El absentismo laboral, una protesta inconsciente contra el sistema de trabajo
El absentismo laboral; la inadaptaci¨®n laboral por factores personales, la psicopatolog¨ªa laboral en torno a problemas como el desempleo, la jubilaci¨®n o la incompetencia; la llamada neurosis de renta; la psicodinamia de la huelga;... estos fueron los grandes temas que ocuparon a especialistas en el recientemente celebrado Simposium Nacional sobre aspectos actuales de psicolog¨ªa y psiquiatr¨ªa laboral.El absentismo laboral preocupa a los Gobiernos. Parece responder a unos condicionantes, como la propia patolog¨ªa, consecuencia de una poblaci¨®n m¨¢s longeva, m¨¢s tarada y m¨¢s exigente de salud as¨ª como a los factores econ¨®micos que al evolucionar favorablemente, impulsan a las motivaciones no salariales del trabajo. Sin embargo la psicolog¨ªa de las profundidades aport¨® valiosos elementos interpretativos a la comprensi¨®n del problema, descubriendo, por ejemplo, la dimensi¨®n de protesta m¨¢s o menos inconsciente frente a las condiciones en que muchas veces se desenvuelve el trabajo. Es lo que se ha calificado como absentismo reivindicativo.
Seg¨²n Nogales Huerta, el absentismo laboral aument¨® en nuestro pa¨ªs porque ?las relaciones laborales se han hecho m¨¢s fr¨ªas y exigentes, m¨¢s reglamentadas y burocratizadas, por lo qu¨¦ sinti¨¦ndose los individuos m¨¢s aislados, han buscado tambi¨¦n en la reglamentaci¨®n de su situaci¨®n, el amparo de leyes sociales protectoras que podr¨ªan darles amparo... compensaci¨®n a lo que han estimado su enfermedad?. Es el sentido de la enfermedad como recurso o la enfermedad como refugio al que aluden buena parte de los psicosoci¨®logas actuales.
Lo que se ve agravado con el hecho de la evoluci¨®n de la medicina ?perdiendo su humanismo para cambiarlo por la exploraci¨®n instrumental, y la abundante y polimorfa farmacopea. La reglamentaci¨®n de los servicios sanitarios y sociales en m¨²ltiples especialidades, ha animado, tentado, ilusionado a los trabajadores a recibir multitud de prestaciones asistenciales, que indirectamente ha infundido en los trabajadores sanos y enfermos un mayor y angustiado sentimiento de enfermedad. Esto ha descartado en la mente de los enfermos toda solidaridad hacia el medico de cabecera, que creemos sin duda que podr¨ªa resolver, en la generalidad de las enfermedades banales, su pronta y total curaci¨®n?. Aparece as¨ª el sentido de la enfermedad como compensaci¨®n de una deficiencia en las relaciones humanas: el deterioro de las relaciones personales y laborales llevar¨ªa a buscar la enfermedad como un procedimiento vicario de suplii el vac¨ªo existente.
Enfermedades frecuentes
Se considera que cierto tipo de enfermedades ?deben ser estudiadas como enfermedades del trabajo. Son las que se encuentran m¨¢s frecuentemente tales como bronquitis, asma, gastritis, lleitis, angor, pseudo-angor, depresiones, ci¨¢ticas, artropat¨ªas?... Coinciden con buena parte de lo que es considerado como enfermedad psicosom¨¢tica: ?Creemos que la patolog¨ªa laboral es fundamentalmente psicosom¨¢tica?, asegur¨® Manuel Varela.?El trabajador no se siente culpable de su afecci¨®n sino que culpa al empresario -prosigue Manuel Varela-. Al estar enfermo queda liberado de sus obligaciones laborales pero adquiere la molesta obligaci¨®n de realizar el necesario esfuerzo para alcanzar su alta y permitir ser controlado por los sucesivos partes semanales o colocarse prendas individuales de protecci¨®n. El absentista laboral por tensi¨®n en el trabajo, busca m¨¢s su hogar que el hospital... El mundo de agresi¨®n impersonal burocr¨¢tica en que el absentismo se establece desde el momento que adquiere la baja, es el mejor caldo de cultivo para despertar la conflictividad.?
Seg¨²n estos informes, ?dentro de las modas de absentismo, situadas en edades extremas, es la superior a los 45 a?os, la que m¨¢s afecta.... En las edades medias, de veinticinco a 45 a?os, se produce una meseta en la curva del absentismo y hacen eclosi¨®n afecciones psicosom¨¢ticas... El absentismo es mayor a turno partido por afecci¨®n psicosom¨¢tica podr¨ªa explicarse por alejamiento de hogar en horas muertas sin estar trabajando; repercusi¨®n psicol¨®gica de comer fuera o escaso tiempo para comer con p¨¦rdida de habitos burgueses (siesta, TV, etc); posible prolongaci¨®n de jornada en puestos de trabajo de los adictos a la direcci¨®n.
?Lo mejor ser¨¢ -concluye esta ponencia- interpretar al absentitsta como aquel que sopesando los pros y los contras de lo que piensa de s¨ª mismo, prefiere, al encontrarse o sentirse enfermo, no acudir al trabajo. Sabemos que un capataz de personalidad r¨ªgida, perfeccionista, puede crear m¨¢s absentismo (experiencia de
Foco Scott) y m¨¢s enfermedad que una epidemia gripal.?
Un remedio inconsciente
El absentismo laboral, se presenta, a la luz de estas investigaciones, como una respuesta inconsciente a problemas que, sin embargo, s¨®lo pueden ser resueltos por v¨ªa inconsciente. Las dificultades en las relaciones personales; los conflictos en las empresas; los problemas de liderazgo, sumisi¨®n y rebeld¨ªa; el conflicto con la autoridad; las tensiones de competencia en identificaciones de los compa?eros de trabajo con personajes internos primitivos (padre, madre ... ); las tensiones no asumidas ... ; todos estos ser¨ªan los factores que llevar¨ªan a enfermar y a faltar al trabajo a millones de ciudadanos cuyo organismo, en lugar de asumir esos conflictos y trabajarlos, por una v¨ªa racional, optar¨ªa por el camino de la enfermedad y la no asistencia al puesto de trabajo.
"En la empresa espa?ola es posible el cambio"
?Qu¨¦ es lo que debe cambiar en la empresa actual?-Habr¨ªa que desterrar las desconfianzas mutuas; lograr que el de arriba y el de abajo se pongan en los zapatos del otro y act¨²en teniendo esto presente; que los objetivos no sean incomprensibles porque est¨¦n marcados desde intereses individuales; que no se nieguen, ni se eludan, ni se repriman los conflictos del grupo de tarea; que no se llegue a soluciones intermedias; suprimir la competencia nociva que anula las capacidades y habilidades de los otros miembros; hacer desaparecer el desprestigio en forma de rumor hacia las capacidades de otro; abandonar el control impuesto desde fuera; transformar el ambiente restrictivo. Desterrar estas actitudes supone un aprendizaje laborioso y lento por parte de directivos, jefes, mandos intermedios, empleados, obreros y dem¨¢s colaboradores.
Ese cambio al que ustedes se refieren plantea profundas resistencias ?Qu¨¦ condiciones se tendr¨ªan que dar para hacer posible el cambio?
-Las resistencias al cambio pueden venir por los dirigentes o por los colaboradores. A veces, estas resistencias son insalvables y hacen que el aprendizaje de estas actitudes positivas sea imposible y que el cambio no se produzca. Eso no es una tarea f¨¢cil pero es posible. Es imprescindible que una persona de la empresa que tenga poder, por ejemplo el gerente, el director general, los directores o ejecutivos, detecten las dificultades de la empresa y quieran honradamente encontrar una soluci¨®n.
Ustedes ponen en la din¨¢mica del grupo la posibilidad de cambio en la empresa ?por qu¨¦ esa insistencia?
-Efectivamente, as¨ª lo creemos, porque el consenso grupal es el ¨²nico capaz de cambiar los sistemas en los que trabajan y viven las personas. En el grupo se pueden cambiar las creencias, los valores y las interacciones negativas de los componentes. Se busca que el l¨ªder del grupo, el directivo o el jefe, no piense ni act¨²e ni sienta a su capricho, seg¨²n perciba subjetivamente al grupo y sin contar con ellos, sino que encuentre la eficacia de la tarea en coordinar y potenciar lo que piensa, siente y hace democr¨¢ticamente todo el grupo para realizar la tarea.
?Qu¨¦ resultados reales se obtienen con intervenciones en empresa del tipo de la que est¨¢n ustedes describiendo?
-Partimos de que se ha de conseguir una rentabilidad mayor, porque el grupo de trabajo es m¨¢s eficiente al emplear las energ¨ªas en el aprendizaje de nuevas t¨¦cnicas, de nuevos sistemas de trabajo y direcci¨®n y no en cr¨ªticas bald¨ªas. Se obtiene una mayor seguridad y confianza profesional para iniciar funciones nuevas. Cada uno se responsabiliza de su tarea y da responsabilidad a sus colaboradores. Se fomenta la cr¨ªtica prsonal sobre la propia actividad cara a cara por parte de todos. Se buscan formas de trabajar en equipo y no tanto individualmente. Se acepta que se nos pida adultamente responsabilidad de nuestro trabajo. Se aprende a controlar sanamente el aumento normal de conflictividad que surgir¨¢ inicialmente por este esp¨ªritu abierto. Se descentraliza la estructura y se conf¨ªa en la labor de los colaboradores. Se ejerce m¨¢s el liderazgo democr¨¢tico y participativo. Se consigue una mejor moral de trabajo, como fruto de unas tareas autorealzantes y responsabilizadoras. Se aprende a tomar decisiones realistas y acertadas.
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