?A qui¨¦n quieres m¨¢s, a mam¨¢ atl¨¦tica o a pap¨¢ madridista?

En mi familia ocurre algo curioso. Mi mujer, Mar¨ªa, es simpatizante del Atl¨¦tico de Madrid y yo, del Real Madrid. Nuestra hija mayor, que tambi¨¦n se llama Mar¨ªa, ha seguido mis pasos y a sus 12 a?os siente la pasi¨®n madridista que le he inculcado. Pero el que nos sorprende a todos es Marcos, el peque?o, que con 10 a?os se ha hecho hincha del Real Valladolid CF. Siendo un mico, es del Pucela a rabiar. Se sabe todos los jugadores que han pasado por la plantilla en los ¨²ltimos a?os, est¨¢ al tanto de todos los fichajes y no se pierde su cita, cada dos semanas, en el estadio Zorrilla. No falta a ning¨²n partido en casa. Vivimos en Medina del Campo, a media hora en coche de la ciudad, por lo que puede que de ah¨ª nazca la afici¨®n de Marcos por el Pucela. Aunque creo que empez¨® a decir que era del Valladolid para no llevarnos la contraria ni a su madre ni a m¨ª.

Como Marcos se pasaba el d¨ªa preguntando por el Valladolid, nos hicimos socios del club hace cinco a?os. Llegu¨¦ a un trato con mi mujer: ¨¦l ir¨ªa conmigo, que soy m¨¢s futbolero que ella y me encantan el ambiente de un estadio. Al llevarle cada dos semanas a Zorrilla, su pasi¨®n fue creciendo cada vez m¨¢s. Ahora es un incondicional pucelano que se sabe todos los c¨¢nticos. Reconozco que a m¨ª tambi¨¦n me ha contagiado su pasi¨®n y empatizo mucho m¨¢s con los blanquivioletas. Por ejemplo, nunca pens¨¦ que me pudiera sentir mal por un gol del Real Madrid al Valladolid. Pues bien, en el ¨²ltimo partido, a finales de enero, los blancos ganaron por 0 a 2 en Pucela. Al ver la cara de decepci¨®n con la que sali¨® Marcos del estadio, confieso que tambi¨¦n me sent¨ª un poco triste.

Ahora trato de hacer todo lo posible para que mi hijo disfrute de su pasi¨®n. Le hice un p¨®ster con un mont¨®n de fotos que tiene con jugadores del Valladolid para su cuarto. Jordi Masip, ?scar Plano, Roque Mesa¡­ Es lo primero que mi hijo ve por las ma?anas al levantarse. Para m¨ª fue pan comido, ya que dirijo una empresa de decoraci¨®n y no me result¨® dif¨ªcil.

De lo que m¨¢s orgulloso me siento es de una camiseta que le consegu¨ª firmada por toda la plantilla vallisoletana. La historia es curiosa: por motivos de trabajo conozco al exfutbolista del Valladolid, Real Madrid y Atl¨¦tico ¡ªcasualmente¡ª, los tres equipos de mi familia- Jos¨¦ Antonio Garc¨ªa-Calvo. Poca gente lo sabe, pero Jos¨¦, como yo le llamo, tiene una banda tributo a H¨¦roes del Silencio, La influencia de Baco, como el dios romano del vino, porque es muy fan del grupo de Enrique Bunbury. Yo tambi¨¦n, y he ido a ver tocar a Jos¨¦ muchas veces. Es maj¨ªsimo, y en cuanto se enter¨® de que mi hijo es del Pucela, r¨¢pidamente se movi¨® para conseguir la camiseta. Creo que no hay ninguna prenda que le haya hecho m¨¢s ilusi¨®n a Marcos.