El Barcelona no brill¨® en el Magari?os

Estudiantes no pudo dar la sorpresa de batir a los azulgrana, a pesar de que lo intent¨® con todos los medios a su alcance, pero la mayor estatura de los l¨ªderes, el mejor banco y las decisiones del colegiado Vidal hicieron imposible la tarea encomendada por Jos¨¦ Ram¨®n Ramos a los suyos.De entrada los colegiales sorprendieron con un cinco inicial inesperado que integraban Gil, Gonzalo, Soriano, Cambronero y Gregg y con defensa al hombre. Lazic puso en juego a Escorial, Flores, Guyette, De la Cruz y Miguel Angel Estrada y se not¨® su temor cuando se ve la defensa en zonas. El principio fue muy apretado y dio la impresi¨®n que Estudiantes estaba en su d¨ªa bueno; el tanteo era corto y el Barcelona no acertaba a resolver el pegajoso marcaje de los locales. Flores en s¨®lo tres minutos (7-9) contaba ya con,tres personales y le sustituy¨® Ansa. Se sucedieron los empates y las cortas ventajas siempre a favor de los catalanes (lo m¨¢s, de seis puntos) y en el minuto quince, ya con muchos cambios en los dos equipos, los de Ramos se adelantaron instant¨¢neamente con 31-30. Aunque el equipo base de Estudiantes respondi¨® bien, con Beltr¨¢n incluido, se tem¨ªa que la sobrecarga de personales hiciera mella y los hombres del banco no respondieran como sus compa?eros. En el descanso, cinco puntos (43-48) y las espadas segu¨ªan en alto.

En la segunda mitaj, entre las facilidades defensivas a que obligaban las muchas personales y a que Ramos orden¨® zonas de salida, cuando individualmente se hab¨ªa cumplido bien, el Barcelona se dispar¨® y puso nueve puntos de margen al minuto cinco (51-60), que se convirtieron en trece dos minutos despu¨¦s (53-66). Jos¨¦ Luis Sagi-Vela ya hab¨ªa entrado por Soriano, que hab¨ªa cumplido un buen partido, pero ya ten¨ªa cuatro faltas en su haber. Jos¨¦ Luis no acert¨®, con el tiro a media distancia, a romper la zona del rival y aunque en un t¨ªmido pressing se lleg¨® a estar a tan s¨®lo cuatro puntos en el marcador, la eliminaci¨®n de Beltr¨¢n dej¨® a Gregg pr¨¢cticamente sin ayudas y, aunque el americano cumpli¨® su labor, era poca ante tres ?torres? que en todo momento tuvo el Barcelona en cancha, siempre con mejor banco que los madrile?os, donde se notaron mucho m¨¢s las sustituciones.

Por otra parte Vidal segu¨ªa con sus apreciaciones particulares de las faltas. y en sus decisiones siempre sal¨ªa malparado Estudiantes. De ah¨ª que al final, a pesar del ¨²ltimo intento desesperado, se llegara con un 83-92 que nos parece excesivo a todas luces, pues ni el Barcelona brill¨® como deb¨ªa, ni tampoco se mostr¨® superior para ese resultado. Un r¨¦cord del partido es que se pitaron diecinueve. personales.