Mondo Duplantis, el prodigioso volador sin l¨ªmites
El sueco, plusmarquista mundial de p¨¦rtiga, comenz¨® a saltar a los cuatro a?os
Cuando Mondo mira atr¨¢s y se acuerda de que desde que era un ni?o solo quer¨ªa ser como su ¨ªdolo, Renaud Lavillenie, le sobreviene una imagen: Berl¨ªn 2018, el momento que marc¨® un punto de inflexi¨®n en su carrera deportiva. Armand, Mondo, Duplantis, con apenas 18 a?os, super¨® al plusmarquista mundial franc¨¦s (6,16m) que hasta ese momento lo hab¨ªa ganado pr¨¢cticamente todo, y se proclam¨® campe¨®n de Europa de p¨¦rtiga con un salto de 6,05m. Nadie excepto Sergu¨¦i Bubka, el mito de Donetsk, hab¨ªa saltado tanto al aire libre hasta ese momento. Fue la final m¨¢s alta de la historia y el despegue de una jovenc¨ªsima leyenda. ¡°Sin esa final de Berl¨ªn no estar¨ªa donde estoy ahora¡±, dice Duplantis, 21 a?os, dos r¨¦cords mundiales, estrella mundial del atletismo, favorito al oro en sus primeros Juegos Ol¨ªmpicos (calificaci¨®n de p¨¦rtiga, 2.40 del s¨¢bado 31 de julio; final, 12.20 del martes 3 de agosto).
¡°Todo ha pasado en un abrir y cerrar de ojos¡±, reflexionaba Duplantis este julio en la Diamond League de Estocolmo. La primera vez que el prodigio sueco-estadounidense compiti¨® contra los mejores fue en 2017. Ten¨ªa 17 a?os y ya hab¨ªa logrado saltar 5,90m, una altura que en la p¨¦rtiga hace de selecci¨®n natural entre los muy buenos y los mejores. Y ah¨ª estaba Mondo, en Eugene, midi¨¦ndose con el plusmarquista mundial, Lavillenie, y con Sam Kendricks, el estadounidense hoy doble campe¨®n mundial. Cuatro a?os y 22 duelos despu¨¦s, llegaban ambos a Tokio con m¨¢s ambici¨®n que nunca. Ambos sol¨ªan luchar por el oro. Esta vez probablemente solo puedan aspirar a la plata, y no los dos. Kendricks ha dado positivo por covid. ¡°Para estar en las medallas tendr¨¦ que esforzarme por alcanzar nuevos l¨ªmites. S¨¦ que Mondo va a ser imbatible, as¨ª que nos vamos a divertir¡±, aseguraba Lavillenie en Estocolmo.
¡°Todo ha pasado en un abrir y cerrar de ojos¡±, dice el relevo del m¨ªtico Sergu¨¦i Bubka
La progresi¨®n de Mondo ha sido mete¨®rica. Tras los hist¨®ricos Europeos de Berl¨ªn, fue plata en los Mundiales de Doha en 2019 con 5,97m. Dej¨® la universidad, donde estudiaba Administraci¨®n de Empresas, y se hizo profesional. Poco despu¨¦s estaba batiendo dos veces el r¨¦cord del mundo. ¡°Ha progresado muy r¨¢pido, m¨¢s incluso de lo que esperaba¡±, dice su padre, Greg Duplantis, un expertiguista estadounidense de 5,80m que junto a la madre, Helena Duplantis, una antigua heptatleta sueca internacional, lo entrena desde la ni?ez. ¡°En Doha estaba un poco cansado y le faltaba entrenamiento, pero despu¨¦s mejor¨® mucho la preparaci¨®n f¨ªsica, esa fue la clave. Cuando empez¨® la temporada 2020, antes de salir a competir para Europa, llam¨¦ a Steve Chappell, el fabricante de las p¨¦rtigas de UCS Spirit, y le dije: creo que va a intentar hacer el r¨¦cord del mundo¡±.
Tras el primer intento en D¨¹sseldorf su confianza aument¨® tanto que Duplantis le pidi¨® a Chappell dos p¨¦rtigas m¨¢s duras. ¡°Env¨ªamelas a Europa¡±, le dijo, y su madre, Helena, se las baj¨® de Suecia hasta Torun (Polonia). En la ciudad de Cop¨¦rnico, en febrero, bati¨® el r¨¦cord mundial por primera vez: 6,17m. Una semana despu¨¦s, en Glasgow, nuevo r¨¦cord: 6,18m. En septiembre de ese mismo a?o super¨® 6,15m en Roma borrando por un cent¨ªmetro la plusmarca al aire libre que pose¨ªa Bubka desde 1994. Le dej¨® claro al mundo y a la historia que nadie, ni bajo techo ni en las condiciones traicioneras del aire libre, era capaz de volar m¨¢s alto.
Pese al par¨®n que supuso la pandemia, en 2020 Duplantis salt¨® diez veces por encima de seis metros. ¡°Eso demuestra que no es algo anecd¨®tico, nadie, ni Bubka, hab¨ªa saltado tantas veces esa altura en una misma temporada¡±, dec¨ªa su padre despu¨¦s de Roma. ¡°Todo ha salido muy bien. Pese a la pandemia y a lo que estaba pasando en el mundo he sido capaz de seguir haciendo buenos saltos¡±, admite el sueco.
¡°Es ¨²nico por su intuici¨®n, sabe saltar de mil maneras¡±, explica un experto
Salta seis metros como si fuera nada. Cuando Mondo agarra una p¨¦rtiga sabe exactamente lo que tiene que hacer. ¡°Se llama feel¡±, sostiene su padre. Es una especie de sexto sentido para esta disciplina que lo eleva a alturas inalcanzables para otros.
Steve Chappell, quien le hizo su primera p¨¦rtiga cuando ten¨ªa unos seis a?os, una Spirit del tama?o de una ca?a de pescar, lo llama intuici¨®n. ¡°En el aire se eleva mucho m¨¢s que Bubka, pese a que no agarra la p¨¦rtiga desde tan arriba como otros. Es r¨¢pido pero tampoco es el pertiguista m¨¢s r¨¢pido que se haya visto en la historia. Lo que lo hace ¨²nico es la intuici¨®n, sabe saltar de mil maneras distintas y sabe en cada momento lo que tiene que hacer. Nunca hab¨ªa visto algo as¨ª¡±.
Tal vez porque nadie empez¨® a doblar una p¨¦rtiga antes que ¨¦l. A los cuatro a?os ya saltaba en el jard¨ªn de su casa. All¨ª, en Lafayette, Luisiana, Estados Unidos, la familia Duplantis ten¨ªa una colchoneta donde Mondo ve¨ªa saltar a sus hermanos mayores, Andreas y Antoine. Quer¨ªa doblar la p¨¦rtiga como ellos. Su padre llam¨® a Chappell, quien le hizo al genio su primer instrumento: menos de tres metros de largo, extremadamente fino y flexible. ¡°El grado de flexibilidad de aquella p¨¦rtiga fue un nuevo campo de investigaci¨®n para nosotros. No sab¨ªamos que hab¨ªa ni?os tan peque?os haciendo este deporte¡±, recuerda Chappell desde Estados Unidos.
¡°Ha progresado muy r¨¢pido, m¨¢s de lo esperado¡±, sostiene su padre
A los siete a?os, Mondo participaba ya en el famoso mitin de Reno. ¡°Era una de las pocas reuniones a las que pod¨ªa ir porque a esa edad apenas hab¨ªa competiciones para m¨ª¡±, cuenta Duplantis. Desde los siete hasta los 12 a?os bati¨® todos los r¨¦cords del mundo de su edad: 2,33m, 2,89m, 3,20m, 3,86m, 3,91m, 3,97m¡ La gente se acercaba a pedirle aut¨®grafos.
Y ¨¦l se los ped¨ªa a Renaud Lavillenie. En ese mismo mitin de la capital de Nevada, Mondo conoci¨® al franc¨¦s en 2013. Nadie ha influenciado como ¨¦l la carrera deportiva de Duplantis. Mondo ten¨ªa un p¨®ster del plusmarquista franc¨¦s en su habitaci¨®n, su ¨ªdolo, el fuego que ha alimentado una ambici¨®n sin l¨ªmites, el mentor que le transmite su visi¨®n estrat¨¦gica en tant¨ªsimas competiciones, el rival con quien comparte entrenamientos, la obsesi¨®n por un mismo deporte, una amistad especial. ¡°Por entonces, yo estaba en los 3,90 metros, recuerda Duplantis. Lo admiraba porque estaba en la cima del mundo y era el que dominaba la p¨¦rtiga, y yo quer¨ªa estar ah¨ª. Y hoy, here we are¡¡±.
En Suecia lo paran por la calle para hacerse fotos con ¨¦l. Desde peque?o, Mondo pasa los veranos en Uppsala, una peque?a ciudad universitaria cerca de Estocolmo donde su madre, la heptatleta, entren¨® desde los 17 a?os. Ese v¨ªnculo lo llev¨® a decidirse por defender los colores de Suecia en 2015 y ahora, cuando salta en Estocolmo, las gradas enloquecen al o¨ªrlo hablar en el idioma local. Cuando le preguntan all¨ª c¨®mo est¨¢ gestionando toda esa vor¨¢gine medi¨¢tica, Mondo, un ?caro sin alas, la p¨¦rtiga le vale para volar, responde con los pies en la tierra. ¡°A veces siento que todo ha pasado demasiado deprisa¡±, dice. ¡°Todav¨ªa soy un ni?o, y me gustar¨ªa seguir si¨¦ndolo pero no puedo¡±.
Hay un antes y un despu¨¦s de Duplantis en el mundo de la p¨¦rtiga, no solo por los r¨¦cords, sino por la consistencia y la facilidad que demuestra sobre alturas casi siempre imposibles para todos los dem¨¢s. Y sus rivales lo saben y se desesperan y lo admiran. En Estocolmo, de los 21 saltos sobre seis metros que acumula Mondo desde 2018 (Bubka, en toda su carrera, hizo 46), Kendricks y Lavillenie destacaron uno: el 6,00 m bajo la lluvia del pasado junio en Karlstadt. ¡°Mi mejor salto lloviendo es 5,74¡±, dec¨ªa Kendricks. ¡°El de Renaud, 5,86. Estas cosas las recordamos porque son momentos memorables para los pertiguistas¡±. ¡°Mondo camina sobre el agua, hace lo que quiere. Estoy realmente impresionado¡±, conclu¨ªa Lavillenie.
Born to Fly, nacido para volar, como dice el documental sobre la estrella sueca que est¨¢ a punto de terminar su vecino de Lafayette Brennan Robideaux, pero con los pies en la tierra. Mondo Duplantis nunca subestima a sus rivales y sabe que la presi¨®n que sinti¨® este julio en Estocolmo al intentar hacer un tercer r¨¦cord mundial delante de toda su familia solo va a ser comparable a la que experimente y sea capaz de dominar en Tokio. De todos los aspectos que hacen a un gran pertiguista su padre destaca su fortaleza mental: ¡°Mondo es fuerte y tiene muy pocos l¨ªmites¡±.
Suscr¨ªbete aqu¨ª a nuestra newsletter especial sobre los Juegos de Tokio
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.