Los ministros de Carter comienzan a comparecer ante el Senado
Una pol¨ªtica exterior de ?decidido apoyo a los derechos humanos?, un plan de control de las ?operaciones encubiertas? de los servicios de inteligencia norteamericanos en el exterior y el deseo de llegar a un acuerdo sobre limitaci¨®n de armamento con la Uni¨®n Sovi¨¦tica, adem¨¢s de la intenci¨®n de desarrollar una pol¨ªtica internacional ?aperturista?, fueron algunos puntos clave del pensamiento de la nueva Administraci¨®n dem¨®crata revelados ante el Senado por varios futuros ministros de Carter.
Tres secretarios del Gabinete dem¨®crata fueron ?examinados? ayer por distintos comit¨¦s del Senado norteamericano, a quien corresponde aprobar todos y cada uno de los nombramientos hechos por el presidente electo. Aunque a¨²n no se hizo p¨²blica la decisi¨®n del legislativo, parece evidente que todos los ministros ?aprobaron?, e incluso algunos sacaron nota.Cyrus Vance, secretario de Estado designado por Carter, anunci¨® que el nuevo Gobierno se inclinar¨¢ por defender el mantenimiento de los derechos humanos en pol¨ªtica exterior. Vance, que estuvo ¨¦l mismo implicado a nivel decisorio en la guerra de Vietnam durante sus a?os en la Administraci¨®n Johnson, reconoci¨® que esa guerra hab¨ªa sido un ?error? de Norteam¨¦rica y que a ¨¦l personalmente le hab¨ªa servido de lecci¨®n.
Para el nuevo secretario de Estado, Norteam¨¦rica debe comprender la inutilidad de apoyar a reg¨ªmenes impopulares y tambi¨¦n que no se puede implantar un sistema de Gobierno de tipo occidental en cualquier lugar del mundo. Cyrus Vance dijo asimismo ante el comit¨¦ de Relaciones Exteriores del Senado que preparar¨ªa un plan para suprimir las ?acciones encubiertas? de la inteligencia estadounidense, en pa¨ªses extranjeros, f¨®rmula de actuaci¨®n ¨¦sta que s¨®lo es justificable en ?circunstancias extraordinarias?.
Vance anunci¨® tambi¨¦n que el nuevo Gobierno americano se inclinar¨ªa m¨¢s por resolver problemas como la distensi¨®n, el control de armas y el problema del hambre en el mundo que por la seguridad nacional, tema que hab¨ªa sido prioritario en la anterior Administraci¨®n. La iniciaci¨®n de negociaciones sobre el canal de Panam¨¢, el apoyo a los gobiernos de mayor¨ªa negra, en Rodesia y Sud¨¢frica y la posibilidad de normalizar relaciones con Vietnam, Cuba y Angola, fueron otras, de las revelaciones hechas por el nuevo secretario de Estado, quien reconoci¨® que el ?boicot? comercial a Cuba hab¨ªa sido un fracaso.
El ministro de Defensa, Harold Brown, manifest¨® a otro comit¨¦ del Senado que ve¨ªa posible una reducci¨®n del presupuesto militar en 5.000 o 7.000 millones de d¨®lares, pero ?no inmediatamente?. Brown se mostr¨® partidario de acelerar las conversaciones de limitaci¨®n de armas estrat¨¦gicas con la URSS y sali¨® al paso de los informes que, aseguran la existencia de un predominio militar sovi¨¦tico, diciendo que Norteam¨¦rica no debe plantearse como un desaf¨ªo cada actuaci¨®n de los rusos en el campo del armamento. Griffin Bell, designado por Carter ministro de Justicia, tambi¨¦n testific¨® ayer ante un comit¨¦ del Senado, entre cuyos miembros figuraba Edward Kennedy. Bell reconoci¨® haber cometido algunos errores en su actuaci¨®n como juez en el Estado de Georgia, pero dijo que hab¨ªa luchado contra la segregaci¨®n racial y colaborado en la ?integraci¨®n? de m¨¢s de cien escuelas.
El nombramiento de Bell fue el que provoc¨® mayor pol¨¦mica, al oponerse al mismo los l¨ªderes de los derechos civiles, y era uno de los pocos que podr¨ªa haber provocado la negativa del Senado a ratificarlo, lo que ya no parece probable. Bell anunci¨® que hab¨ªa decidido nombrar a un juez negro procurador general y dijo a los senadores que ya sab¨ªan que ¨¦l no era un ?liberal extremo?, sino un moderado, y que actuar¨ªa como tal en su cargo. Los ex¨¢menes del Senado a los nuevos ministros continuar¨¢n en los pr¨®ximos d¨ªas sin que en principio haya motivos para esperar ninguna negativa a ratificar los nombramientos.
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