Onana mete al Manchester United en el horno

Hace a?os, en la prodigiosa primavera de 2019, Erik ten Hag, Andr¨¦ Onana y Hakim Ziyech coincidieron en el Ajax para maravilla de los aficionados al buen f¨²tbol. Aquel equipo alcanz¨® las semifinales de la Champions como un soplo de aire fresco. Desde que se separaron el Ajax se hundi¨® en su crisis m¨¢s grave desde la Segunda Guerra Mundial sin que ninguno de los integrantes migratorios de la saga, que tambi¨¦n...

Hace a?os, en la prodigiosa primavera de 2019, Erik ten Hag, Andr¨¦ Onana y Hakim Ziyech coincidieron en el Ajax para maravilla de los aficionados al buen f¨²tbol. Aquel equipo alcanz¨® las semifinales de la Champions como un soplo de aire fresco. Desde que se separaron el Ajax se hundi¨® en su crisis m¨¢s grave desde la Segunda Guerra Mundial sin que ninguno de los integrantes migratorios de la saga, que tambi¨¦n incluy¨® a Frenkie de Jong y Matt de Ligt, encontraran su lugar en el mundo. Sus vidas se convirtieron en cap¨ªtulos de desventuras deportivas dispersas por Europa.

Este mi¨¦rcoles en Estambul la Champions volvi¨® a reunir a Ten Hag, ahora el entrenador del United, a Onana, nuevo portero del equipo ingl¨¦s, y a Ziyech, que juega cedido por el Chelsea en el Galatasaray despu¨¦s de que Ten Hag intentara sin ¨¦xito convencer a los due?os del club de que lo fichen. El encuentro tuvo consecuencias l¨²gubres. Especialmente para Onana, que midi¨® mal las distancias y las trayectorias de los dos lanzamientos de tiro libre que Ziyech le col¨® a lo largo del partido. El United comenz¨® adelant¨¢ndose 0-2 y acab¨® empatando 3-3. El resultado le coloca en el fondo del Grupo A, obligado a ganarle al Bayern en la ¨²ltima jornada para no perder toda esperanza de clasificaci¨®n, y a cargo de una estad¨ªstica pesada. El United, que comenz¨® este siglo como el club m¨¢s rico del planeta, nunca hab¨ªa encajado 33 goles a estas alturas de la temporada desde 1963.

Los hermanos Glazer, los petroleros americanos, propietarios del United, trazaron el plan m¨¢s ambicioso de Europa el a?o pasado. Se propusieron gastar un m¨ªnimo de 500 millones de euros en fichar a Araujo, Kim Min-Jae, Kvaratskhelia, Frenkie de Jong y Harry Kane. Pero ninguno de los jugadores quiso aceptar las ofertas que les propusieron. Desconfiaron, por una raz¨®n u otra, de un club que acumula una d¨¦cada de pronunciada decadencia deportiva e institucional. Puestos a buscar alternativas, los Glazer prefirieron ahorrarse el dinero antes que fichar a jugadores de rendimiento incierto. Ahora el United languidece. Su partido en Estambul, celebrado al cabo de una jornada de fuertes lluvias, reflej¨® las miserias que afligen al club. Onana, reclamo de Ten Hag el verano pasado, fue v¨ªctima de la incertidumbre que le rodea. Qued¨® gravemente se?alado.

Ten Hag despidi¨® a David de Gea con el argumento primordial de que el espa?ol no era fiable para dirigir la salida del bal¨®n con los pies. Onana, el portero que hab¨ªa acompa?ado al Inter hasta la final de la Champions, un tipo diestro en los desplazamientos largos, era el elegido. El aterrizaje de Onana en la Premier result¨® accidentado. En su descargo, el camerun¨¦s podr¨¢ alegar que le cambiaron la pista. Con una defensa en construcci¨®n, el United complet¨® el comienzo de temporada m¨¢s pobre de su historia: nueve puntos en los primeros siete partidos. En Estambul, este mi¨¦rcoles, la zaga la compusieron los cuatro jugadores que aparecen en las fotos de las noches m¨¢s calamitosas del United en los ¨²ltimos a?os: Wan-Bissaka, Maguire, Lindelof y Shaw. Las lesiones de Varane y Lisandro no permitieron m¨¢s alternativas. Para desgracia de Onana.

Ten Hag: ¡°Tendremos ¨¦xito a largo plazo¡±

El United y el Galatasaray se enzarzaron en un intercambio sin due?o. De transiciones desordenadas. De control quim¨¦rico. Los equipos fatigaron para encadenar simples series de pases. La falta de sinton¨ªa, ambici¨®n, solidaridad, entusiasmo y buen juicio marc¨® las acciones del conjunto ingl¨¦s durante gran parte de la noche. Aflor¨® la peor versi¨®n de cada uno. Antony fue una sombra; Garnacho, que hizo el 0-1 despu¨¦s de la mejor jugada de su equipo, mereci¨® la sustituci¨®n anticipada; el fino Bruno Fernandes, que clav¨® el 0-2, perdi¨® balones como si tuviera pies de plomo; McTomminay, que hizo el 1-3, se mostr¨® tan poco l¨²cido como de costumbre en las labores de gesti¨®n. Amrabat fue el m¨¢s sereno en el reino de la precipitaci¨®n. La ansiedad carcome al United. En Estambul el equipo se descompuso cuando obtuvo la ventaja y se abandon¨® cuando la perdi¨®.

¡°Debimos cerrar el partido con el 1-3 pero cometimos errores¡­¡±, dijo Ten Hag tras el partido. ¡°Yo soy el primer responsable. Estamos haciendo mejoras y eso me da esperanzas. Creo que tendremos ¨¦xito a largo plazo¡±.

Ziyech, con dos faltas y una asistencia para el brutal gol de Akt¨¹rkoglu, que control¨® con el exterior y apunt¨® al primer palo metiendo el juanete en la c¨¢mara del bal¨®n, levantaron el partido para el Galatasaray. El equipo turco, que no se clasifica para octavos desde 2013, ahora es segundo del Grupo A con 5 puntos, por debajo del Bayern (12 puntos) y por encima del Copenhague y el United, ambos con cuatro. Si el United pretende clasificarse para la siguiente fase deber¨¢ imponerse al Bayern en Old Trafford dentro de dos semanas.

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