Maertens, arrollador en la contra reloj

De verdadero show se pudo calificar la exhibici¨®n de Freddy Maertens en la primera etapa larga contra reloj. A lo largo de un circuito bastante f¨¢cil, pero ¨²nicamente para hombres de fuerza, el campe¨®n belga consolid¨® totalmente su liderato hacia las cuatro y media de la tarde del domingo. Realmente, nunca hab¨ªa hecho una carrera contra el cron¨®metro tan buena en toda su vida. A Pollentier, su compa?ero de equipo, le sac¨® m¨¢s de minuto y medio y a Schuiten, del que se esperaba una reacci¨®n tras su discreta etapa pr¨®logo, m¨¢s de dos. Manzaneque, aunque perdi¨® 2'12", fue cuarto y s¨®lo se vio superado por PollentierPesarrodona, que hizo una primera parte de los 37 kil¨®metros muy bien, baj¨® su ritmo al final, debilitado por una diarrea que sufre desde el comienzo del Tour. La agradable sorpresa fue el tiempo de L¨®pez Carril, aunque perdiera 3'01". Pero es un ¨ªndice de su buena forma antes incluso de la monta?a. El que volvi¨® a decepcionar una vez m¨¢s, fue Oca?a s¨®lo vig¨¦simo noveno clasificado a casi cuatro minutos de Maertens. Hasta su compa?ero de equipo, Viejo, hizo mejor tiempo.

En la contra reloj, la gran decepci¨®n francesa fue Bernard Thevenet. Resentido de las heridas sufridas por la ca¨ªda en la etapa Angers-Caen, perdi¨® 3'22", con respecto a Maertens; ¨¦ste sin duda, ha puesto por medio una distancia que hasta bien entrada la Monta?a nadie le va a quitar. Gan¨® la contra reloj a lo Merckx, es decir, con una holgura impresionante, a una media casi incre¨ªble, superior a los 47 kil¨®metros por hora. Ni Thevenet ni nadie pod¨ªa l¨®gicamen e resistirle. Su estado actual de forma es formidable y la cercan¨ªa de su pa¨ªs parece que le acab¨® de dar alas.

Sorprendentemente L¨®pez Carril, duod¨¦cimo, fue el mejor espa?ol clasificado despu¨¦s de Manzaneque. Hizo, quince segundos menos incluso que su compa?ero Pesarrodona. Lo suyo fue anormal, lo mismo que hay ya que pensar que los casi cuatro minutos perdidos por Oca?a no parecen tan anormales. El de Priego ya no es nadie en la contra reloj. S¨®lo nos queda esperar a la monta?a, pero ya no confiamos tampoco estando hombres importantes como Van Impe, por ejemplo.

Tanto Maertens como Pollentier utilizaron una multiplicaci¨®n de 55, y ello significa la enorme pedalada que debieron emplear. Resulta curioso, pero, en los dos est¨¢ el ejemplo de dos distintos tipos de ciclistas. Maertens, potente y con piernas enormes y Pollentier, estilizado al estilo Merckx. Ambos, desde luego, pr¨¢cticos ciento por ciento.