Hassan ll desea un eje Par¨ªs-Madrid-Rabat
Deseo la creaci¨®n de un eje Par¨ªs-Madrid-Rabat, declar¨® el rey de Marruecos, Hassan II, poco antes de iniciar ayer su viaje oficial, de tres d¨ªas a Francia, donde mantendr¨¢ con el presidente Giscard d'Estaing dos conversaciones sobre la instalaci¨®n de una central nuclear francesa en Marruecos y un posible aumento de ayuda econ¨®mica de Par¨ªs para el desarrollo de su pa¨ªs.
Hassan II, a quien acompa?aron varios miembros de su familia y un grupo de consejeros, entre ellos el coronel Dlimi, fue recibido por el presidente en el aeropuerto de Orly. Inmediatamente se traslad¨® al palacio de Trian¨®n, en Versalles, que ser¨¢ su residencia oficial durante los pr¨®ximos d¨ªas.El soberano dijo, en relaci¨®n con el Sahara, que ?controla la situaci¨®n? y se?al¨® que con sus enfrentamientos con Argelia no tiene nada que ganar, y s¨ª mucho que perder?. ?Estamos -dijo- condenados a vivir juntos y, en consecuencia, a negociar.?
En su entrevista con una emisora francesa, Hassan II anticip¨® que est¨¢ dispuesto a entrevistarse con el coronel Bumedian, presidente de Argelia.
A prop¨®sito del ?eje Madrid-Par¨ªs-Rabat?, apunt¨® que a pesar de que en un momento dado, el contencioso del Sahara complic¨® las cosas, ahora podr¨¢ hacerse, y ello ser¨ªa beneficioso para la prosperidad y el entendimiento de Africa y Europa?.
Hablando del petr¨®leo, Hassan II, manifest¨® que aunque su pa¨ªs no es un productor, cree ?poder asegurar? que la pr¨®xima subida de los crudos ?no ser¨¢ importante, porque los pa¨ªses productores no tienen inter¨¦s en arruinar a sus clientes?.
Hassan II a?adi¨® que en sus conversaciones con Giscard sobre su deseo de comprar una central nuclear, puntualizar¨¢ que esta no ser¨¢ para hacer una bomba at¨®mica, sino para producir electricidad.
A juicio de Hassan, en estos momentos las relaciones Par¨ªs-Rabat son serenas como nunca lo han sido. Por otra parte, el rey y el presidente mantienen relaciones personales excelentes. Hassan asegura que Giscard es un copain (compa?ero) para ¨¦l, por afinidades ?de generaci¨®n? y, sobre todo, por afinidades ?intelectuales?.
Las medidas de seguridad en torno a su persona ser¨¢n semejantes a las adoptadas con motivo de la visita de don Juan Carlos I el pasado octubre.
Compra de armas
En lo que concierne al problema del Sahara, en los c¨ªrculos pol¨ªticos se opina que si Giscard d'Estaing fue en un principio, m¨¢s favorable a Marruecos, ¨²ltimamente su actitud se ha deslizado hacia el neutralismo. De ah¨ª que durante esta visita el presidente har¨¢ todo lo posible por esquivar la cuesti¨®n, al menos en sus declaraciones p¨²blicas, para no comprometerse con Argelia.En el mismo sentido, parece tambi¨¦n que por primera vez Hassan II se manifiesta deseoso de no envenenar el problema y, en consecuencia, de negociar. Por lo dem¨¢s, es probable que Rabat aproveche esta ocasi¨®n para llegar a un arreglo sobre una eventual compra de armas en Francia.
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