Kylian busca su sitio
Mbapp¨¦, hoy, es uno de esos jugadores en los que conf¨ªan m¨¢s sus rivales, volvi¨¦ndose locos para marcarle, que parte de su afici¨®n; m¨¢s temido por los otros que querido por los suyos
Es curiosa la divisi¨®n de opiniones que se percibe en el madridismo sobre Kylian Mbapp¨¦, m¨¢s all¨¢ de la minor¨ªa que todav¨ªa se hace mala sangre por el desplante del franc¨¦s al Madrid en 2022 (esa minor¨ªa, que ser¨¢ cada vez m¨¢s exigua seg¨²n Mbapp¨¦ decida partidos, merece un peque?o an¨¢lisis: es la minor¨ªa que antepone unos principios morales muy r¨ªgidos a la pasi¨®n por los colores; no pertenezco a esa minor¨ªa ni la envidio, pero la respeto pro...
Es curiosa la divisi¨®n de opiniones que se percibe en el madridismo sobre Kylian Mbapp¨¦, m¨¢s all¨¢ de la minor¨ªa que todav¨ªa se hace mala sangre por el desplante del franc¨¦s al Madrid en 2022 (esa minor¨ªa, que ser¨¢ cada vez m¨¢s exigua seg¨²n Mbapp¨¦ decida partidos, merece un peque?o an¨¢lisis: es la minor¨ªa que antepone unos principios morales muy r¨ªgidos a la pasi¨®n por los colores; no pertenezco a esa minor¨ªa ni la envidio, pero la respeto profundamente, si bien creo que al tomar decisiones ¨¦ticas o morales en f¨²tbol, como en la guerra, corremos el riesgo de quedarnos sin ¨ªdolos).
Los n¨²meros dicen que Mbapp¨¦ lleva cuatro goles en seis partidos de Liga (tres de penalti), uno en un partido de Champions y uno en la final de la Supercopa de Europa. Pero dada la consideraci¨®n excepcional de Mbapp¨¦, los n¨²meros no llegan: se le reclama impacto en el juego, desatascar partidos, jugadas extraordinarias para alimentar las redes. De estas ¨²ltimas ha dejado varias sueltas, quiz¨¢ la m¨¢s descriptiva en Anoeta: se desembaraz¨® de un rival con una bicicleta y en dos zancadas se present¨® casi delante del portero, que ataj¨® un disparo gris. Tambi¨¦n es una jugada descriptiva de su inicio de temporada: Mbapp¨¦ remata mucho, y remata mal o flojo o centrado, pero remata. Es un delantero con una capacidad de desmarque extraordinaria, un fabricante de espacios con un f¨ªsico prodigioso que poco a poco ha ido engras¨¢ndose con sus compa?eros hasta inventar, como este s¨¢bado en el Bernab¨¦u, ocasiones de valor. M¨¢s all¨¢ de eso, esta jornada dio una asistencia de gol a Vinicius y dej¨® solo a Endrick frente al portero con un movimiento extraordinario. De espaldas a su marcador, en el primer tiempo (es decir, con el Espanyol marcando ferr¨¦amente al Madrid y encerrado en su campo), hizo un par de rupturas impresionantes que lo dejaron solo.
Amigos madridistas, que sospecho conectan con buena parte de la hinchada, insisten en que no: que est¨¢ desconectado, que no tiene punter¨ªa y le est¨¢n salvando los penaltis, que no defiende. A m¨ª dudar de Mbapp¨¦ me da pereza: me parece un drama. Mbapp¨¦ es un bot¨®n rojo fascinante que tiene el Madrid parpadeando todo el partido y que a veces se tiene a bien pulsar. Baja a descargar, fija centrales, se descuelga en banda y se desembaraza con facilidad, sin bal¨®n, de sus defensas (en el gol contra el Stuttgart su marca ni compite: lo ve arrancar y lo deja ir solo). A veces parece retirarse de los partidos para sacarse de encima, en realidad, la mirada obsesiva de la defensa contraria; otras veces ¡ªlos primeros partidos sobre todo¡ª simplemente parece jugar atacado por la necesidad, algo que no se ha sacado de encima todav¨ªa si uno repara en sus remates ansiosos. De ah¨ª que no hubiese concesiones a Endrick ni a nadie en el penalti: la bestia reclama comida para dejar de tener hambre y poder saciarse a gusto.
Su adaptaci¨®n, tan distinta a la de Bellingham y tan parecida a la de Zidane, puede parecer exactamente eso: n¨²meros de momento. Pero con el tiempo su despliegue se har¨¢ m¨¢s asfixiante para los rivales y su presencia en el campo m¨¢s constante para el Madrid, sobre todo fuera del ¨¢rea. Mbapp¨¦, hoy, es uno de esos jugadores en los que conf¨ªan m¨¢s sus rivales, volvi¨¦ndose locos para marcarle, que parte de su afici¨®n. Es m¨¢s temido por los otros que querido por los suyos, mientras el Madrid juguetea con cuatro delanteros tan distintos que no le importa, a d¨ªa de hoy, si Mbapp¨¦ marca contra el Espanyol un gol de penalti en lugar de marcar los cuatro que pudo de jugada. Casi siempre est¨¢ ¨¦l al final de las cifras, y en alg¨²n momento del juego.