Aumenta la agitaci¨®n laboral en Italia

La situaci¨®n es incierta y tensa. Desde el viernes pasado una oleada de paros espont¨¢neos ha obligado a la gremial social-comunista (Confederaci¨®n General Italiana del Trabajo, CGIL) a pasar a la lucha. En realidad, los l¨ªderes sindicales temen la desarticulaci¨®n del movimiento ante la presi¨®n de la base. Es probable que se decidan por la huelga general en las tres pr¨®ximas semanas. Ayer el Gobierno ha vuelto a consultar a los sindicatos sobre el aumento del precio de la electricidad y de los tel¨¦fonos. Mientras los sindicalistas comunistas, persuadidos de la gravedad del momento, coinciden con el Gobierno en que lo que importa es luchar contra la inflaci¨®n y salvar el empleo, los socialistas son m¨¢s exigentes.El Gobierno, por su parte, est¨¢ decidido a luchar contra los evasores fiscales con mano dura. A primeros de noviembre comenzar¨¢n a funcionar n¨²cleos especiales de la llamada guardia de Hacienda. Andreotti ha declarado al diario Rep¨²blica que 196 personas ya han sido arrestadas por fraude. No pasa d¨ªa sin anunciarse multas y secuestros. Cinco mil esterlinas de oro (40 kilos) han sido secuestradas ayer en la frontera con Suiza.

El ministro del Tesoro, Stammati, al ilustrar el martes pasado en el Parlamento el balance de previsi¨®n del Estado para 1977, ha dicho que Italia, con la colaboraci¨®n de los pa¨ªses de la Comunidad Europea y otros, puede contribuir todav¨ªa por los elementos de estabilizaci¨®n que est¨¢ introduciendo en su sistema a asegurar el desarrollo de los intercambios comerciales en el mundo.

Pero, paralelamente, el l¨ªder de la Uni¨®n de Trabajadores del Metal hizo ayer un llamamiento para un huelga general en se?al de protesta contra las medidas de austeridad gubernamentales aprobadas el pasado viernes. El optimismo oficial choca con la sombr¨ªa realidad laboral.