El cese del presidente, produjo euforia compradora

Ha ocurrido un acontecimiento importante y la Bolsa ha reaccionado. El presidente Arias ces¨® el pasado jueves por la tarde. En esta ocasi¨®n los rumores no llegaron a la Bolsa y la respuesta de ¨¦sta fue a posteriori. El cese se interpret¨® como renovaci¨®n pol¨ªtica, renovaci¨®n del equipo econ¨®mico y renovaci¨®n de las expectativas. Todo este clima de renovaci¨®n s¨®lo lo pudo recoger una sesi¨®n de Bolsa, precisamente en una semana reducida a tres jornadas h¨¢biles por la festividad del martes, pero en dicha sesi¨®n, la euforia era grande y la recuperaci¨®n respecto a los d¨ªas precedentes, notable. Caras sonrientes y posiciones de compra sustituyeron el tono anterior de pesimismo y abstencionismo.El mi¨¦rcoles, ¨²ltimo d¨ªa de junio, se oper¨® en un ambiente pemista, con notable prodominio del papel. Durante el jueves continu¨® la misma t¨®nica, pero se vi¨® acentuada por las numerosas ampliaciones de capital que empezaban y los m¨¢s numerosos a¨²n descuentos de dividendos. El viernes fue cuando hubo el conocido cese de Arias y parec¨ªa que cambiaba todo cuando realmente segu¨ªan iguales los problemas de fondo. Queremos decir que esta recuperaci¨®n puede ser especulativa, simple aprovechamiento del suceso pol¨ªtico.

Pero saltos en las cotizaciones de veintitantos enteros s¨®lo pueden traer unas r¨¢pidas realizaciones de beneficios, que volver¨¢n a dejar el mercado pesado, como le corresponde, adem¨¢s, si tenemos en cuenta la importancia de las ampliaciones de capital que acaban de empezar. M¨¢s de 20.000 millones es mucho dinero a absorber, dado el entorno econ¨®mico general, y a pesar de los niveles de los cambios, si se entra por cupones.