Y en enero llega la Copa de ?frica

El pasado lunes tuve la ocurrencia de ver el partido Ucrania-Italia que decid¨ªa la clasificaci¨®n del grupo C para una de las selecciones contendientes. Supongo que me guio el inter¨¦s por el f¨²tbol, la posibilidad de ver a Italia, actual campeona de la Eurocopa, puesta en el l¨ªmite competitivo, disfrutar de una Ucrania transvasada a Leverkusen, pero Ucrania y en la que algunos jugadores como Mudryk, Dovbyk o Tsygankov nos la han puesto en el escaparate de la actualidad. La transmisi¨®n era en UEFA TV y la narraci¨®n como aquellas de los a?os 90. Al cabo de unos minutos descubr¨ª que el aut¨¦ntico motivo de mi curiosidad no era otro que poder ver un excelente partido desde el punto de vista competitivo, sin tener que realizar an¨¢lisis de tipos de juego y esas cosas, disfrutar de la tensi¨®n de lo que all¨ª se estaba jugando y seguir el partido con la tranquilidad de saber que ganara uno u otro iba a seguir durmiendo con la misma tranquilidad. F¨ªjense que llegu¨¦ a analizar sin pasi¨®n esa juzgada dudosa del final de partido y ah¨ª descubr¨ª que el ¨¢rbitro era Gil Manzano. Y a m¨ª tambi¨¦n me pareci¨® que no era penalti, pero tampoco se crean que mir¨¦ las distintas repeticiones con el inter¨¦s de encontrarlo. Y como al comentarista le era todo igual, mi Ucrania- Italia acab¨® sin disputas y solo con la alegr¨ªa, y cierta descarga de presi¨®n, de los jugadores italianos.

Porque est¨¢ claro que cuando no hay nada en juego en el partido que est¨¢s viendo se crea un excelente escenario para seguir el juego, divertirse con las acciones positivas y ser muy comprensivo con los errores. Esa distancia le da ecuanimidad, pero tambi¨¦n le quita emoci¨®n e igual es por eso que solemos acabar tomando partido por uno de los contendientes, aunque no nos vaya nada en el encuentro ni conozcamos mucho de los contendientes.

Eso es justo al rev¨¦s cuando tenemos en juego a los nuestros, lleven los colores que lleven, y todo lo que pase en el terreno de juego nos lo tomemos como algo personal. Por ejemplo, esas lesiones que se dan en este periodo de selecciones nacionales y que inmediatamente transvasamos a la competici¨®n local y a c¨®mo le afecta a mi equipo o debilita a mi rival m¨¢s directo. El caso de la lesi¨®n de Camavinga y la posterior y m¨¢s grave de Gavi, aunque se nos ha olvidado la de Yeremi Pino porque como era entrenando con su club parece menos interesante y no suma para lo que tienen en com¨²n las dos anteriores y que ha hecho que todo el mundo se haya girado hacia el calendario global del f¨²tbol y haya coincidido que est¨¢ saturado y que habr¨ªa que hacer algo con ¨¦l. Lo que nadie dice es por d¨®nde hay que cortar ese marat¨®n futbol¨ªstico porque quien m¨¢s quien menos tiene intereses en alg¨²n punto de esa cuerda eterna; as¨ª que todos miramos a otro lado para liberar nuestras conciencias y que este viernes vuelva el espect¨¢culo en las Ligas nacionales, y la semana que viene en la competici¨®n europea, esa que tanto dinero aporta, y cuando nos acerquemos a junio empezaremos a olisquear la Eurocopa con perfume de ser magn¨ªfica (y Yeremi y Gavi est¨¦n en el gimnasio acabando su recuperaci¨®n, pero ya no sean actualidad).

Y que, sobre todo, la pelota siga rodando. Porque lo que no solemos hacer los actores del f¨²tbol, es decir, por d¨®nde cortar¨ªamos nosotros de nuestra parte para que todo se equilibre y sea mejor y a que estamos dispuestos a renunciar, casi siempre suele ser dinero, para que todo adquiera la racionalidad que demandamos. Si miramos a esos deportes americanos hiperprofesionalizados veremos que sus calendarios est¨¢n superapretados, pero que los tiempos de descanso y de preparaci¨®n para la competici¨®n son largos y permiten combinar la playa con la recuperaci¨®n de las lesiones que se arrastran en la temporada.

Porque ya les voy avisando, esto lo aprend¨ª en mi paso por el Olympique de Marsella, que en enero llega la CAN, Copa Africana de Naciones, la Euro de ?frica, que ocupar¨¢ a los jugadores convocados por sus selecciones todo enero y hasta mediados de febrero los que lleguen a los ¨²ltimos escalones de la competici¨®n. Y est¨¢ en el calendario FIFA y puede que algunos descubran que alguno de sus mejores jugadores se van como si la competici¨®n hubiera ca¨ªdo ayer del cielo.

Puedes seguir a EL PA?S Deportes en Facebook y X, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal.