El equipo de Ford, seguro de obtener su nominaci¨®n por el Partido Republicano

La decisi¨®n del presidente Ford de no anunciar el nombre de su compa?ero electoral hasta que haya sido nominado oficialmente candidato republicano a la Presidencia, se interpreta en los c¨ªrculos pol¨ªticos de Washington como una prueba de la confianza del equipo del presidente en que ganar¨¢ en la primera vuelta de la votaci¨®n que se celebrar¨¢ en la Convenci¨®n de Kansas C¨ªty, Missouri, dentro de diez d¨ªas.

Durante las ¨²ltimas semanas, la estrategia de Ronald Reagan fue obligar al presidente a anunciar el nombre de su running mate antes de que comenzara la Convenci¨®n. Reagan revel¨® el nombre de Richard Schweiker como su compa?ero electoral el pasado 26 de julio, rompiendo con el sistema tradicional, y en un intento de atraerse los votos de los delegados de los Estados del noreste.En cambio, Ford opt¨® por consultar a los delegados sobre la persona que podr¨ªa aspirar al puesto de vicepresidente, mediante una encuesta cuyos resultados se conocer¨¢n pocos d¨ªas antes de que se inicie la Convenci¨®n Nacional republicana. El portavoz de la Casa Blanca, Ron Nessen, manifest¨® que la elecci¨®n del compa?ero electoral de Ford se anunciarla ?de manera tradicional?, es decir, al d¨ªa siguiente de la votaci¨®n.

Para Reagan, que ya descubri¨® sus cartas, hubiera sido mejor que Ford anunciara el nombre de su candidato a la Vicepresidencia, y plantear la batalla abiertamente en la Convenci¨®n. Los estrategas del presidente quieren dar a la opini¨®n p¨²blica la impresi¨®n de que Ford sopes¨® cuidadosamente cada candidato y consult¨® a los compromisarios y l¨ªderes del partido antes de tornar su decisi¨®n.

S¨®lo unas serias dificultades en la captaci¨®n de delegados hubieran obligado a Ford a anunciar el nombre de su vicepresidente antes de la Convenci¨®n para, al igual que actu¨® Reagan, intentar atraerse a determinados grupos de compromisarios, simpatizantes del candidato a la Vicepresidencia.

La maniobra de Ronald Reagan, sin embargo, s¨®lo parece estar obteniendo un ¨¦xito relativo. Ayer seis delegados ?no comprometidos?, dos de Nueva York y cuatro de Nueva Jersey, anunciaron su decisi¨®n de apoyar a Reagan. Pero los treinta votos del Estado de Mississippi, esenciales para los dos candidatos, parece que ser¨¢n ganados por el presidente, pese a los intentos de Reagan y Schweiker, que visitaron esta semana a los delegados de este Estado, de inclinarlos hacia su bando.

La cuesti¨®n paname?a

El recelo de los miembros m¨¢s conservadores del partido hacia el senador Schwelker, que tiene un historial relativamente liberal, parece ser m¨¢s fuerte que las simpat¨ªas que su persona pueda tener entre los compromisarios del norte y de la costa este, tradicionalmente menos conservadores.Por ello, Schwelker se apresur¨® en los ¨²ltimos d¨ªas a hacer declaraciones que pudieran tranquilizar a los conservadores. Ayer, por ejemplo, manifest¨® que coincid¨ªa con Reagan en que los Estados Unidos tienen completa soberan¨ªa sobre el canal de Panam¨¢, aunque asegur¨® que analizar¨ªa con ?esp¨ªritu abierto? cualquier tipo de negociaci¨®n con Panam¨¢.

El tema del canal de Panam¨¢ fue muy importante durante las elecciones primarias, al sostener Ford y Reagan posturas abiertamente contrapuestas sobre el mismo. El ex gobernador de California se manifest¨® dispuesto a defender, por todos los medios, la presencia norteamericana en la zona y el control del canal. Ford mantuvo tesis mucho m¨¢s moderadas y habl¨® de la necesidad de negociar un nuevo acuerdo con el Gobierno paname?o.

Mientras tanto, el actual vicepresidente, Nelson Rockefeller, inici¨® por su cuenta la campa?a electoral al atacar al candidato dem¨®crata, Jimmy Carter. Rockefeller calific¨® de ?juego duro? y de ?operaciones despiadadas y crueles? las actuaciones pol¨ªticas de Carter y dijo que esto estaba en contradicci¨®n con su anunciada pol¨ªtica de ?amor y fraternidad?. Carter se hab¨ªa referido en t¨¦rminos muy duros a principios de esta semana a los dos candidatos republicanos.

Rockefeller, que anunci¨® en noviembre pasado su intenci¨®n de no presentarse a la reeelecci¨®n para la Vicepresidencia, pronunciar¨¢ un discurso en el segundo d¨ªa de la Convenci¨®n Nacional republicana, pero no ser¨¢, como se esperaba, el encargado de presentar la candidatura de Ford a la nominaci¨®n. Se cree que su discurso se centrar¨¢ esencialmente en atacar a los dem¨®cratas, para intentar unificar al partido republicano muy dividido por la re?ida lucha mantenida por Ford y Reagan, en la v¨ªspera de la votaci¨®n.