados: nos piden que les pintemos la camiseta de equipos de barrio o les caractericemos con leyendas del f¨²tbol como Maradona... Nuestros clientes me transmiten mucha ilusi¨®n por lo que hacemos y le dan mucho valor a que todos los mu?ecos est¨¦n pintados a mano. De la misma forma que yo me reencontr¨¦ con mis recuerdos m¨¢s preciados, al embarcarme en esta maravillosa aventura, supongo que los viejos futbolines representan mucho para una generaci¨®n de nost¨¢lgicos como yo.