Programa de austeridad en Italia

La Rep¨²blica Italiana tiene que dar un salto de cualidad respecto al pasado, ha dicho ayer tarde el presidente del Consejo de Ministros, Giulio Andreotti, hablando por televisi¨®n, al t¨¦rmino de un Consejo de Ministros que no figuraba en programa.

Con un tono sereno y puramente informativo, el primer ministro ha anunciado al pa¨ªs las medidas econ¨®micas urgentemente adoptadas para contener la inflaci¨®n y conjurar la especulaci¨®n contra la lira, El tipo de descuento o el inter¨¦s que los bancos pagan por los cr¨¦ditos concedidos por el banco central, ha sido aumentado en tres puntos, alcanzando el r¨¦cord del 15 por 100. Se ha impuesto una tasa temporal del 10 por 100 en la compra de divisas con el objeto de conjurar la especulaci¨®n. A partir del lunes pr¨®ximo en las exportaciones con cr¨¦ditos a corto plazo la financiaci¨®n obligatoria en divisas que desde el 6 de mayo pasado era del tres por ciento pasar¨¢ a ser del 50 por 100.

Andreotti ha criticado a los periodistas que han juzgado su pol¨ªtica econ¨®mica de mazazo Y ha tratado de serenar a la opini¨®n p¨²blica contra optimismos y pesirnismos injustificados. Refiri¨¦ndose al proyecto de presupuesto del Estado para 1977 presentado antes del 30 de septiembre al Parlamento, el primer ministro ha recordado a los italianos que no pueden vivir del cr¨¦dito de los dem¨¢s sin arreglar sus propias cuentas. Es necesario para ello una pol¨ªtica de austeridad, cuando la deuda con el exterior es de 14.000 millones de liras y el d¨¦ficit toca los 16.000 millones en petr¨®leo, 3.000 millones en materias primas y 5.000 millones en productos alimenticios. Aunque la Comunidad Econ¨®mica Europea haya prometido abastecer a Italia de 40.000 toneladas de carne y 10.000 toneladas de mantequilla y otros productos a precios m¨®dicos, es necesario reducir los consumos de lujo y poner los precios de los servicios a niveles europeos.

Control monetario

El Gobierno ha recurrido a la medida tradicional de restringir la liquidez ante una lira que ayer cotiz¨® en Mil¨¢n a 873 liras por un d¨®lar en vez de 859,70 del d¨ªa anterior.

Italia espera el resultado de las elecciones alemanas, porque de la escandalosa salud del marco alem¨¢n depender¨¢ sin duda alguna el retorno a la normalidad. Andreotti ha recordado tambi¨¦n la crisis paralela de la libra. Consciente de la precariedad de su Gobierno, que se sostiene con un frente de abstenciones que va de los comunistas y socialistas a los republicanos y liberales, Andreotti no se muestra excesivamente preocupado ante un panorama pol¨ªtico que de d¨ªa en d¨ªa se presenta m¨¢s inquieto y m¨®vil, al borde de un en¨¦simo barajar la baraja.

Los comunistas y los socialistas han presionado a Andreotti, pidiendo que el aumento de precios se discuta en el Parlamento. El comit¨¦ interministerial de precios ha aumentado solamente el gas-oil y los aceites combustibles, dejando para el Parlamento la discusi¨®n del aumento de ferrocarriles, tel¨¦fonos, correos y, al parecer, los cigarrillos. El republicano La Malfa sigue insistiendo en la gravedad de la situaci¨®n y en la inevitabilidad del compromiso hist¨®rico, coincidiendo con el l¨ªder comunista Giorgio Amendola, su viejo amigo, a quien, sin embargo, el sindicalista Luciano Lama acusa de iluminista y de excesiva blandura.